Gift - SouthPark »Staig«

MIERDA

Hace un par de meses, Randy quiso incluir vacas a la "granja" para tener más productos que poner a la venta. En poco tiempo supo que fue una muy mala idea. Solamente bastó con descuidar las unos minutos y ya habían empezaron a devorar parte de su cosecha, se perdió al menos una cuarta parte.

Termino vendiendo las vacas y trabajando el doble esa misma tardé.

Por aquella loca idea de las vacas había mando a construir otro granero donde podría guardarlas, sin ellas ahora se utiliza como un almacén casi lleno de cajas con cosas olvidadas dentro y que ahora debe revisar e ir clasificando como útiles e inútiles para desocuparlo. Agradece que sea del tamaño de su cuarto y el Shelly juntos, de lo contrario tendría más dificultades para acabar antes de la noche.

— ¡ahg! ¡Demonios, Papá! — maldijo cuando al levantar una de las tantas cajas, esta se abrió por debajo ya que estaba muy desgastada y mal empaquetada.

Desea con todas sus fuerzas que las demás estén en mejores condiciones que esa.

— ¡Hey, Stan! ¿Qué tanto haces, eh?

Mierda.

Hoy no es su día.

— ¿Qué te parece que hago, Stomper? — respondió malhumorado al otro pelinegro que se iba acercando.

Sí. El maldito Romper Stomper, amigo y ex-compañero de celda de Cartman, está en la granja de su familia por la desagradable razón de ser...

— No seas grosero, hermanito. Esa no es la forma de tratar a tu cuñado.

...El novio de Shelly.

Así es, Romper Stromper, el ex­-convicto del Centro de Seguridad Juvenil Alamosa, es el increíble novio de Shelly, aquel que recibió chocolates de su parte este año y el anterior ¡Y sigue con vida después de consumir lo que Shelly horneo...Con ayuda...Su ayuda! Lo increíble de Stromper es, aunque le cueste admitirlo, detrás de todo ese show mal montado de "chico problemático", es una buena persona, obsesionado con Disney, pero buena persona.

Sinceramente, Stan no lo odia.

— Está bien, preciosa, solo está jugando ¿verdad, amigo? — lo engancho con el brazo apegándolo a su pecho entre tropiezos y le revolvió el cabello amistoso.

No le desagrada.

— Ah...Hahaha...Si, solo jugaba — termino hablando entre dientes forzándose a mantenerse sonriente sintiéndose incómodo por la cercanía.

Ni lo odia, ni le desagrada Stromper, solamente le molesta esa confianza que tiene para acercarse demasiado a él e invadir su espacio personal, además de tratarlo como si fuesen ya familia.

Le recuerda a la familia de cierto rubio mormón.

Uhg, desagradables recuerdos.

— ¿No tienes algo que hacer, mojón? — Shelly jalo a Stomper obligando a soltarlo provocando que el menor casi cállese al lodo, y antes de que Stan atentara siquiera en responder, una vez recobro por completo el equilibrio, se llevó consigo a Romper arrastrándolo hasta la casa.

En cuanto se adentraron a la residencia Stan sintió que podía respirar de nuevo.

Momentos así adoraba los desnivelados e irrazonables celos de Shelly.

-°•§•°-

— ¡Termine! — festejo satisfecho por el resultado. Le tomo todo la mañana y gran parte de la tarde acabar con eso, pero valía la pena.

Como había predicho, hubo mucha más basura para tirar que cosas útiles que conservar. Le parece que solo la quinta parte de todo no fue desechada al basurero. Y por suerte, solo hubo unas cinco cajas más como la primera que lo retraso, edemas de que Shelly no dejo que Romper interfiriera.