4.-Silence

77 13 4
                                    

Monstruo, monstruo ¿Dónde estás?

.

.

.

.

.

.

Ah, ¿ya están por aquí? Estoy tan acostumbrado a solo observar, a escuchar desde las sombras, que me perdí unos momentos. Pero no les sorprenda que eso sea lo que me guste, porque eso es, justamente, el centro de mí ser.

Soy una pesadilla.

No suelo hablar mucho de mí, porque se supone que yo no existo, nunca había ocupado hablar con nadie que no sea otro como yo. Para los humanos, una pesadilla es un sueño desagradable que produce angustia, ansiedad, miedo o terror. O bien, una persona, hecho o situación desagradable que es causa de graves y continúas preocupaciones o que provoca temor. Pues bien, yo soy justamente eso, no un sueño en sí, y no una persona, porque no existo tampoco. ¿Complicado? Ah....

Lo explicare como lo hacen esos cazadores. Soy un monstruo. Un ser que crea esos malos sueños que tienen ustedes los humanos. Andamos por ahí, esperando el momento justo para actuar, para convertir un sueño en una pesadilla. Angustia, ansiedad, miedo y terror, nosotros nos alimentamos de eso, es nuestra razón de ser. ¿Lo explique mejor? Eso espero, porque no me gusta la idea de que sepan sobre nosotros, pero supongo que hasta aquí ya saben quién soy. Sí, soy esa pesadilla que termino atrapada con un cazador de pesadillas. Que hilarante.

— Iridian ¿seguro de que estas bien?

— Si— este hombre es desesperante, en extremo desesperante. A lo mejor porque ha vivido muy poco a comparación de mí, pero no está viendo esta situación como debería.

— Pasó una mala noche, todo por no avisarme a donde iría y no reportarse como es debido— ah, la mujer. Ella es especial... no, no es ella. Es eso que lleva en el vientre. Me gustan los niños, no miento cuando lo digo, los niños tienen tanta imaginación, que a veces son capaces de vernos. Bueno, vernos como ellos quieren, porque nosotros no tenemos una forma. ¿Les suena eso de amigos imaginarios? Si, somos nosotros. Por eso me gustan los niños, son una fuente inmensa de emociones, y sin necesidad de esforzarse mucho.

— ¿En serio?— nunca había estado rodeado de tantos cazadores. No estoy asustado, solo sorprendido. ¿Quién lo diría? Son tan... insignificantes. Creo que no saben mucho sobre ellos, ese rubio idiota evita pensar mucho en ellos ahora que estoy por aquí.

No tienen tanto tiempo, creo. Es difícil saber de tiempo en cuestión de humanos, pero sin duda, no son tan antiguos como dicen ser. Su historia es muy simple, a alguno de los nuestros se le ocurrió la brillante idea, y noten que es sarcasmo, de decirle a un humano sobre nosotros. Yo no sé quien fue, aun no venía a este mundo cuando paso. Pero el punto es que ese le conto casi todo sobre nosotros a un humano. Y allí es donde surgen ellos, los cazadores.

Siempre he pensado que eso fue una broma, que ese monstruo estaba tan aburrido que decidió divertirse un rato con un miserable humano, porque aunque le contó la forma en la que actuamos, lo que hacemos, y nuestra muy innecesaria debilidad al mercurio, no le conto las cosas principales sobre nosotros. Un momento.

humano idiota, te están hablando a ti. ¿Puedes al menos inventar alguna buena escusa si no quieres que nos maten?— listo ¿en que estaba? Ah, ya. Aunque no lo parezca, nosotros tenemos ciertas reglas. Contarle sobre nosotros a un humano no está prohibido, pero contarle las formas en que pueden matarnos... bien, eso no estaba prohibido hasta entonces.

— ¿Qué estabas haciendo, Iridian?

— Paseando— arg, que poca imaginación tiene este hombre. En fin... en lo que llegamos a su aun más aburrida casa, les contare algo sobre mí. Me molesto con facilidad, aunque no lo parezca. No muchas cosas me ponen de mal humor, porque sé cómo darle la vuelta a casi todas las situaciones en las que estoy, y justo por eso mismo, soy uno de los guardias de Eerkah. ¿Que qué es eso? Eerkah es la tierra donde vivimos las pesadillas. Un mundo paralelo al suyo. Ahí es el único lugar donde estamos a salvo, donde podemos vivir mucho tiempo.

PesadillasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora