l'amour est ... récompense

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Su animo había bajado luego de una hora, seguía sin encontrar un regalo de su agrado para la rubia, nada parecía ser suficiente para ella.

Dejo caer su espalda contra una de las paredes del lugar, metiendo su mano dentro su bolso observo la tinta que Chaeyeon le regalo unos días antes de su debut, sonrió encantada por los recuerdos de esa noche. Sin importar a donde fuera siempre cargaba con ella su regalo, como si de un amuleto se tratara.

Tal vez solo debía dejarse llevar por una corazonada, observo la hora en su teléfono y formo una muca en sus labios al ver que no tenia demasiado tiempo. Una vez mas y con las energías renovadas comenzó a buscar algo que pudiera gustarle a su rubia.

El regreso a Japón fue mas rápido de lo que pensó, hacia dos días estaba buscando algo para la rubia y aunque se dejo guiar por sus corazonadas sentía que no era algo que fuera tan especial como ella.

La mayor parte del vuelo se la paso durmiendo, tenia que disfrutar todas las horas de suelo que pudiera por lo menos antes de volver a sus actividades con el grupo, fue despertada unos minutos antes de bajar del avión, observo por la ventana siendo recibida por las luces de la ciudad y aunque no quiso pensar en Chaeyeon su corazón termino traicionada por sus propios nervios.

En cuanto salio del avión, los nervios se intensificaron de golpe, mordió su labio inferior sin dejar de caminar entre las cámaras y personas a las que apenas correspondía el saludo. subió al automóvil y trato de ordenar sus pensamientos con los intensos latidos de su corazón martillando sus orejas.

Su teléfono vibro varias veces durante el trayecto, no quiso ver de que se trataba porque sabia que colapsaría si era algún mensaje de ella, miro de reojo su bolso y no tardo en sacar la pequeña caja de color rosado pastel , paso su pulgar sobre el moño de color cían claro, era un mensaje muy claro que ella esperaba fuera comprendido por ella. De la nada el auto se detuvo avisando su llegada, tardo un minuto en reaccionar y bajar siendo seguida por alguien de producción que llevaba su maleta hasta la entrada de la casa.

Los dedos le temblaron haciendo difícil abrir la puerta, en cuanto fue abierta se encontró con todo oscuro cosa que provoco algo de curiosidad en ella ¿Salieron todas?

Se adentro en la casa encendiendo la luz en el proceso, observo el living limpio y vació logrando que sus hombros se relajaran al creerse sola pero unas manos cubrieron sus ojos sacando un grito de sus labios y con ello esa risa que hacia latir con fuerza su corazón. Dudo un poco antes de girarse y observar a Chaeyeon frente a ella.

"Que cruel eres, no respondiste mis mensajes"

"Y-Yo lo siento, me quede sin batería ¿Y las demás?"

La rubia no insistió y se acomodo sobre el sofá aunque en el proceso jalo a la castaña obligando a que se apegara contra su cuerpo, sus mejillas ardieron al instante y la vergüenza se hizo presente pero no quería alejarse, había extrañado esa calidez tan única que tenia, cerro lentamente sus ojos y permaneció ahí en un silencio que no tardo mucho en ser roto.

"Fueron a comprar la cena pero quise quedarme a esperarte."

Sus delgados brazos terminaron rodeando su cintura que provocaron un brinco en su corazón, quería decirle que la había extrañado tanto también, que no podía dejar de pensarla ni un solo momento pero sabia que eso seria demasiado repentino así que solo acaricio sus manos y acomodo su cabeza en su hombro.

No supo cuanto permanecieron así, ni tampoco le interesaba mucho pero un pequeño pensamiento le hizo separarse un poco y acercarse hacia su bolso, dudo unos segundos antes de sacar la pequeña caja y entregarla a la contraria.

"Espero te guste Chae"

Se mantuvo observando los colores de la caja y repitió lo que hizo la castaña hacia unos instantes, paso sus dedos sobre la envoltura y el moño antes de animarse abrirlo y observar asombrada el contenido de la caja mientras tanto la nippona quería que la tierra se la tragara, tenia miedo de haber elegido algo equivocado.

"Es hermoso..."

Una preciosa pulsera con dos dijes de flores doradas bailaban frente a sus ojos, la rubia parecía fascinada con el regalo que no tardo en pedir en silencio que le ayudara a ponérselo. No dudo y termino abrochando esta sobre su muñeca para enseguida ser abrazada con tanta fuerza que el aliento escapo de sus labios.

" Gracias Sakura..."




Quiero agradecer a todas las bellas personas que se tomaron el tiempo de leer esto, de verdad gracias <3


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