Una Historia Mas {Aristemo} ||Completa||

Capitulo II

Temo acababa de despertar después de que se quedó dormido al llegar al castillo.

Se levanto con toda la flojera del mundo es sus pies, aún no asimilaba la noticia que le dió su padre pero tenía que hacerlo por el bienestar del reino que algún día sería de el.

"Temo ya sal a desayunar!!! Mi Papancho no quiere que empezemos sin ti!! Y tengo hambre!!!" Grito julio tras la puerta, mientras tocaba su barriga en señal de hambre y desespero.

"Ya voy" temo salió de su cuarto y camino a la mesa junto con julio para desayunar.

"Buenos días su majestades" saludo una mujer con rizos muy bonitos, de piel blanca "Mi nombre es Amapola y soy la nueva empleada" Pancho sonrió y se paró de la mesa para extenderle su mano y saludarla

"Dígame Pancho, aquí no hay que su majestad, así que no se preocupe amapola y bien venida" Polita sonrió y acepto su mano ahora si que lo que decían en el otro reino era verdad, Pancho era un hombre muy humilde y cordial.

"Solo llámeme Polita" la mujer se dió vuelta y camino en dirección a la cocina.

•🖤•

"Sabes hijo, lo que decían del rey Francisco López era verdad, el es un rey que no le importa su posición social" Polita sonrió mientras le daba un sorbo a su tasa de café.

"Sí Ma', ves yo te dije que si veníamos aqui todo sería mejor" Ari tenía a su hermanito sentado en sus piernas mientras le daba de comer.

"Si quieres yo termino de darle de comer a tu hermano, tu ve a darte una vuelta por allí" Ari asintió y salió de la cocina.

Llegó a una parte trasera del castillo donde había un jardín muy lindo con distintas flores.

Camino lento observando cada pequeño insecto o flor que miraba. En el castillo donde trabajaba antes, no lo dejaban andar por el castillo a menos que alguno de sus superiores se lo autorizara.

Se agachó para poder oler una de las flores que allí había, cerró los ojos disfrutando del aroma cuando sintió una mano en su hombro, rápido se dió la vuelta para ver de quién se trataba, encontrándose con nada más y nada menos que Temo.

"Que haces?" Pregunto mirando la flor que Ari olía "S-solo miraba, es que en el castillo de el rey Germán no me dejaban andar por allí a menos que tuviera autorización"

"Los trataban Mal?" Pregunto "Am pues si, algo así" Ari levantó un poco su camisa para dejar a la vista una sicatriz en su abdomen "Esto me lo hizo uno de los guardias del otro castillo" Temo abrió sus ojos como platos al escuchar eso.

"Pero porque hicieron eso ¿Porque te golpearon?" Ari sonrió al recordarlo y no se arrepiente de haber echo lo que hizo ese día "Intente protejer a mi mamá, cuando mi hermano nació, trataron de llevárselo a un orfanato por qué no querían más gente en el castillo y yo lo impedí"

"Dicen que en ese lugar todo es horrible, ahora veo que si" temo bajo un poco la vista "Quieres ver un lugar donde la magia existe?" Ari lo miro con algo de sorpresa por la repentina propuesta "Temo pero eso no existe, la magia no es real" dijo muy seguro

"Entonces ven y si luego de esto aún no crees en la magia pues te doy lo que tú quieras" temo camino y Ari asintió y comenzó a seguirlo.

Después de caminar por el jardín Temo saco su anillo y lo incrustó en una pared, le dió vuelta como si fuera una llave y la pared se removió haciendo aparecer una puerta de madera.

Aristoteles intentaba convencer a su mente de que eso que había visto sólo era un mecanismo oculto.

"Ahora ven" Temo abrió la puerta y un camino de antorchas los llevaba a unas escaleras que bajaban a quien sabe dónde.

Al final de las escaleras había muchas plantas, Temo chiflo como lo había enseñado su Papancho y un montón de Adas llegaron volando.

"Haa!!!" Grito Ari al ver la pequeña personita volando al rededor de el "Descuida no te hará nada" Ari se relajo un poco mss "Esto.......no me lo esperaba" puso su dedo sobre una hoja y esta de inmediato saco un sonido de música

"Ese arbusto hace música a si tocas sus hojas" los ojos de Ari se abrieron de par en par comenzó a tocar todas las hojitas del arbusto.

Temo lo miraba con alegría y dulzura.

[....]

"Es increíble como si fuera otro mundo, pero no me has dicho que es este lugar" Aristoteles sostenía a un pequeñito gato Montez con colita de zorro.

"Es un lugar que ha existido en mi familia desde hace muchos años, uno de mis tatarabuelos lo construyó, para tener un lugar tranquilo donde el tiempo no exista y lo sé suena muy tonto y cursi pero así es" temo miro a Aristoteles y este sonrió.

"El tiempo no existe aquí?" Temo negó con la cabeza "Nop seguro afuera solo han pasado como 5 minutos de que nos fuimos".

"No crees que ya es momento de regresar?" Pregunto Aristoteles "Si tienes razón".

Ambos salieron del otro mundo como le dijo Aristoteles.

"Y bien, ahora ya crees en la magia?" Temo alzó una ceja esperando una respuesta "Mmm tal vez"

"Gracias, Ari" dijo temo mientras sonreía

"Porque? Yo no hize nada" la verdad es que si hizo mucho. Temo nunca se divertía en el castillo y sus hermanos siempre juegan en casa de los Oppas.

"Es que, yo nunca he tenido un amigo" Ari entendió a lo que temo se refería "Entonces es un gusto ser tu amigo Cuahutémoc López"

"Ari" Polita se acercó a su hijo "Ari ven ya tenemos un trabajo para ti" amapola miro a el chico junto a su hijo "Hoy hola Cuahutémoc" dijo con amabilidad

"Solo llámeme Temo" Ari los miro y se apresuró a decir "Mamá el es mi amigo Temo, Temo ella es mi mamá y bueno ya me tengo que ir porque el deber me llama pero te prometo que yo también te voy a enseñar algo increíble ok?"

Amapola y Aristoteles se fueron a la cocina donde Ari tenia cosas que hacer.

Temo regreso adentro donde se encuentro con su Papancho

"Temo nececito hablar contigo" temo asintió y camino asta su papá "Que sucede Papancho?" Pancho lo miro con tristeza, no quería que su hijo se casará por obligación y mucho menos con alguien a quien no ama "Mira en una semana tenemos que ir al reino de Germán para que se arreglen las cosas para la boda y que conozcas a su hija Yolotl" temo asintió con tristeza y lo miro a los ojos.

Cuando está con Ari hace que se olviden las cosas malas y está era una de esas cosas malas "Si Papancho no hay problema" dijo Temo regresando a su habitación.

Pancho sabía que aunque su hijo intentaba hacerse el fuerte, le dolía esa situación y no podía negar que se le partía el alma ver cómo los ojos de su hijo se cristalizaban.

Atte: Queen