Mecanismos

Capítulo III: Las Tareas

Al ver por la ventana Abril vio a 3 bestias similares a la que había cazado Chencho, Abril gritó y todos la escucharon,  Manu arrancó la camioneta pero esas 3 bestias corrían tan rápido que con sus garras raspaban la parte de atrás de la  camioneta, parecía que no tenían escapatoria, sentían el miedo correr por sus venas, imagínense que los este persiguiendo tres dinosaurios carnívoros y de entre 6 y 10 metros de largo, además el lugar donde se encontraban estaba llenos de árboles, lograron escapar de las garras de esas bestias y llegaron hasta el límite de el bosque, entonces pararon para comer, acto seguido se separaron en grupos, Chencho y Abril fueron a buscar piedras y Manu e Lucía fueron a talar madera, al anochecer se juntaron todos y hicieron una fogata, empezó a hacer mucho frío, Lucía miró el reloj que todavía marcaba la hora y la temperatura, eran las 18:30 Y hacían 21.2°F lo que en el conversor marcó -6°C, igualmente la temperatura estaba fría desde un rato antes de el anochecer.
Pero ya se habían preparado, tenían camperas polares, cenaron a la luz de la luna contándose historias, a Manu le gustaba mucho la mitología griega y los entretenía a todos contando el viaje de Ulises, los trabajos de Hércules y la guerra de Troya, siempre es bueno llevar mitos y leyendas a un nuevo mundo.

A la medianoche la temperatura bajó a -10 pero no nevaba, hacia un frío incesante pero no nevaba
Ya a eso de las 1:20 AM se van a dormir

En plena madrugada Abril se levanta por un chillido insoportable, sale de la camioneta y se encuentra con un bebé dinosaurio herido, le estaba sangrando la pata trasera y no podía caminar, Abril lo primero que hizo es agarrar el botiquín y detenerle el sangrado, después lo llevó silenciosamente a la camioneta y lo dejó en su pieza tapado con una remera vieja de ella 

El pequeño bebé era un Delapparentia Turolensis y era una especie de iguanodon

A la mañana al despertarse Chencho lo primero que hizo fue salir a cazar aunque ya tenían carne y comida como para una semana, después unos minutos más tarde despertó Manu y fue donde había ido ayer para buscar esa extraña planta parecida al repollo, cuando se despertó Lucía se encontró con que estaba sola en la camioneta, pero después entró a la pieza de Abril y vio el pequeño dinosaurio, despertó a Abril y hablaron un rato.

Lucía: ¡Pero nena no podes tener a una lagartija dentro de la camioneta! ¿mira si nos come?

Abril: No es una lagartija es un dinosaurio y por cierto no me hizo nada desde que lo rescaté ayer a la madrugada!

Lucía: ¡Pero culiá que le vamos a decir a Chencho y a Manu? ¿Y si viene su madre y nos pasa lo que nos pasó ayer?

Abril: Tranquila nena no nos va a pasar nada Tutty confía en mi (la mira y sonríe)

Lucía: Ufa bueno...

A eso del mediodía cuando Abril estaba cocinando el almuerzo llega Chencho, y trae un ratón chico

Chencho: ¡Hola Abru! Salí a cazar un rato pero no pude encontrar nada, sólo encontré esta laucha que parece tener menos de medio metro

Abril: Ay fran te estás volviendo fanático de matar animalitos, tenemos comida como para una semana...

Chencho: bueno ¿viste a Manu?

Abril: no, no lo vi desde ayer, pensaba que fue con vos

(Se escucha un chillido)

Chencho: ¿y eso?

(Abril empieza a ponerse roja)

Chencho: parece haber sonado acá

(Se escucha otro chillido)

Chencho: en tu pieza  (agarra la pistola de su bolsillo y la recarga)

Abril: ¡Espera! Ayer a la noche me encontré con un dinosaurio herido afuera y lo atendi y se está recuperando en mi pieza, te juro que en cuanto se recupere lo dejo libre pero no lo mates

Chencho: ¡¡puede comernos a todos!!

Abril: ¡no nos va a matar! confía en mi

Y entonces Chencho dejó que Abril cuide a el dinosaurio más tarde a eso de las 13:30 PM vino Manu con una bolsa llena de repollos, entonces los puso en la heladera y almorzaron, después se sentaron afuera de la camioneta y hicieron una lista de tareas que tenían próximas a hacer

Después de hacer esto conducieron unas 2 o 3 horas y encontraron una enorme laguna, allí se asentaron y completaron la primera tarea. Como ya estaba por hacerse de noche lo último que hicieron antes de ir a la fogata y posteriormente cenar fue llenar botellas de 3 litros con agua, llenaron como 5 y después se hizo de noche, en la noche vivieron algo hermoso,  una manada de Echinodon se detuvo a tomar agua en la gran laguna, parecían pequeñas lagartijas bípedas, era muy hermoso, después se fueron a dormir y los próximos 4 días se encargaron de hacer las tareas que ellos mismos se pusieron