ONE SHOTS 《Ben Hardy》

3. Where is Warren?

Entré a mi casa y caminé hasta el comedor donde se encontraban almorzando mis padres. ¿Cómo podían disimular tan bien?, oh si lo recuerdo, ellos siempre han sido así.

-¿Dónde está?.- pregunté sintiendo mis mejillas arder aún más por el enojo.

-Cariño, no sé de que estas hablando pero seguro lo encontrarás después, mejor sientate con nosotros y almorzemos en familia.-

-No estoy jugando papá, ¿en dónde está Warren?.-

-¿Aún sigues con él?.- preguntó mi madre de manera irónica. -Te dejamos muy claro que dejaras de verlo, no es bueno para tí.-

-No, no lo es, de hecho él es demasiado para mí.- aclaré sintiendo aún más enojo. -No volveré a preguntar una tercera vez.-

Me padre se levantó de su silla y me miró con seriedad.

-Está en un lugar seguro junto a los demás... amm ¿cómo los llaman? Oh sí, los mutantes.- fruncí el ceño. -¿Alguna otra pregunta?.- me acerqué a él. -Ni se te ocurra empezar a gritarme, lo hicimos por tu bien.-

-No, solo lo hicieron por sus estúpidos prejuicios, esas personas son iguales a nosotras, incluso resultan ser mucho mejor.- mi madre se levantó posicionandose junto a mi padre. -Si yo fuera mutante, ¿me encerrarías tambien?.-

-Deja de decir tonterías April.-

-No son tonterías papá, nunca te preguntaste, ¿por qué tu hija siempre se daba cuenta de cuando algo iba mal?.- alzé una ceja. -O, ¿cómo hacia para adivinar siempre el número que pensabas sin siquiera cambiar el número por tu propia cuenta?.-

-April ya basta.- regañó mi madre mirandome con seriedad.

-¿Quieres que te diga todo lo que estas pensando papá?.-

Él me miró con el ceño fruncido, se notaba que estaba confundido y al mismo tiempo sorprendido.

-Saca a Warren de ese lugar, ahora.-

-Creo que no hace falta darte mi respuesta.-

-Perfecto, lo haré por las malas entonces.- me dí la vuelta y caminé hacia la entrada.

-Te lo advierto April, si sales por esa puerta me olvidaré de ti y no me importará lo que te pase.- me detuve de golpe.

-Es lo más sincero que me has dicho en toda mi vida, pero sinceramente ya no me importa.- volví a caminar hasta salir de casa.

(...)

El policia me miró con una ceja alzada.

-Me alegra saber que en este lugar aún usan el soborno.- le sonreí falsamente y saqué de mi suéter un sobre amarillo. -Le daré lo demás una vez que lo deje libre, mientras no pienso soltar más.-

El hombre miró a los lados y me hizo una seña con la cabeza de que lo siguiera.

Me guió hasta un edificio con varias celdas, todas desocupadas a excepción de una que estaba en el fondo. El policia salió cerrando la puerta e inmediatamente caminé hasta el final del pasillo.

-¿Warren?.- lo llamé pero ni siquiera volteó. -Oye, yo... lamento todo esto, no tenía idea de cuanto llevabas aquí, todo el tiempo simplemente me decía cosas como, debe estar ocupado, ó, seguramente ya habló con su padre, pero...-

-¿A qué viniste?.- preguntó aún sin mirarme.

-A sacarte de aquí.-

El rubio se giró mirandome fijamente. -¿Y tus padres?.-

-En casa, enojados conmigo, y seguramente ya se dieron cuenta que tomé el dinero de la caja fuerte.- le sonreí y me acerqué más a él. -Voy a sacarte de aquí y despues nos íremos a algún lado, estamos juntos en esto desde ahora.-

-¿Crees que es tan fácil?, mírame April, ¿crees que las personas van a ver esto con normalidad?.- suspiré y negué.

-No, pero tampoco mereces estar aquí.- tomé sus mejillas y las acaricié. -Ya veré a donde podemos irnos, solo confía en mí, ¿sí?, todo va a estar bien.- Warren me miró y asintió sonriendome levemente para despues tomar mis manos entre las suyas y dejar un tierno beso en ellas.

(...)

-¿Cariño estas segura de esto?.- murmuró el rubio mirando el gran edificio frente a nosotros.

-Demasiado.- lo miré. -Se que no se parece en nada a Hawaii, pero aquí van a ayudarnos.- él me miró y suspiró asintiendo.

-Te sentí desde varias calles atrás.- ambos volteamos. -Me alegra el que hayan aceptado.- sonreí.

-Hola Charles.- el mencionado me sonrió y se acercó a nosotros. -Charles Xavier, un gusto.- dijo extendiendo su mano hacia Warren quien inmediatamente la tomó.

-Warren Worthington.- habló el rubio respondiendo el saludo.

-Lo sé, tus habilidades son realmente increíbles.- Warren me miró con algo de confusión. -April me habla demasiado sobre tí, la tienes toda loca.- lo miré entrecerrando los ojos.

-Gracias por eso, ¿algo más con lo que quieras humillarme?.- comenté con diversión, Charles rió y comenzamos a caminar en dirección a la entrada.

-Despues seguiré molestandote, primero les debo mostrar su nuevo hogar.- abrió la puerta y se hizo a un lado dejandonos pasar.

Warren resopló levemente mirando a su alrededor, estaba nervioso. Tomé su mano y la entrelazé con la mía. Durante el pequeño recorrido conociendo el lugar no solté su mano en ningún momento.

Charles se detuvo frente a una puerta y me miró. -Supongo que no hay problema con que duerman juntos, estamos algo saturados de espacio y esperamos solucionarlo pronto.-

-Está perfecto.- respondí sonriendo. -Además, lo que menos quiero ahora es dejarlo solo.- miré a Warren, que estaba un poco alejado de nosotros aún mirando los cuadros y fotografías que estaban en las paredes. -No fué fácil para él.- murmuré y solté un leve suspiro.

-Ya no tendrán de que preocuparse, y ni se te ocurra agradecerme.- reí levemente.

Warren se acercó a nosotros. -No daré problemas, lo prometo.- Charles movió su mano restandole importancia.

-Los dejo para que descansen o hagan otra cosa más productiva.- movió sus cejas de manera graciosa. -Solo, no hagan mucho ruído porfavor, aún hay chicos menores en este pasillo.- nos sonrió y caminó hasta desaparecer de nuestra vista.

Warren me miró. -¿Cómo está eso de que no dejas de hablarle de mí?.- preguntó burlón. Rodeé los ojos con diversión y ambos entramos a a la habitación.

-¿Quieres estrenarla?.- preguntó señalando la cama.

-Suena bastante tentador, pero ambos sabemos que quieres descansar.- respondí pasando mis manos alrededor de su cuello.

Warren rió levemente. -Te haré caso, pero mañana no te me escapas.- murmuró de manera provocativa para despues besar cortamente mis labios.

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