CAPITULO CUATRO

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Actualidad.

Al ir ingresando la chica de cabellos dorados hacia el interior de aquel enorme edificio uno a uno de los locatarios la veían pasar, para ellos era un cliente más dentro de aquel lugar. "Adelante señorita, que se le ofrece?", " venga y mire lo que tenemos para usted" o cosas como: "el perfume de hoy es un aroma exótico proveniente desde Europa". Todo eso y más eran las frases que Pacífica Noroeste escuchaba por cada local por el que ella pasaba, ya nada le llamaba la atención, para ella todo lo que veía a su alrededor era nada más que su pasado, ese pasado al cual ya no quería regresar. Aun así poco de lo que veía le sacaba varias sonrisas pues se había dado cuenta que ni un sólo paparazzi o la prensa estaba tras ella causando estrés en su nuca, al fin era libre de ir a donde quisiera o hacer lo que quisiera, todo lo tenia para ella sola.

Después de tanto caminar se detuvo a descansar un poco, ahora si podia expresar el dolor que sentia en sus pies. Despues de varios minutos alli en una de las bancas del centro comercial podia escuchar las risas de dos chicas, en seguida la Noroeste se puso en pie pues aquellas risitas no eran mas que las de dos personas que ella conocia a la perfeccion, se podia ver salir de un local de lenceria a una joven asiatica de cabello oscuro la cual portaba un elegante vestido color vino, por otro lado justo detras de ella venia otra joven con un volumen corporal algo notable ante la sociedad, esta llevaba puesto un vestido aun mas llamativo que el de la asiatica.

Se trataba de Candy y Greta, las mas intimas amigas de los Pines.

Pacifica: No puedo dejar que ellas me vean (penso) si eso llega a pasar estoy segura que se lo diran a los gemelos.

No tuvo otra opcion mas que salir de ese lugar y correr a un lugar donde ella pudiera estar sola, al momento recordo la cascada y la roca en la que alli podia estar mas que relajada. No lo dudo dos veces y se fue directo rumbo aquel hermoso y tranquilo paraiso, al estar alli volvio a sentarse sobre la roca y comenzo a perderse en aquel hermoso lugar. Alli se encontraba la unica heredera de la familia Noroeste; Pacifica Noroeste.

Pacifica: Porque me siento de esta forma, que es lo que pasa conmigo?.

Cuando se dio cuenta se fijo en su movil, ya pasaban de las tres de la tarde y ella aun seguia en ese lugar, solo suspiro profundo y comenzo a caminar hacia la Mansion donde alli estaria al igual que en ese lugar sola sin hacer absolutamente nada. Se detuvo justo en la vereda y girandose hacia la direccion donde se encontraba el pueblo volvio a ver su movil regresando al pueblo y tal vez comer algo en cualquier lado o tal vez en el local de Susy.

Saliendo del Bosque Pacífica camina con algo de temor en si pues aún tenía esa sensación de que alguien pudiera verla, era normal pues estaba consiente de lo que había hecho en el pasado, a pesar de todo lo que pasaba por su cabeza no dejaba de disfrutar lo colorido que se había puesto el pueblo de Gravity Falls. Después de varios minutos la chica Noroeste se encontraba justo al frente de el restaurante de comida rápida de "Susy", al ingresar tomo una de las mesas del fondo quien fue atendida por una chica de tez morena.

Pacífica: (viendo la carta)

Mesera: Va a ordenar señorita?.

Pacífica: Ammm...

Mesera: Si?...

Pacífica: Ammm si, una hamburguesa con papas fritas y un refresco por favor. (Le sonríe)

La Morena le devuelve la sonrisa y tomando la carta se dirige hacia el interior de la cocina, pasados diez minutos la Noroeste degustaba con gran satisfacción su pedido mientras que sin darse cuenta de lo que pasaba a su alrededor varios de los comensales la observaban con total extrañeza como si nunca hubieran visto a alguien comer a esa velocidad, al haber terminado y después de un último trago a su bebida esta suelta un gran erupto causando la risa de todos los allí presentes. ¿En verdad se trataba de la chica Noroeste?, sus mejillas comenzaron a tornarse de un rojo carmesí mientras solo dejaba por encima de la mesa la cantidad de 10.85 de dólar salio de aquel local de comida rápida.

Si tan solo alguien se hubiese topado con ella habría pensado que la rubia estuviera enferma y que su temperatura se encontraría cerca de los 38°C, pero no, no fue así, más bien todo lo contrario. Pacífica solo siguió su camino por las alambradas calles de Gravity Falls, al llegar a la plaza la cual se considera como el corazón del pueblo nuestra rubia logra ver como todo se conectaba hacia el centro de esa plaza.

P.o.v Pacifica

Mi tono de piel comenzo a regresar en lo que buscaba una banca en dicho lugar, no paso mucho tiempo y alli se encontraba el area de descanso, varios locales de comida estaban alli, camine hacia una de esas mesas y colocando mi bolso y celular sobre las mismas alli me quede para descansar un rato en lo que pensaba que hacer en ese lugar. No podia creer en lo hermoso y colorido que se habia puesto el pueblo en estos dos años, tambien se podia ver como todos se habian olvidado de aquel horrible suceso con ese asqueroso triangulo de un ojo, era un lugar totalmente diferente. Vi mi movil y ya marcaban las 16:45, vaya como pasa tan rapido el tiempo, no tuve otra opcion mas que irme de ese lugar y tal vez no se quisas regresar otro dia y disfutar de un bocadillo.

Despues de tanto caminar llegue justo a la vereda la cual conducia rumbo a la cabaña del misterio, de pronto senti como mi ritmo cardiaco comenzo acelerar por si solo, "que ridiculo" pense, era obvio que latia por este sentimiento que siento por el castaño, mis sentimientos hacia el chico Pines eran sinceros, no lo dude mas, mi destino era nada mas y nada menos que la cabaña del misterio.,

Narrador

La joven Noroeste se encontraba recorriendo la vereda que daba a la cabaña de el señor Stanford y Stanley Pines, al menos eso es lo que ella creia pensar pues se habia olvidado por completo que ahora el dueño de esa cabaña era Sos, el junto con su abuela eran los nuevos dueños de dicho negocio. Ahora nuestro corpulento amigo se habia convertido en el nuevo Señor Misterio.Y alli estaba, justo frente a la entrada principal de aquel rustico lugar la rubia decidio llamar a la puerta con una mano temblorosa, era obvio que su cuerpo la estaba traicionando, sus piernas no paraban de temblar, y no hablemos de su rostro, su quijada se movia por si sola como si la epoca de invierno radicara en ella.

Nada, no ocurria absolutamente nada.

Pacifica: Creo que no se encuentra nadie, je, estoy de suerte.

Sos: Quien esta de suerte?.

Pacífica: Eh...

Al girarse pudo ver al joven que llevaba encima varias cajas, por tal motivo logro escapar sin problema alguno.

Abuela: (abre la puerta) Dijiste algo cariño?.

Sos: (deja las cajas en el porche) Creí escuchar que alguien había hablado, pero veo que solo fue mi imaginación.

Abuela: Recién acabo de cerrar la tienda de recuerdos, ya sabes, no quiero que nadie me interrumpa en mi hora de la novela.

Sos: Jajajajaajaja es verdad, no cambias abuela.

Pacifica se encontraba ya muy lejos de la cabaña, justo había salido por el camino que conducía a la Mansión Noroeste.

Pacífica: Rayos, si sigo así no lograré interactuar con nadie. Soy un fiasco para esto, que tan difícil es decir: "Hola soy Pacífica Noroeste, la niña que les arruino su infancia, lo se, se que hice mal pero estoy muy arrepentida y quiero que vean que ya no soy la misma de antes".

???: Pacífica?...

Pacífica: Eh...

Continuará.

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Hola a todos mis queridos lectores, al fin e vuelto, si lo se medio año sin actualizar pero pues ya saben o por si no lo saben el trabajo me tiene de los pijos estos.

Seguiré con esta y mis otros fics, como siempre espero y sea de su agrado.

Saludos

Mas Que el Dinero [Parte 1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora