conociendo a mi primer amigo (4)

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Nadie me había abrazado así, hasta entonces, y levanté mi voz para decirle que no me gustaban los abrazos, que se alejara. Sin embargo, él no se alejó y dijo que no tenía en casa a quien abrazar. A lo que respondí: de seguro tienes peluches, abraza a ellos no a mí. De verdad que aunque me gustara ese tal Julián, no dejaría que me haga eso menos que le haga eso a su novia que disque estaba en otro país. Aun así, se quedó cerca mío, yo no dejaba de pensar que podía hacerme algo más les aseguro que en mi mente no había geometría en ninguna parte. Finalmente, lo último que recuerdo fue que comenzó a decir que yo tenía "pelitos en mis hombros", realmente odio que mencionen algo de mi físico si es que no es algo bueno, simplemente me disgusta y listo ahí se acabó la historia de Julián. ¿Qué más paso? En realidad no es relevante, ese día me copie de su tarea, no aprendí geometría y me aleje de él. Aunque es cierto es crucial ese momento, el ultimo día que me senté a su lado sucedió que el maestro de trigonometría otra vez hizo de las suyas dejando ejercicios. La persona que no lograba realizar los ejercicios se iban del salón, al instante, empecé a sudar porque trigonometría no era mi fuerte (it isn't my cup of tea- como dirían los británicos) Era mi fin, Julián fue un egoísta, casi hasta me grito solo porque me bloquee y no supe responderle cuando me intentaba "ayudar a resolver". Yo solo m cuestionaba por qué eran así conmigo si yo siempre tuve la disposición de enseñar lo poco que sabía a los demás; sin embargo, no siempre te devuelven lo que das. Ese día me botaron del salón, estaba muy decepcionada tanto de mí como de mi ilusión por Julián.

Por otro lado, no sabía que debido a ello me iba adeterminar aprender trigonometría a toda costa. Esemismo día, en el almuerzo, pensé en cómo resolver mi problema de "trigo". Asíque mire a todas partes y ahí estaba mi respuesta. Lo vi a él, era un chico muyblanco, robusto no tanto, no era muy alto, usaba lentes y era ruloso; aun asílo que mas importaba era que el parecía ser un chico de muchos conocimientos. En eseinstante recordé que lo había visto antes, en las primeras filas cuando ingresepor primera vez a la academia. También, recordé que era ese chico querecurrentemente preguntaba a los maestro en tono de afirmación. En pocaspalabras, era el chico ideal para que me enseñe trigonometría. ¿Pero cómo lolograría? Se notaba que no tenía muchos amigos, se sentaba solo para comer.Tenía mucha rabia porque me sacaron del salón así que no me importo nada y fuidirecto donde estaba el y me senté y no recuerdo bien que le dije... ya lorecordé le hice una pregunta: ¿sabes trigonometría? A lo que respondióafirmativamente. Entonces todo fluyo, le di mi nombre y él me dijo que sellamaba...

Curiosidades de una vidaWhere stories live. Discover now