Rebel Love X Aristemo X

24.

*REPRODUCE LA MUSICA PARA UNA MEJOR EXPERIENCIA*

Cerré la puerta de mi cuarto

T: nunca me voy a cansar de ver tu pequeño gran fuerte Ari

A: es nuestro Temo, solo nosotros... los reyes del fuerte

T: pues este rey se va a cepillar los dientes

A: te acompaño – ambos estábamos frente al espejo cepillándonos los dientes y de nuevo no pude evitar pensar en un futuro con él, le acaricie la mejilla y el mentón... no era posible que el ya tenga rastros de la barba y yo no... en eso lo envidiaba, terminamos de cepillarnos los dientes – me gusta tu barba

T: recién me empezó a salir

A: lo se... que envidia – le di un beso en la mejilla – vamos a descansar – lo tome de la mano y lo lleve a mi cama, nos quitamos la ropa, creo que se estaba acostumbrando a dormir como yo, solo en ropa interior, nos recostamos entre las cobijas, la luz de la noche se veía a través de mi ventana ¿Qué tanto pasara cuando uno se va a dormir?, nos quedamos viendo a los ojos por un rato, nunca me voy a cansar de verlo, le roce la nariz con mis labios- te amo

T: te amo Ari... descansa – se dio la vuelta para que lo abrazara, pase mi brazo alrededor de su cuerpo y lo acerque a mi cuerpo, estaba tibio, movió su trasero sobre mi paquete

A: ¿quieres más de mi amor?

T: ¿esta es tu sorpresa?

A: no, esa viene después – me senté sobre Temo e hice lo mismo moví mi cadera de atrás hacia adelante sobre su bulto – esto lo provocaste tú

T: ¿Qué vas a hacerme?

A: ¿Quieres que sea tierno... rudo... que quieres hacer? – estábamos entrando en esa etapa de experimentar cosas nueva

T: ¿Qué te parece si esta vez eres rudo conmigo?

A: sus deseos son órdenes para mí – le tome las manos y las aprisione por encima de su cabeza, lo bese y me detenía en seco para que no disfrutará de los besos, tenía una cara de súplica por que yo lo besara de una manera pasional, ahora eran besos más candentes, eróticos... pervertidos, mis besos bajaron a su cuello, sentí como su cuerpo se tensó al sentir mi lengua en su cuello, le di de mordiditas en sus hombros y terminé con un chupetón pequeño en su cuello, la única marca que yo le haría

T: Ari... - su voz era un susurro titubeante

A: silencio Temo – intenté sonar lo más serio posible pero solo conseguí tener una voz profunda por el deseo que me causaba tener a mi novio a mi merced, le puse las manos a sus costados y las retenía con las mías sobre mi cama, empecé a besar su pecho y pasar mi lengua por sus pezones para que el se retorciera por no poder hacer nada, hice lo mismo por unos minutos que a mí favor me parecía tan eternos, mi lengua se paseaba por su abdomen y de vez dejaba besos, empecé a seguir el camino de vello que iba de su ombligo a su entrepierna, el siempre ha sido más velludo que yo... eso me enloquecía, con una sola mano aprisione las suyas y metí un dedo entre el elástico del bóxer que tenía y empecé a pasear mi dedo de un lado a otro, el suspiraba y forzaba sus manos... saque fuerza para retenerlo - ¿Quieres una mamada verdad? – eso que dije salió por sí solo... el momento y la situación me indicaban a hablarle sucio...

T: si... dámela – mi Temo estaba igual, la pasión de este nuevo acto de amor con un toque exagerado de erotismo y sensualidad nos tenía igual – chúpala... por favor – me lo suplicaba, empecé a bajar de a poco el bóxer, su vello recién cortado me dejaba el miembro de Temo en su mayor esplendor, tenía una erección completa que parecía que estaba ansiosa por que yo la apaciguara con mi boca, le pase la lengua por todo el miembro y le di en beso en la punta, repetía esto hasta que su respiración estaba tan agitada como yo quería, lo tome con la mano tenía y la empecé a masturbar, pase mi lengua por la punta una y otra vez, Temo suspiraba fuerte, no me quería dar los gemidos que yo esperaba, me decidí a meter su miembro en mi boca, mi cabeza iba de arriba abajo y mi lengua envolvía su verga por dentro, ya no tenía presas sus manos ahora estaban entrelazadas mientras yo le daba lo que el quería y el me lo dio a mi, empezó a soltar los gemidos que yo quería, cada vez que toda su erección entraba en mi boca el los soltaba, empezó a levantar la cadera para enterrarme aún más su verga, me ahogaba pero no me pude resistir en dejar que lo hiciera, recibí toda su erección y de momentos me faltaba el aire, tuve que descansar, libere la erección de Temo de mi boca y empece a respirar de manera agitada, su verga pego contra su abdomen - ¿Es todo lo que tienes chico rudo?

A: ¿Me estás retando?

T: muéstrame lo que tienes - ¡Acepto el reto!, De nuevo le lleve ambas manos por encima de cabeza y lo bese

A: mira a qué sabes – metí mi lengua e hice que bailará junto a la suya – sabes muy bien Temo... date la vuelta – ahora mi voz si fue profunda y sería... me obedeció, le tome la cadera y se la alce con fuerza, con una mano pegue su cabeza contra la cama y pase sus brazos a su espalda como si fuera a esposarlo... no era mala idea, tome firmemente sus brazos para inmovilizarlo – abre la boca – de nuevo esa voz que parecía no pertenecerme... el lo hizo y metí dos de mis dedos en ella – chupa – el lo hizo y los saque de su boca – vamos a prepárate – dibuje círculos en si entrada con los dedos que el lubrico con su saliva, entró uno y escuche una quejido, entró el segundo y ahora fue un gemido ahogado en el colchón, movía mis dedos dentro de él lo hacía de arriba abajo y de un lado a otro, los metía y sacaba – estás listo para mí – puse mi verga en su entrada y de nuevo dibuje círculos, deje caer una gota de saliva sobre mi erección y empecé a penetrarlo hasta que entró la punta, Temo gimió fuerte entonces fue que me deje ir y le enterré mi miembro entero en un solo movimiento, el grito... fue un grito de placer, seguía teniendo sus brazos en la espalda... no podía ir a ninguna lado, movía mi cadera de atrás hacia delante muy rápido y fuerte para que el gimiera y gritara a mi ritmo, aprisione sus brazos con una mano y con la otra le tape la boca y calle sus gemidos, le gire un poco la cabeza para que me viera, sus pupilas estaban dilatadas, tenia sudor en la frente, seguía penetrándolo con fuerza, su mirada y la mía se conectaban con deseo carnal... entendía su deseo, libere sus brazos y el los uso de apoyo contra la cama, quedo en cuatro, le seguía dando con fuerza y tapando su boca, yo solo dejaba escapar gruñidos, con la mano que me quedo libre lo tome del cabello y tire de el sin dejar de tapar su boca, me empecé a recostar sobre él, sin dejar de penetrarlo, sentía su espalda contra mi pecho, sentía esa sensación creciente desde mi nuca y como me cosquilleaba hasta mi entrepierna y como en la boca del estómago sentía el revolotear de las mariposas que ansiaban ser liberadas, seguía penetrando a Temo con fuerza pero a un ritmo más lento y pausado, dejaba caer todo mi peso sobre él, sus gritos se ahogaban en mi mano... no me di cuenta en que momento estaba mordiendo su hombro, cuando separe mi boca de el ya tenía una marca rojiza, le bese su nuca... quería que nuestro orgasmo fuera al mismo tiempo, saque mi verga del culo de Temo y me puse en un 69, le puse mi verga en la boca a Temo y el la succionaba, yo hacia lo mismo con la suya, lo masturbaba también y el a mí, el cosquilleo en mi abdomen era incontrolable, sentí que cada centímetro de mi cuerpo temblaba, los espasmos llegaban, me vine a chorros en la boca de Temo, mis gemidos eran detenidos solo por el miembro de mi novio en mi boca, el se masturbaba llevando el control de mi mano en su verga, sentí como se estremecía y se venia en mi boca, lo hice, los trague y lo que escurría por el borde de mis labios lo limpie con la mano, di un gran suspiro

T: dolió... chico rudo – me miro y reímos, me tumbe en la cama aun con la respiración agitada, el se sentó en mi – tenemos que bañarnos, no podemos dormir así – me di cuenta que ambos estábamos sudados, más aparte aun teníamos rastros de nuestras venidas en la cara

A: si mi amor – nos fuimos tomados de la mano al baño...