Amano Yumeka es una chica de 19 años, encerrada en su departamento sobrevive con su trabajo online. es escritora de historias otome y diseñadora amateur, no se preocupa por las cosas del exterior.
un dia, su ex compañera de la escuela, Tsumugi Taka...
— Y con eso acabe mi historia de 400 páginas completas. Es una buena historia, venderá mucho, lo sé. A esas mocosas obsesionadas con personajes ficticios, enamorándose supuestamente de ellas. Vaya idiotez, como si mas de 2 chicos pudieran fijarse en una sola chica, se creen Afrodita o qué? Bueno, a trabajar que mi renta esta próxima a vencerse!! —
Hola, Soy Amano Yumeka, 19 años y una vida estable. Si eso puede decirse porque sigo virgen, soltera y amargada como una pasa arrugada. Quisiera tener un sueño. Tener algo por lo que luchar con todas mis fuerzas. Utilizar mis conocimientos para ayudar a los demás. Sentirme útil, personas que esperen mi llegada.
Pero he hecho las cosas mal. No he buscado la solución de ninguna forma. Me encerre en mi mundo. Me aleje de todo y no me tengo la confianza suficiente,tampoco la seguridad, o las habilidades sociales que necesito con urgencia.
Diablos! Estire los brazos dejando tranquilo mi teclado. Mis ojos ardían por lo que me puse una gotas en ellos. Masajee un poco el puente de mi nariz, me coloqué mis lentes con cuidado y me levanté a estirar mi cuerpo también.
Di un gran bostezo y en semanas decidí salir a la calle. Por lo que me dispuse a arreglar mi apariencia un poco. Un impulso del azar.
Ahi mismo en tanto desastre de mi cuarto pase por todos lados buscando lo necesario. Ah! Necesito esa nueva novela ligera! Debo apurarme.
Me detuve al verme en un espejo que descubrí tener al quitar ropa de ahi.
Que tanto me odiaba para descuidarme tanto? Enfureci por ello. No recuerdo porque razón me corte el cabello. Yacía sobre mi, quebradizo, seco y sucio. Demasiado corto de atrás, con unos pobres mechones cayendo de los lados. De un supuesto color rojo ya no brillante, si no cenizo.
Piel pálida, debido mayormente a una mala alimentación, culpa mia claro. No era una cría para no saber como comer, solo no lo hacía bien.
Ojos grises, casi como los de un pescado, ¿que de bonito tendría eso?
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(Es Yumeka mi Oc)
Rasgos comunes, simples. en definitiva con empeño no era fea, pero si decente. Demasiado delgada! Podías sentir mis costillas!!! Carajo lo primero que haría era subir de peso.
Mi estatura era normal a mi edad. Eso si, tenía tacones que esperaban ser usados. Que manía al comprar y jamás usar. Shopping online, mi Mal hábito! Es necesario remediarlo.
Mis pensamientos negativos comenzaron a esfumarse. No sabia porque, pero sentia que precisamente hoy, cambiaría mi rumbo. Queria creer que si.
Antes de salir, comencé a limpiar un poco mi departamento. Luego lo haría a conciencia. No es mi fuerte pero es imperativo que sea hecho.
Me bañe largo y tendido. Lo necesitaba. Cuando acabe me decidi por un vestido arrumbado al final del armario. Este era color rosa, floreado con un cintillo en la cintura. Tenía un corte un tanto infantil pero lo ignore al ser mi único vestido que no me hacía ver como tonta al no llenarlo de la Copa o asi. Lo combine con unos pequeños tacones blancos, con piedrecitas brillantes. Un suéter igual blanco perlado y como accesorio unos aretes de bolitas negras.
