Pero ella está cerrada.

Sus ojos son ventanas
ventanas cerradas,
Donde nadie puede ver su alma.
Ella sabe que su mente está errada.

Ella creyó en alguien;
Creyó en alguien en un futuro que se convirtió en pasado.
Creyó que él era el alguien de su vida,
creyó que él la sacaría del hueco que era su vida.
Pero él sólo la undió más en lo profundo.

Ahora ella no cree en nadie.
Ni siquiera en ella misma.
Ha sellado sus ventanas,
para que nadie las abra.
Pero ella sigue errada.

Su mente se desvía a pensamientos vacíos,
pensamientos de soledad.
Piensa que tal vez no habrá nunca nadie más
que logre abrir sus ventanas.

Y piensa también,
que tendrá que cargar con sus penas
hasta que a la vida le dé la gana.

Pero su mente está errada.
Y su ama asustada.
Ella no quiere ser lastimada
otra vez en la jugada.

Ella quiere ser salvada.
Pero su mente la ataca.
Ella se obliga a cerrar sus ventanas,
pero sigue queriendo ser salvada.

Y aquí estoy yo para ella.
Para abrir sus ventanas con gentileza.
Liberar su alma de la profunda oscuridad.
Sacarla a ella de lo inmundo.
Llenar el vacío.
Ser el alguien de su futuro soñado,
que no se vuelva pasado.

Pero ella está cerrada.
Su mente errada.
Y su alma asustada.