Constelación en la espalda

Constelacion en la espalda

No se decirte el tiempo que llevo rodeada de prejuicios, que me paraban los pies en seco cada vez que tenía una oportunidad de ser más feliz, de lo que podría ser, o puede que no más feliz, pero desde luego con más experiencias.
Experiencias.
Algo que lo vale todo.
Dentro de la experiencia hay recuerdos, pensamientos, opiniones, tanto buenas como malas, pero todas dan sentido a tu vida.
Desde niña nos enseñan que " las niñas guapas, buenas y educadas" son aquellas que son delgadas, sin opiniones, ni creatividad, sólo una réplica o un prototipo más de alguien que una vez llamaron perfecta. Cuando la verdadera perfección se encuentra en la diferencia, en lo llamativo, en lo inigualable.
TODOS somos perfectos, con nuestros puntos y comas.
Y llega un momento en nuestras vidas en que olvidamos todos los defectos que solo nosotros mismos o solo algunos vemos sobre nuestra persona y descubrimos que, joder..., y qué más da, siempre va a haber alguien a quien le vas a encantar.
Los niños, como tantas veces he oído decir a los "mayores" son como esponjas, absorben toda la información posible, es decir que cualquier tipo de acción por más insignificante que sea, crea una opinión o una personalidad  instantáneamente en nuestra persona. Por ejemplo; los niños no nacen racistas, se les enseña a serlo, aunque a veces no sea intencionado.
Por eso con cinco años queremos ser princesas, a los díez queremos ser barbies y a los quince "populares" del instituto y absolutamente todo esto varía dependiendo de qué música, qué canales de televisión, qué amigos o incluso qué clase de educación te ha inculcado tu familia.
Y, aunque esto sólo parezca un pensamiento estúpido de niños, a veces atormenta.
Cuando tus amigas quieren ser princesas  y tu no, cuando todas son barbies y a ti esa talla no te entra o cuando sientes que otra persona te mira por encima del hombro.
Cuando de repente por A o por B te sientes diferente, cuando sales del prototipo deseado por todos y te da miedo ser TU, por qué diran.
Y aunque no lo parezca,  siempre pasa y pocas veces decimos "anda que se fastidien, asi soy" y demasiadas nos ocultamos para caer bien o para que nos miren como a todos.
Tener tu forma de hacerlo, de decirlo, de ser tu!!. Tener tu esencia y aceptarla!
Porque por más que intentas cambiar,  sólo te reprimes y no te sientes bien, ni  con quien, ni con cómo estas.
Por eso,  sé TU.
Y detrás de las críticas y detrás de todo lo malo, estará toda esa gente que nunca valoramos, que nos aprecia, nos admiran y nos apoya..
Por eso, es hora de que nos miremos en un espejo y digamos " esta soy yo" con nuestros kilos de más o de menos, con estrías, con marcas, con cicatrices, con un pecho o con tres, con la nariz así o asá y aceptar que esa que está frente al espejo es lo más bonito y distinto que pocos tendrán la suerte de ver.
Y esto, no quiere decir que no tengas defectos, esto quiere decir que los tienes y los aceptas, como cuando te tienes que comer las verduras pero también está tu comida favorita.