Capítulo 4.

1.5K 209 34
                                    

Nastya revisó el trozo de papel con una dirección escrita. Era un barrio de clase baja al sur de Chicago, y la casa parecía recién salida de una película de terror.

Nastya llamó al timbre, asegurándose de tener a la que había decidido nombrar como Dina (su 9mm) recargada y preparada.

La puerta se abrió y apareció un chico, de más o menos su edad, con cabello rubio, piel pálida y característicos ojos violetas. Vestía una camiseta de tirantes blancas, unos vaqueros rasgados, e iba descalzo.

-¿Quién eres?-preguntó con voz grave, rascando su barba de un par de días.

-Soy...-Nastya se debatió por mentir o decir la verdad. Y, por primera vez, decidió decir la verdad-. Annastasya Vólkova.

-¿Y qué hace una rusa por aquí?-preguntó él con una media sonrisa.

-¿Eres Ashton Maxwell?-preguntó ella, directa al grano.

-Sí, ¿por qué?

Nastya tragó saliva.

-Es una larga historia, ¿puedo pasar?

****

-Entonces, ¿eres mi hermana?-preguntó Ashton, bebiendo un trago de cerveza.

-Algo así. Mi padre tuvo una aventura con tu madre y, por lo visto, nacimos nosotros. Somos mellizos, porque tienes veintidós años, ¿no? -preguntó Nastya, analizando las cajas de pizza mohosa y las latas de cervezas por toda la casa de su hermano.

-Exacto. Y, ¿ahora qué?

-Yo tengo que volver a Nueva York. Tienes dos opciones: venir conmigo, o quedarte en este tugurio -dijo Nastya, poniéndose en pie.

-Elijo Nueva York -dijo su hermano, sin dudarlo ni un segundo.

-De acuerdo, haz las maletas rápido y nos vamos. Te compraré otro billete -murmuró Annastasya, sacando del bolsillo de sus vaqueros su móvil.

****

Cuando llegaron a Nueva York, Nastya pudo observar como su hermano miraba asombrado cada cosa. Le parecían alucinantes hasta las ratas, porque eran de Nueva York.

Antes de ir al apartamento de la chica, pararon en la oficina de Colin, ya que Nastya tenía trabajo.

Llegaron al despacho, pero Nastya se paró en la puerta, y se giró hacia Ashton. Sacó la 9mm y lo apuntó a la cabeza, lo que casi provoca que el chico se desmaye.

-Te dejaré entrar, siempre que estés callado y quieto como un puto muerto, ¿me entiendes?

Ashton asintió rápidamente. La chica se guardó la pistola en la cinturilla de sus vaqueros, y entró al despacho, para encontrarse con Colin, y su radiante sonrisa hacia ella, que se desvaneció al ver a Ashton.

-Oh, Dios mío, ¿en qué te has metido ahora, Nastya?

-Él es Ashton, mi hermano -dijo Nastya, señalando al chico.

-Mierda -contestó Colin.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: May 23, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

22 seconds.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora