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Lia Trapp

Suspire mirando mi celular, hoy Antoine decidio venir a visitar a mi hermano, según el por qué lo extrañaba.

-¿Qué sucede mi amor?-pregunto Julian besando mi cuello

-El está aquí, y me incomoda que sea amigo de mi hermano

-Solo relajate, que no te incomode que sea amigo de tu hermano igual desde pequeños son mejores amigos. Mejor ven con nosotros y disfruta el momento.

-Si, supongo que tienes razón-sonreí de lado.

Me senté junto a él, estábamos cenando junto a Kimbempe, Agus, Ney y Thilo.

-Quiero decir unas palabras- se levantó Julian- Lo pense mucho antes de decidir esto, Lía es la chica por lo cual me volví loco al instante de que la conociera, al principio pensé que esto no duraría mucho. Pero con el tiempo me di cuenta que estar con ella me hace feliz, me sentía bien a su lado. - me miro- Eres tú esa persona que tanto he buscando y que sin esperarlo encontré. Quiero pasar el resto de mi vida contigo, por que nunca nadie antes me había hecho sentir el hombre más afortunado del mundo. Jamás he estado tan seguro de nada como lo estoy de ti. Lo tengo claro mi amor.
No quiero besos de otros labios, ni caricias de otras manos que no sean las tuyas. No quiero otro número de teléfono que me llame para preguntarme como va mi día. No quiero un "Tu" y "Yo" por separado, quiero un "Nosotros" en mayúsculas. No quiero regalos caros, quiero que me sigas sorprendiendo todos los días con cada mínimo detalle. No quiero días grises sin tu sonrisa deciéndome que todo está bien. No quiero otro hombro donde llorar. No quiero confiar ciegamente en nadie más, ni cuidar a otra cuando se enferma. No quiero salir de la rutina, si eres tú la que está en ella. No quiero guerras en la cama sin ti. Quiero a alguien con quien estar hasta que nos salgan pelos blancos.
Quiero atardeceres contigo en la playa en verano y tardes de mantas, sofá y pelis en invierno. Quiero dormir cada noche a tu lado y que seas la primera persona que vea cuando despierte. Quiero que nos miremos como el primer día y que nos quedamos como si fuera el último. Quiero formar una familia contigo, educar juntos a nuestros hijos, ver como crecen día con día, ir a dejarlos a la escuela antes del entrenamiento, que me estén esperando en casa después de un partido. Quiero que seamos capaces de hacer desaparecer al mundo ante los problemas. Quiero hablar cuando sea necesario y compartir el silencio cuando no. Quiero que nos amemos incluso cuando nos odiemos. Quiero que seas mi presente y mi futuro. Quiero recordate a diario. Quiero que siempre vayamos en la misma dirección. Quiero tener miedo contigo, hacer cosas que no haría con nadie más porque a tu lado me siento seguro. Quiero aprender a quererte cada día un poquito mejor. Quiero elegirte a ti, siempre. Todos u cada uno de los días de mi vida.
Lia Trapp, se que no es el mejor lugar, ni la mejor ocasión, pero no puedo seguir esperando más
¿aceptarias casarte conmigo?-preguntó arrodillándose frente a mi.

Para ese momento yo ya estaba llorando, todas esas bellísimas palabras eran para mi.
Tenía a un hombre maravilloso frente a mi pidiéndome matrimonio.

-Lia, mi amor, respóndeme-dijo nervioso

- Por Dios lo siento-dije-Claro que aceptó casarme contigo-dije abrazandolo

Todo el restaurante estaba aplaudiendo y yo no podía estar más feliz de tenerlo conmigo.

-Felicidades chicos-sonrió Neymar

- Yo estuve presente en esto-dijo Agus abrazándome

-Ya se habían tardado-dijo Kimbempe bromeando

-Mucho amor y felicidades-nos abrazó Thilo

-Mi prometida-susurró Julian en mis labios

- Mi prometido-sonreí.

En ese momento me di cuenta de algo, lo amaba , lo amaba demasiado que no podía imaginarme la vida sin el, y me sentía muy afortunada de que el se haya fijado en mi.