Shinigami No Mai

La verdad es mostrada.

Han pasado meses, empece a entrenar con Marluxia, pero solo meditamos, bueno mejor dicho, yo medito, el se queda leyendo un libro muy extraño, se vuelve rojo cuando lo mira, y siempre me lo esconde.

pero eso no es lo importante, Shana, Sabel, sigo con la búsqueda de los que pueden vivir una vida, mi mejor amiga, y un gran guerrero, aunque, por un instante, creo que lo he superado, no, lo se, soy mucho mas poderoso que el, solo me faltaba un tesoro espiritual, el cual Marluxia me dijo que recibiría pronto.

Me doy cuenta de algo increíble, me gusta Shadow Bastión, ahora es mi hogar, y mi gran objetivo ya esta escrito, vencer a Sabel por siempre que peleábamos, siempre perdía, pero esta vez no perderé, solo necesito una arma, y borrare a Sabel del mapa, solo me emociono de pensar lo.

Obtener el gran poder que pocos obtienen, el Bankrai, el poder de los grandes maestros, ni Marluxia, que me vence de un golpe, ha obtenido el Bankrai, cuando lo obtenga, yo y Shana seremos libres.

-Idiota, no se en que estas pensando pero ven, Ansem te quiere dar tu arma, y no le hagas esperar, es uno de los mas fuertes de Sadow Bastion siéntete honrado de que pierda el tiempo dándole una arma a un niño como tu, que morirá en cuestión de días - Marluxia no era el mas amable, al igual que no era el mas fuerte, pero tenia que hacerle caso asta ser mas fuerte que el.

Ansem,ñ se oye que es uno de los mas fuertes de todos los sirvientes de Zekend, al parecer un dios el qual participo en la guerra muerta, pero no puedo dejar que me coman la cabeza, tengo que volver con Shana, al pueblo, pero ¿que ha pasado con el pueblo?

Entre en mi cuarto, encima la cama había una katana, ese era mi armamento, mi tesoro espiritual, una arma de gran poder, o eso espero.

-Pilla tu espada, ahora vamos a entrenar, ha luchar, mañana ya tenemos trabajo, ha ver que sabes hacer idiota.

En el campo de entrenamiento del Shadow Bastion todo guerrero se hacia mostrar de la manera que es.

Marluxia invoco a su armamento, yo invoque al mio, empezó la pelea, al chocar nuestras armas unas chispas y un gran golpe asusto a todo el mundo, conseguí canalizar todo mi Retsu, que obtuve en la inmediata, en mi katana, obteniendo así mucha mas fuerza, el segundo golpe fue bloqueado, un gran Retsu se acercaba, de golpe Marluxia se arrodillo y me miro con su gran mirada asesina, le seguí. De golpe, un hombre, alto, con un tenzai diferente, pelo negro se nos acerco, y en ese instante me di cuenta, de que en este lugar, hay seres con un poder descomunal.