La perfección de la oscuridad oprime el pecho. En una noche tan oscura como la tinta de un frasco, en la que parece verse la nada y el todo, nos ahogariamos. Frías olas de oscuridad nos empujarian hacia el fondo de un duro suelo, cuya silueta se recortaria , en los tonos de los abismos de los ojos de quien sufre, contra la infinidad de un universo que se extiende y que nos tira contra una fría realidad, una fría existencia insignificante. Sin duda alguna, nos ahogaríamos. Pero ahí están las estrellas. Hiriendo a la oscuridad, quebrándola. La luz que agujereo a la verdad más opresiva.
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Las estrellas que quebraron la oscuridad.
Proză scurtă¿Puede hayarse armonía en unos pensamientos que rayan en la paranoia o el único propósito de estes textos es que me deshaga de la tinta que lloró mi corazón en busca de dejar hueco a la felicidad, como una noche polar que se despoja de parte de su n...
