XVI

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Ya había pasado toda una semana sin ver a JiMin, y joder lo extrañaba micho,  ya quería verlo de nuevo, y hoy pasaría

Jk: Por donde empezamos

Acomode mi cama, doble mis colchas, me bañe, me cepille los dientes, me aliste, tome las llaves de mi coche y fue directo a la ahora casa de JiMin

Llegue y sentí mi corazón romperse, JiMin y Tae besándose, si eso besándose

Después vi como Tae entraba a la casa y JiMin salía hacia la calle no sin antes dejar cerrado, me baje rápido de mi coche

Jk: ¿Es encerio? ¿Tan rápido me olvidaste?

Lo tome por sorpresa pues el dio un pequeño salto, al darse cuenta de que era yo me miró con mala cara parecía no importarle

Jm: Eso a ti no te importa

Jk: Ah entonces cuando me decías que me amabas era mentira ¿no?, hay algo en lo que nunca te mentí y sabes que es

El negó sonriendo burló, como me enojaba ese gesto de inferior que hizo

Jk: Te amo

Jm: Por favor no mientas

¿Es encerio? ¿Aún cree que estoy jugando? >> Obvio genio, después de todo lo que le hiciste << callate nadie te pidio tu opinion, seguimos ¿con que estábamos? Así es verdad ya lo recordé. Yo creo que el quiere que en este momento yo le deje en claro que el es mio

Lo cargue en mi hombro y lo subí al carro, le puse seguro a todas las puertas para que no pudiera escapar

Jm: ¿A donde me llevas? Déjame ir

A pesar de que se fue quejando todo el camino eso no me impidió que llegara a mi casa y lo bajará de ese carro como un costal de papas sólo que este pataleaba mucho

Jm: ¿Sabias que me estas secuestrando?

Lo seguí cargando hasta llegar a mi cuarto, no me interesaba

Jk: No me importa si voy a la cárcel, al menos iré por haber secuestrado a este hermoso ángel

Sus mejillas se volvieron rojas, extrañaba volver a ver sus cachetitos rojos, extrañaba tenerlo cerca y poder oler su delicioso perfume y cuando me abrazaba este quedará en mi ropa

Jm: Estúpido déjame ir

Lo acosté en mi cama tomandolo de las muñecas, volví a admirarlo, todo de el era tan perfecto

Me subí apretandolo contra mi cuerpo, y el estaba demasiado sonrojado y nervioso

Jk: Te amo

Me metí entre su cuello y hombro para oler su piel que despredia un delicioso olor

Jm: No te creo

Jk: No me creas, no me importa, dios sabe que no estoy mintiendo

Guíe mi mano cuidadosamente hasta abajo de su playera, tocando todo a mi paso, debía ser cuidadoso

Jm: Ah~ están frías~

Sus jadeos no podían ser más incitadores, el es mio como es que no lo comprendía aún

Jk: Te amo

Alce su playera para guiar mi boca a uno de sus botones rosados, chupe, jale e incluso los mordí sentía como le daban arcadas

Jm: Detente~

Yo ya no podía detenerme, a esto no se le puede llamar violación si el esta gimiendo de esa forma

Dulce VenganzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora