Capitulo 12. "Maratón de emociones"

1.1K 107 4
                                    

Jonghyun caminaba sumamente decidido "¿Por qué tiene que arriesgarse tanto por una persona como yo?" Se preguntaba mientras avanzaba por aquel camino que conducía secretamente hacia la cárcel. Como precaución estaba camuflado con la ayuda de un chaleco que 'tomó prestado' del ropero de Kibum. Si la gente lo reconocía, ese sería la gota que derramaría el vaso.

***

Con el corazón en la mano Kibum entraba a la cárcel, intentó durante el camino de ida en dejar de ser un pesimista y pensar en el trayecto dentro del taxi que aquella repentina solicitud de un día 'Domingo' no tendría que ver con la ausencia de Jonghyun. Rogaba a todos los dioses que no lo llamaran para sacarle información.

Entró algo vacilante a la oficina del sargento YoungGe, el estúpido sargento que más detestaba Kibum, aunque para ser sincero, Key detestaba a todo quien que lo mirara como si fuera una mujer, que le miraran sin ninguna gota de pudor o vergüenza. El disimulo entre los hombres que últimamente se les han insinuado con las miradas eran realmente algo de lo que detestaba trabajar allí.

-Con permiso

Kibum acercó lentamente su cabeza por la puerta de la oficina, en donde el sargento se encontraba mirando hacia la ventana dando una calada a su cigarrillo. Al notar la presencia de Kibum, y escuchar esa voz tan única y adictiva para él, hizo dar la media vuelta en su silla giratoria para observar al muchacho y sonreírle durante unos milisegundos.

-Pasa muchacho, me alegra verte, toma asiento

Los nervios comenzaron a delatarlo con sus ansiosas manos moviéndose entre sus piernas, frotaba sus muslos sin darse cuenta mientras el sargento observaba aquella acción con una pisca de sonrisa y satisfacción. Le agradaba saber que ponía nervioso al menor. Eso lo hacía mucho más excitante.

Algo tenía ese muchacho, algo ocultaba tras ese bello rostro, y no descansaría en averiguar ese 'algo' que presentía, ese 'algo' que no lo dejaba tranquilo, ese 'algo' que irradiaba Kibum cada vez que le hablaba.

Ese muchacho era realmente un misterio. Era su nuevo reto.

-¿Para qué me mandó a llamar?

-Quería pedirte que me acompañaras a mi casa

-¿Disculpe?

-Beber unas cervezas, conversar, hoy hay un importante partido de fútbol, lo transmitirán por la televisión en vivo, y no me haría nada de mal en tener compañía, juega mi equipo favorito ¿Qué dices?

"¡¿Este hijo de puta me está tomando el pelo?!" 

Key estaba aturdido, confundido, y realmente molesto. Hizo un viaje de aproximadamente 15 minutos, asustado, afligido con pensar que aquella llamada era para algo realmente importante, algo tan urgente, y era tan solo para invitarlo a la casa de la persona que más odia. Aquella persona que disfruta del dolor que le causa a su ahora, amigo.

Apretó sus puños conteniendo como fuera las ganas de querer golpear y arrancarle los dientes a ese maldito que tiene como jefe, ocultando su ira con una sonrisa falsa y desinteresada.

-Lo siento, pero, prefiero descansar en mi departamento, estoy algo cansado y debo atender otros asuntos

Intentó sonar lo más agradable posible. El sargento no era para nada estúpido. Él sabía que Kibum diría algo como eso, evadir su propuesta. Pero YoungGe no era un hombre que se dejara vencer a la primera. Si era posible, insistiría todas las veces posibles hasta lograr que ese muchacho excitante cediera ante él, cediera ante sus caprichos de tenerlo cerca y averiguar ese 'algo' que incitaba a acercarse mucho más a él.

No descansaría hasta saberlo, y tenerlo consigo. Solo para él.

-Entonces, ¿Podría ir a tu departamento a ver el partido? Es que, no quiero verlo solo, mis colegas y amigos me han traicionado, se han ido a ver el partido en directo, y yo por tiempos no he podido conseguir una entrada al estadio.

Mi Criminal [JONGKEY] ♥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora