☔ Capítulo 12 ☔

597 30 10
                                    

Chika

- ¿Qué pasó? ¿A donde va...

Escuché la voz de Dia antes de largarme de ahí. Sin embargo opté por no responder, no quería cometer alguna estupidez.

La verdad ... Creo que no tengo fuerzas para hacer una estupidez ahora.

Creí que al menos vendría y me explicaría, pero no fue así. No recibí ni un mensaje, ni una llamada. Cero explicaciones y aunque desee regresar a su maldito lado, mi jodido orgullo lo impedirá.

Di unos pasos más, ya no sé en donde me encuentro. Solo decido sentarme en una rocas cercanas.

- Luego llamaré.- reviso la hora en el celular.- Maldición me perdí.- bajo la mirada jalandome el cabello con ambas manos.

- No te perdiste, descuida.- escucho y siento una mano apoyarse en mi cabeza.

- ¿Que haces aquí?.- alzo la mirada.

- Lo mismo pregunto.- sonríe.

- Esa no es una respuesta.- suspiro.

- Esa tampoco lo es.- ladea la cabeza.

Me paro con la intensión de irme, al notar eso You me detiene pidiendo disculpa.

- Por tu rostro puedo deducir que algo malo ocurrió.- pestañea rápido.- Y por lo visto no quieres conversarlo.- frunce el ceño al ver que no contesto.- Mira no se que ha pasado, pero déjame decirte que te acompaño. Estaré contigo.- se sienta a mi lado.

- ¿Sabes You? Podría besarte ahora mismo por despecho, pero no pienso hacer una mierda tan típica y absurda.- menciono algo suave intentando que no se moleste.

- Entiendo.- hace una pausa incómoda.- ¿Entonces nos acostamos?.

- ¡¿Que demonios contigo?!.- levanto la voz entre risas.

- Lo siento, pero dijiste que no harías algo típico y absurdo como un beso. Entonces pensé que-

- No, por supuesto que no You. Por favor.- me levanto alterada.

¿Cómo puede pensar de esa forma?

- Bien, bien. Tranquila era una broma.- toma mi mano intentando relajarme.

Un silencio nos perfora, al igual que el viento desesperado por el sol al ocultarse.

- Tus bromas son un asco.- suelto.

- Me lo dices cuando también te reiste.- apoya su cabeza en una mano.

- Cierra la boca.- me recuesto en su hombro.

You no dice nada, solo estira sus brazos y me abraza. A pesar de que no sepa nada, logró calmar mi ira y mi estupidez por vengarme.
Me separo, me levanto y le ofrezco mi mano.

- ¿Nos vamos?.- intento sacar una sonrisa sincera.

- Vamos.- toma mi mano.

Caminamos por unos seis minutos, You me dejó cerca del campamento. Así que decido despedirme.

- Gracias.- revelo.

- De nada.- sonríe, pero en unos segundos su sonrisa desaparece.

❄ ¿Quien lo diría? ❄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora