Jyugo convertido en... ¡¿Mujer?!

La primera pero no la ultima

"Déjame darte placer" le rogaba a Uno que yo le diera placer, me agache para quedar de rodillas hacia el, le quite los pantalones junto con el bóxer.

-Jyugo...-El chico rubio le dio un tierno beso antes de que empezara a hacer su trabajo.

El chico de cabellos negros se sonrojo al ver el miembro de Uno, y pensar que todo eso había entrado en él anteriormente.
Empezó a dar pequeñas lamidas a este, su sabor era, al menos para Jyugo, dulce, no podía describirlo.

Sin hacer un solo ruido empezó a introducirlo en su boca, lo hacía primero lenta y después rápidamente, tratando de no morder a su chico.

-Mgh! Jyugo...lo haces bien- Uno tomaba la cabeza del peli negro para moverla y así empezar a follar su boca.
-M...me vengo-Después de un tiempo el rubio se vino en la boca de Jyugo.

Jyugo se levantó para después besar a Uno, un beso largo y caliente, duraron varios minutos dándose besos para ahogar el placer.

-¿Qué tal sabe tu semen?-Con lo poco que le quedaba de tiempo y aire Jyugo exclamó con una sonrisa pervertida.

Me quedé sin palabras, me puse como tomate, lo bese y jugué con su lengua un rato para luego llevar mis manos a su trasero.
Rozaba mi dedo en su entrada cuando por fin metí uno, su interior estaba caliente y apretado.

-Jyugo...estás apretado aquí-Sentía sus piernas temblad así que lo acosté mientras subía su playera.
-Joder,¿Desde cuando tienes este cuerpo tan sexy?-Me dije a mí mismo mientras dejaba un camino de saliva en todo su cuerpo.

-Hmm...Uno.... métemela-Jyugo pedía que entrara en el, a lo cual acepté con mucho gusto, ya no podía más, tenía que tocarlo.

Poco a poco empecé a entrar en él, de un empujón hice que entrara todo, Jyugo estaba como tomate mientras de sus ojos salía una que otra lágrima, cerró los ojos, al parecer le recordaba a esos malditos.

-Jyugo, Jyugo, mírame, soy yo-Empecé a moverme dentro de él, se sentía tan bien, apretado y caliente, quería más y más cuando comencé a escuchar que alguien venía.

-Uno...más métela más...mmmp-Deje de moverme por un momento para después acostarme detrás de él, sin salir aún, le puse mis dedos en su boca para que allí ahogara sus gemidos.

-Hmm...creo que esos dos por fin aprenden, creo que terminaron-Hajime daba un recorrido al ala 13, se detuvo un momento para después seguir su camino.

Cuando por fin escuché que entró hacia su oficina retiré mis dedos mojados de la boca de Jyugo, dejando salir un fuerte gemido.

-Ahhh...Uno....hya...-Me movía de nuevo en su interior, con fuertes embestidas.

-La próxima vez no me detendré-Mordí el cuello de Jyugo, era dulce y esta noche por fin le dejaría marcas en todo el cuerpo.

-No te detengas....m....me vendré-Tome él miembros de Jyugo para empezar a masturbarlo.

Al poco tiempo los dos acabaron por venirse, Uno dentro de Jyugo, terminaron exhaustos.

-Uno...lo mantendremos en secreto...-Tratando de recuperar el aliento, de espaldas con Uno, cerró sus ojos esperando una respuesta.

-Si eso significa seguir contigo....esta bien- Uno beso a Jyugo para después darse la espalda mutuamente, durmieron tranquilamente esa noche.

-¡Buenos días tortolitos!-Rock estaba intentando despertar a Uno y a Jyugo quien se abrazaban mutuamente.

Poco a poco Jyugo y Uno abrieron los ojos, notándose un sonrojo al instante.

-¡Uno! Suéltame-Jyugo intentaba zafarse del abrazo, moviéndose como un pescado que acaba de salir del agua.

-¡Digo lo mismo, IDIOTA!- Uno soltó primero a Jyugo, moviéndose para atrás.

Por fin acabó el "incómodo" abrazo para ellos dos.

-¡JAJAJAJA! Su secreto está a salvo con nosotros, ¿no es cierto? -Niko sonreía a la pareja mientras Rock se apoyaba en el.

-Si, eres muy tierno-Rock sonrió y acercó la barbilla de Niko hacia el, dándose un tierno beso.

-¡Gracias chicos!-Uno ya lo sospechaba, así que no se impresionó tanto como Jyugo.

Ya que estaba atónito ante la acción de Rock y Niko, lo hacía tan feliz saber que incluso sus compañeros de celda aceptaran su relación y tuvieran una entre ellos.

-¡A trabajar, inútiles!-Hajime acababa de llegar, Uno y Jyugo actuaron con normalidad, como simples amigos.

Cuando los dejaban solos, aprovechaban el poco tiempo para darse besos intensos, se quedaban con las ganas.

Lo hacían muy seguido, hasta que un día Jyugo evitaba a Uno, esto era muy raro ya que las palabras de Jyugo fueron "Mantendremos esto en secreto" estaba confundido hasta que llegó la noche.

-Jyugo....-Con enojo y frialdad Uno empujó a Jyugo contra la pared, tomándolo de las manos.

-¡Uno....suéltame!-Jyugo movía sus manos intentando alejarse de él, para así evitarlo de nuevo.

-¿Por qué me estás evitando?-Uno se veía fiero oso, no aguantaba que su amante lo evitara o...¿Acaso se había cansado de él?
-¿Acaso te cansaste de mí?-

-N...no....esque....-Jyugo desvió la mirada algo sonrojado.
-Estoy resfriado....no quería contagiarte-

-¡Idiota!¿Y tienes que evitarme así de repente?-Uno puso una de sus manos debajo de la playera de Jyugo, sintiendo su abdomen un poco marcado y empezar a jugar con su pezon.

-Mgh....Perdón-Jyugo intentaba no gemir ante tal acción, pero ya conocía sus puntos débiles.

-¿Perdón? Eso no me basta....serás castigado....-Uno tomó un trapo que había en el suelo y lo puso en la boca del peli negro, intento buscar otro, a continuación se desató la chatarra y la puso en las manos del chico como esposas.

-Quiero ver tu rostro cuando te vengas-Diciendo estas palabras bajo de un golpe sus pantalones para luego rozar su miembro contra su entrada.
-Esta vez, no seré amable contigo-

//UwU actualización... espero que les ata gustado, sigan apoyando esta bonita historia.

Uno castigará a Jyugo por evitarlo por toda una semana, una semana en la cual el ala tres estará descontrolada😱♥️//