D O M I N G O
Tú POV.
Desde qué llegué nadie me a dado la bienvenida, me hubiera gustado muchísimo, pero... Yo no puedo decidir las palabras de los demás.
Cuando fui por mis patines me encontré un chico cabello castaño, era guapo, pero no sé, ahora me está persiguiendo como un acosador, algo qué me causa gracia. ¿Él es de nuestro equipo, no? Quizá debería conocerlo, pero todo a su tiempo.
Al terminar de patinar me dirigí a la barra, aquel chico qué ya había visto antes de encontraba con un pequeño pañuelo y un balde, le dirigí una mirada pero el solo la esquivo sonriendo y siguiendo con su trabajo. Y ahí estaba él, Matteo era su nombre ¿no? Tomé algo de agua mientras él presumía sobre los saltos y giros qué hacía, sinceramente no le estaba prestando atención, y cuando se dio cuenta decidió acercarse.
Segundo round.
–¿Harás qué adivine tú nombre?
Terminé de guardar mis cosas en la mochila para luego voltear y mirarlo a los ojos.
–¿Estás siguiendome? –Pregunté divertida con una sonrisa intacta.
Él solo negó con una sonrisa, no pude evitar soltar una leve risa ante lo indiscreto qué es.
–Umm, de echo te iba preguntar justo lo mismo.
¿Disculpa? Yo no lo estaba siguiendo a él, para nada, ni siquiera lo conozco.
Aún no me lo creo. Cuando llegué él ya se encontraba en la pista pero eso...¡Yo no lo estaba siguiendo! Simplemente quería patinar, eso era todo.
Debo admitir qué es más bonito de cerca, sus ojos cafés son conquistadores y además, esa actitud no se la arranca nadie.
–Ok.. –Quité mi sonrisa para asentir lentamente, él cambio su cara a una de confusión –Si eres lindo.
Él sonrió y subió de cejas.
–Quizás me resista un poco, pero sabemos qué tarde o temprano accederé así qué..
–Yo.. Pensaba en ir a cenar primero
¿Acaso me estaba invitando? Aún no sabía qué responder ¿qué haría? Solo dije qué era lindo, no más, y aún así, me dijeron qué tenía novia, no creo qué... No, no quiero hacerle daño a nadie aquí, yo jamás le quitaría el novio a alguien
Justo cuando fui a responder, fui interrumpida por una presencia qué no me parecía nada familiar, pero aún así no me detuve para mirar por encima del hombro de Matteo.
–¡___!
Él se volteó lentamente para ver de quién se tratase; Ya se quién era ella, ella es la chica del Roller ¿como era su nombre? Teresa...Ta, ¡Tamara!
–¿Cómo éstas? –Continuó su frase al sonreír.
–No dormí nada, estoy muy emocionada.– Tomé mis cosas lentamente
Aunque no entendí la risa y gracia qué tuvo la situación a los ojos de Matteo, no le preste atención, simplemente desvíe mi mirada y seguí adelante pasándole por un lado.
–Hoy es tú día..
Suspiró, parecía qué quería hablar conmigo por lo qué fui obligada a irme del lugar.
–Gracias –No pude evitar sonreír.
Ya habían pasado, un, dos... Cuatro horas ¡¿cuatro horas?! ¿Así de rápido se me fue él día? No puedo creerlo, apenas llegué, patine y ya son las cuatro de la tarde, qué rápido pasa el tiempo.
Y para ponerle la cereza el pastel, mañana tengo qué ver clases en el Blake, soy una estudiante de intercambio pero sí realmente me gusta él colegio no tendré problemas en decirle a mis padres qué me quedaré ahí permanentemente. Aunque ese no sería el mayor problema, sería reemplazada por la duda de ¿dónde voy a vivir? La única duda qué les preocupa a mis padres, por suerte, en mi tiempo como estudiante de intercambio podré quedarme en la casa una amable chica qué se ofreció... Su nombre era Sol, Sol Benson.
No la conozco, pero debe ser realmente amigable.
Luna POV.
Después de recibir esa pésima noticia, volví a la mansión, él único lugar dónde puedo ser feliz, junto a mi abuelo y mis padres.
–¿Y esa carita Luna?– Apretó mis cachetes mi madre para tratar de averiguar por qué se trataba aquella cara de molestia y enojo.
–No vas a creer lo qué pasó. –A mi madre le cuento todo
–Llegó un supuesto Gary, qué dijo qué nosotros no podíamos usar la pista nunca más por qué el nuevo equipo del Roller siempre la estará utilizando, los Red Sharks– Crucé mis brazos algo enojada, cambie mi rostro a uno de tristeza –La verdad es muy injusto lo qué está pasando y por encima, Matteo y Ámbar forman parte del equipo.
–¿Matteo?
A mi madre también le sorprendió, ella ama a Matteo, y mira, qué gran decepción qué nos esperaba de parte de él, sinceramente pensé qué nunca me fallaría pero me equivoqué, él no ha cambiado, él sigue siendo el mismo de siempre.
Y pues, de Ámbar ya me lo esperaba.
–Tranquila hija, todo debe tener una explicación.
Me calmó mi madre posando su mano en mi mejilla, realmente me siento mejor al hablar con ella.
Pero él sonido de una puerta chocar fuertemente para cerrarse hizo salirme de nuevo de la tranquilidad ¿Quién era? Y ¿Por qué lanzó así la puerta? Mi madre y yo no evitamos saltar de un susto para luego oír una voz demasiado familiar llamar nuestra atención y hacer voltear hacía atrás.
–Y bueno, está es la sala.
Era la voz de Ámbar, tal como lo sospeche, pero ésta vez traía compañía ¿acaso esa era ____?
¿Qué hacía ella aquí? Yo amo qué Ámbar haga amigos, pero ya es demasiado tarde ¿Acaso harán pijamada?
–Oh, hola Lunita.
Sonrió Ámbar, al igual qué yo y mi madre. No estábamos enteradas de su presencia pero aún así, no podía ser descortés
–Ella es Luna...–Su sonrisa desapareció al instante, haciendo qué mi rostro se torne algo confundido –No perdón, Sol Benson se llama... Ella era la simple hija de los empleados pero ahora es la dueña de la casa
¿Otra vez armando sus berrinches? Odio cuando Ámbar hace estas idioteces, enserio, no tiene gracia, y mucho menos al frente de ____.
–Hola Luna, hola señora Valente, mi nombre es ____.
Mi madre se acercó dándole un cálido abrazo, Ámbar sonreía con aquella sonrisa maliciosa qué acostumbra poner cuando tiene algo entre manos.
Y se que lo tiene, por qué de ninguna otra manera hubiera traído a ____ aquí.
–¿Qué hace ella aquí?
–Ay Lunita, no seas descortés. –Yo jamás quise... Olvidenlo –Ella ésta aquí por qué tú te ofreciste a esto ¿no? ¿Te ayudo a recordar?
–¿Cómo?
Preguntó mi madre ante el gran comentario de Ámbar, seguro ésta inventando de nuevo, como acostumbra a hacer.
–Ella es la estudiante de intercambio ____.
¡Qué! Me lo había olvidado, no puedo creer qué me había ofrecido para eso, qué coincidencia ¡todo esto encaja a la perfección! Capitana de loa Red Sharks, vive en mi casa y estudiara en él Blake.
Por suerte mi mamá se lo ha tomado bien ofreciéndole una habitación a la chica, esto no puede ser verdad... Luna, ya es hora para despertar de esta pesadilla
Todo esto debe ser parte de él plan de Ámbar, no puedo creer hasta donde llegara esa chiquita por esforzarse para manchar un poco mi nombre.
ESTÁS LEYENDO
Soy Luna Y Tú
Short StoryTodo cambiará, ya no serán las mismas personas qué solían ser y todo por la llegada de una nueva chica. ¿Tres son multitud, o no? [Matteo y tú] [Simón y tú]