El mito de las musas.

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Observé aquel reloj de bolsillo, mientras
Le daba otra calada al moribundo
Cigarrillo.

Las manecillas se habían paralizado, sus
Recuerdos con el tiempo se habían
Ocultado.

Sentado en aquella banca sentía
Aliviado, después de tanto tiempo la
Paz había alcanzado.

Allí sentado, Ibagué en el mito
De las musas, aquella dama que
Irrumpe en mis versos intrusa.

Es cierto que ayudan a elaborar
Versos en construcción, pero... ¿el poeta
Las necesita para alcanzar inspiración?

Mi musa, es el amor; mi
Tinta, la pasión. Y en el papel del dolor...
Libero todo el rencor.

He abrazado al sufrimiento, escribiendo en mis peores momentos. He sentido
La alegría... fluyendo entre mis líneas.

Alcancé el clímax de la inspiración,
Al perderme en las llamas del
Retorno de un viejo amor.

Entonces... ¿fué una musa quién se
Presentó? O ¿fué mi pasión la
Que mi pluma guió?

La pregunta que mi mente maquinó,
Respuesta alguna no encontró,
Y con la misma rapidéz con la que
Llegó... débilmente se esfumó.

... tal vez una musa mis líneas
Invadió...

Memories of Winter.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora