4. La Tarde del Lunes

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Debería haber sido ilegal que Sehun apareciera viéndose tal y como se veía. La cadena de una billetera colgando del bolsillo sobre un pantalón azul delgado y desgastado que se le ajustaba a la perfección. Se había cambiado la chaqueta de cuero por un elegante abrigo de paño, y sus piercings de diamantes de imitación sobresalían de debajo de un gorro gris.

El mismo Xiumin estaba desnudo a pesar de la repentina caída de las temperaturas, ya que el único cliente de hoy era otro a quien le gustaba que solo llevase la lencería y una gabardina por encima. Él llevaba un par de pantalones fáciles de arrancar sobre las medias, y una mochila con su maquillaje y tacones adentro. Para las citas a la luz del día, se sentía más seguro al ocultar el hecho de que se travestía hasta justo fuera de la ubicación de la cita.

Cuando Xiumin se acercó al auto, la mirada de Sehun finalmente se posó en él. Su frente se arrugó con algo como con dolor. "Hola."

"Hola". Genial. Así que las cosas iban a ser incómodas.

No hablaron hasta la casa del cliente. Cuando Xiumin se maquilló, esta vez en el asiento delantero, Sehun miraba fijamente hacia delante, con una postura rígida y la mandíbula tensa. Era obvio que estaba tratando de no mirar.

Xiumin tuvo ese impulso una vez más para obtener una reacción de él. "Sehun".

"¿Qué?"

"¿Quieres un beso en la mejilla?"

Sehun volvió la cabeza y miró a Xiumin con una mirada patética, como si Xiumin acabara de burlarse de él con su único y verdadero deseo. "¿Por qué?"

El poder era intoxicante, y Sehun era adorable. Xiumin en realidad tenía una leve presión en su bajo vientre. "Creo que te verías lindo con unos labios rojos pintados en tu piel. ¿Por favor?"

Las pestañas de Sehun revolotearon, y sus pupilas se agrandaron. "Supongo. Por supuesto."

Con cuidado, Xiumin se inclinó y le dio un beso en la mejilla bien afeitada de Sehun. Después de retirarse, se tomó su tiempo para admirar su obra, acariciando con el pulgar la mandíbula de Sehun.

Cuando Xiumin levantó la vista, encontró a Sehun mirándolo.

"Eso estuvo bien", dijo Sehun, "pero preferiría un beso en los labios".

El corazón de Xiumin martilleaba en su garganta. "¿Por qué?"

"Porque ... me duele mirarte y no besarte". Su boca se inclinó en una adorable sonrisa torcida. "¿Por favor?"

Xiumin miró el reloj. Solo tenía cinco minutos antes de tener que estar listo para tocar el timbre del cliente. Rápidamente, como si la brevedad de un beso lo hiciera menos propenso a hacerle daño, Xiumin dio un pico a Sehun en la boca.

Sehun sonrió, y un sonrojo tintó completamente sus mejillas.

Xiumin se volvió a aplicar su pintalabios. "Tengo que irme."

***

La cabeza de Sehun era un desastre mientras esperaba en el auto a que Xiumin saliera nuevamente. El problema era simple: lo quería. No solo por el coqueteo, las burlas, las mamadas o los besos, si a ese pequeño beso se le hubiera llamado beso. Pero para satisfacción mutua, enredarse en sábanas y charlas de almohadas. Quería llegar a conocer Edén. No sería como una conexión de Grindr

Y eso no lo hizo simple. Si por algún milagro, Sehun tuviera a Xiumin regularmente, sus amigos lo descubrirían. Chanyeol lo haría, al menos, porque siempre era capaz de adivinar cuando a Sehun realmente le gustaba alguien. Querría conocer a Xiumin como había conocido a todas las chicas constantes de Sehun.

Escorting the escort [SeXiu / XiuHun]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora