Black Clover Trévol de seis hojas

3. Nuestra primera misión

—¿Ustedes son los nuevos miembros de este año? ¿Cómo se llaman?—

—Yuno—

—Tn—

—Yo soy Klaus Lunettes. No sois nobles ni de la realeza. Aceptar a un plebeyo de una aldea remota...—

—Perdone mí interrupción, pero no permito que me subestime de esa forma tan solo porque no soy una noble, le recuerdo, que tambien soy una persona—
—Le interrumpiste con seriedad, frunciendo un poco el ceño. Él te miro algo sorprendido y también frunció el ceño en señal de desaprobación.

—No sé en qué piensa el Capitán Vengeance. No os creáis  superiores porque todos los capitanes alzarán las manos por vosotros. En el Amanecer Dorado no os reconoceremos fácilmente.
—Menciona Klaus.

—Me ganaré su reconocimiento pronto—
—Dice Yuno.

—Qué elocuente.
—Klaus se fué unos metros por delante de nosotros.

                          ×  ×  ×

—Te digo lo mismo que a Yuno. Esta habitación es demasiado... —

—¿Buena para mí?—
—Interrumpiste a Klaus.

—Tks... Mañana te explicaré el trabajo de los caballeros mágicos—
—Dice algo incomodo colocándose sus gafas.
—No me gusta ser el instructur de unos plebeyos—

—¿Y entonces porque lo eres?—
—Pregunte seria.

—Son órdenes del capitán Vangeance—
—Respondio firme.

—¿No fué una orden que tu gente asesinara a mi padre?—
—Murmure.

—¿Dijiste algo?—
—Pregunto ya algo molesto.

—No—
—Respondi.

—Ahora, me ire, no te quedes atrás. Y recuerda, quitate esa caperuza vieja y ponte la ropa nueva que se te asigno—
—Comento con una sonrisita.

—Tks... Sí, señor...—
—Respondí conteniendo la rabia, no me gustaba ese cuatro ojos, y menos que se me tratara como basura, aunque sea una simple plebeya, merezco respeto como cualquier persona. Me quite mi caperuza, parecía algo sucia, tendría que lavarla, me puse la capa nueva del Amanecer Dorado, no estaba mal, pero cada vez que miraba mí caperuza, se me venían varios recuerdos buenos a la mente. Recuerdo que mi padre me la hizo con mucho cariño.
—¡Recordé que tengo que mandarle una carta a mi madre!—

                           ×  ×  ×

—Mi primera misión... estoy nerviosa—
—menciono Mimosa.
—Klaus, Tn, Yuno, es un placer trabajar con ustedes—

—Sí—
—Respondió Yuno aún mirando hacía delante.

—El placer es mío—
—Respondí desde atrás. Montada sobre mi escoba.

—No bajes la guardia, Mimosa—
—Menciono Klaus.

—¡No!—

—Ustedes tampoco—

—Lo sabemos—
—Respondí. Derrepente, Salim empezo a hacernos señas a los dos para hacercarnos un poco más y eso hicimos.

—¿Como habéis estado los dos? No tenéis que poner esa cara. Solicité que fuerais mis guardaespaldas porque quería disculparme. Escuché que queréis ser el Rey Mago—

—¿Cómo lo sabes?—
—Pregunto Yuno curioso.

—Todos los capitanes os elijieron. Podríais ir a cualquier escuadrón y elejisteis Amanecer Dorado, así que tenía el presentimiento. Entre más hagáis desde ahora, más se conocerá
vuestros nombres por el reino. Tn, poseedora de un grimorio muy peculiar de 6 hojas. Yuno, poseedor del grimorio de 4 hojas. Asegurense de cumplir ese sueño de ser el Rey Mago. Que gane el mejor.
Aún falta para llegar al Reino del Corazón. ¿Podéis hablarme más de vosotros? Si no queréis, no os molestaré...—
—Dice Salim.