GOT7 cuando te encuentran durmiendo sobre otro miembro/apoyada y se ponen celosos pero resulta ser tu hermano mayor.
- Mark
Desde la primera vez que te vio, había quedado hipnotizado en tu mirada, la forma tan adorable en que reías y tu sonrisa. Al igual que él, sacabas a tu perrito a pasear.
A pesar de ser alguien un poco tímido y callado, se atrevió a hablarte, inventando alguna excusa para ello. Coco había sido su comodín, por lo que hizo que fuera hasta ti y poder iniciar cualquier conversación.
Los días pasaban, y entre uno de los días que volvía, se dio cuenta de que en el cuarto de Jaebum se escuchaban risas y voces—entre ellas, una femenina— que le parecían bastante familiares.
Dudosamente se acercó a la puerta y la tocó, una vez escuchó el permiso, entró en el.
Cuando te vio acostada y media adormilada sobre Jaebum, sintió como su corazón se rompía. ¿Cómo es que lo conocías? ¿Tenían una especie de relación amorosa? Aún así, trataría de controlar todo el montón de sentimientos encontrados que sentía.
— ¿Interrumpo algo?
— Lo siento, Mark, olvidaba decirte que mi hermana menor venía a visitarnos. Hace unos días se mudó a Seúl.
— ¿Tenías una hermana? –ahora lo entendía todo y sentía un completo alivio.
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- JB
Desde hace unos días, Jaebum había estado hablando con una chica que trabajaba en la misma cafetería a la que frecuentaba ir. Aquella chica la había dejado sin aliento desde la primera vez que la vio.
Por fin había conseguido su número de teléfono, por lo que en cada oportunidad que tenía del trabajo, te hablaba o mensajeaba para saber de ti.
Entre todas esas llamadas y mensajes, pudo conseguir invitarte a salir. Por lo que, muy feliz, volvió al dormitorio para encontrarse con una situación que lo dejó completamente descolocado.
Tu, la chica de la cual ha estado enamorado, estabas durmiendo sobre el regazo de Youngjae. Sentía una mezcla entre molestia y tristeza, sentía que sus ilusiones se rompían.
— Oh, hyung, que bueno que llegaste –susurró.
— ¿Quién es ella? –sin duda, no pudo ocultar muy bien los celos que lo comían por dentro.
— Quería que conocieran a mi hermana, pero se durmió antes de que eso ocurriera.
— ¿Ella es tu hermana? ¿Desde cuando tienes una hermana?
— Pensé que ya lo sabías... ¿no te lo había dicho? Lo siento...
Luego de eso, se sentiría un poco tonto, había sentido celos sin sentido, temía haberse dejado en evidencia...
