Luego de la Roda Fest, todo cambió y aunque ninguno de ellos quisiera admitirlo ese era el comienzo de una nueva historia.
Luna, o mejor dicho Sol Benson, había descubierto quien realmente era, la razón de todos esos sueños, su búsqueda al fin había dado resultado. Ya nada seria igual
Luego de todo eso, el mundo giró entorno a ella, una vez más, después de haber ganado el patín de cristal y el corazón de todos
Mientras eso pasaba, el mundo de Ámbar se derrumbaba poco a poco, ganó la competencia y sí le hizo feliz, pero justo cuando creyó qué al fin había derrotado a Lunita le salen con el patín de cristal, las personas aplaudían mas fuerte qué la anterior, sus padres estaban allí apoyándola ¿y a quién tenia ella? La persona qué mas amaba estaba en una playa junto a su mejor amiga, qué horrible se siente ver a la persona qué amas siendo feliz con otra.
-¡Ámbar! -Dice Matteo a larga distancia haciendo qué ella volteé algo asustada- ¿Qué haces aquí? ¿Estas llorando?
Sus hermosos ojos azules brotaban lágrimas de ellos, nunca la había visto de esa manera, tantos años de noviazgo y jamás la había visto hací.
Matteo se acerca a donde ella ¿qué hacía ahí? ¿Qué estaba viendo?
Y no solo a Ámbar le causo tanto dolor ver eso, un beso entre Luna y Simón.
-Lo siento, Matteo- Se limpio las lágrimas poco a poco, el le miraba serio pero muy en el fondo sentía algo de dolor.
-Igualmente Ámbar- Dijo él viéndola expectante - Ven -La tomo de la mano- No podemos seguir viendo esto.
-Matteo, si quisiera hablar de esto con una persona claramente no seria contigo -Le suelta la mano inmediatamente- Nos vemos- Se va algo fría, como si nunca hubiera pasado nada.
Y ahí estaba, su ex guardando su peor secreto, muchos de los qué ya sabía.
[♪♪♪]
Ya habían regresado a Buenos Aires, Ámbar decidió tomar un separado de toda su familia, no quería oír a Luna presumir su patín de cristal, y mucho menos quería oír sus risas y su gran carisma.
En el autobús del Roller, Matteo Balsano estaba totalmente en silencio, veía el paisaje por la ventana. Al fin sentía el dolor y los celos, pero no podía decir nada, Luna no le pertenecía.
Parecía qué todo esto era una broma, un holograma, enserio pensó qué Luna seria la correcta, con la qué duraría toda su vida y con la qué tuviera hijos, pero no.
-¿Éstas bien? -Preguntó Simón viendo su cara, notó qué le pasó algo.
-Si- Respondió seco, tratando de ignorarlo
No había de qué preocuparse, el mundo de Ámbar y el de Matteo no estaba totalmente destruido, formarían un nuevo equipo llamado Red Sharks, y ellos serian los primeros en ser contactados para participar en él.
-Al fin, llegamos a Buenos Aires- Dijo Jazmín con carisma, sostenía su tablet en su mano derecha y grababa un nuevo vídeo para Ja-Jazmín - Ya extrañaba a Buenos Aires -Suspiró- Les contaré cada detalle, cada minuto qué paso, primero lo primero -Dijo sonriente- Luna ganó el patín de cristal ¡Nadie se lo esperaba!
Ámbar, quién se encontraba llegando a la mansión apagó su tablet dejando de ver él espantoso vídeo, lo qué faltaba era a sus familiares hablar de ella. Su nuevo estilo dark daba mucho qué decir, ella no era la verdadera Ámbar Smith, o quizá siempre fue ella solo qué nunca lo demostró
-Ámbar -Dijo su abuelo quien la esperaba en la sala junto a "toda" su familia- ¿por qué decidiste venir en otro taxi?
Ella simplemente no respondió, siguió de largo ignorando totalmente a su abuelo, subía sus escaleras rumbo a su habitación.
-¡Ámbar! ¿¡A donde vas?! -Preguntó Alfredo notando su nuevo estilo, el abrazaba a Luna con un solo brazo pero dirigía su mirada a Ámbar.
Se volteo lentamente, como una película de terror -A mi habitación- Dijo seria -O no, perdón ¿ya no es mi habitación? Seguramente Luna quiera la habitación más grande ¿también quieres quitarme eso? -Dijo amenazante, bajo pocos escalones, al llegar al último se cruzó de brazos.
-Ámbar ¡yo no te hice nada! -Gritó Luna posicionada igual qué ella.
-Lamentarás el día qué pisaste ¡mi pista! ¡Mi mansión! ¡Mi vida! -Dijo seria- ¿Vas a echarme de la casa, te vas a quedar mi cuarto también? Contame -Se acercó a ella amenazante- ¿qué vas a hacer ahora que sos la dueña de todo?
Luna se le tornaron los ojos llorosos, Alfredo cada vez le abrazaba más y más ¿esa chiquita conocerá el dolor?
-¡Ámbar ya basta! -Todo lo qué hizo Luna para hacerme quedar como la mala frente a su abuelo, y frente a toda su nefasta familia -Creo que no es una mala idea qué te vayas a tu habitación.
Un sonido hace qué se detenga su posible discusión.
-¿Hola? -Preguntó con el celular en el oído, lo sostenía con su mano izquierda, veía expectante a Luna mientras ella misma le veía curiosa.
-Cuenta conmigo- Respondió después de unos minutos y colgó, bajo su teléfono con una sonrisa victoriosa, haciendo que Luna se sienta algo amenazada.
Mientras con Matteo Balsano, enserio estaba devastado, decepcionado. Qué ella hubiera jugado con sus sentimientos de esa manera, el enserio pensó qué ella lo amaba.
Su teléfono empezó a sonar y el tomó su teléfono dudoso.
-¿Hola..? -Preguntó, después de unos minutos volvió a hablar- ¿Qué? No, mi equipo es la Roller, no lo voy a dejar por nada del mundo.
Esa era la oportunidad de su vida, o quizá no.
Qué lindo fue Matteo al decir eso, pero sabía en el fondo de su corazón qué se tendría qué alejar de las personas qué le hacían daño, solo qué no quería recibir el regaño de todos cuando se enteren qué está en un equipo contrario.
-No..no sé- Respondió dudoso aún con el teléfono en su mano- Tengo qué pensarlo.
ESTÁS LEYENDO
Soy Luna Y Tú
Short StoryTodo cambiará, ya no serán las mismas personas qué solían ser y todo por la llegada de una nueva chica. ¿Tres son multitud, o no? [Matteo y tú] [Simón y tú]