ESTO NO ES UN SOPE〔4〕

PORTADA

    La portada me llevó unas horas. Tuve que hacerlo solo, por razones obvias. Creo que es mi mejor trabajo hasta el momento.

    Aunque no ea mejor que la de Agust D, mi primer mixtape. Igual esto me hace sentir completamente realizado.

    Me debato por un momento si es una buena lección, después de unos segundos leyendo otros comentarios, acabé cediendo en su totalidad a mi estúpida idea.

    Porque es estúpida... Pero algo en mi interior me dice que me gustaría ser el mejor hasta en una historia corta.

    Billboard and Grammy, who?

    Mihane, Wattpad. 

    Estiro mis brazos, haciendo sonar mi espalda después de estar luchando con el editor. Todo está listo, solo tengo que pensar en quién sería el «afortunado» en la historia, por lo que me levanto, y voy a indagar en lo que hacen los chicos de una manera silenciosa.
    Ahora mismo, parezco como Big Hit haciendo audiciones globales.

    El primero que avisto fue a mi líder Kim Nam Joon. Es un buen protagonista, su sabiduría podría inspirarme en los capítulos, además, en su etapa de joven inseguro explotaría temas interesantes que funcionarían para un mensaje fuerte y simple.

     Sonrío al escucharle rapear, él se transforma y se convierte en un modelo a seguir, hasta que se vuelve torpe en segundos con su propio teléfono. Me recuerda a esos personajes Mary Sue que tanto detesto. Sin embargo, amo el defecto de Nam Joon porque lo hacen único, incluso para reírse es lindo. 

    No, next.

    En la cocina veo a Jin cocinando, corta poseído por el espíritu de Master Chef. Se ríe solo de sus propios chistes de abuelo.

     —¿Eres celoso? No, soy el payaso.

      Otra nueva risa al hacer énfasis en aquello. Abro mi boca, estupefacto, a veces si me causan gracia, no lo voy a negar. Esta vez, tiene una actitud de lo más excéntrica.

    Muerdo mi labio. El problema de Jin, es que nunca dejara de hablar de su hermosura cuando existe la oportunidad de hablar de eso. O en cualquier conversación.

     «Soy Mr. Wordwilde Handsome».

    Jin suena como Pitbull en ocasiones con esa marca registrada de: Mister Worldwide.

    —I know you want me —canto bajito para probar mi punto.

    —Ai knou yiu guant ya! Uno, dos, tre, vamo'! —responde en un extraño acento.

    Lo que dije. ¿Ven?

    Tampoco pasa la prueba. Ji Min está descartado, así que iré a averiguar sobre Tae Hyung y Jung Kook.

    —Hey, Suga.

    Es V, masca chicle como un pandillero y lleva sus manos en los bolsillos.

    —Escuché de Jung Kook que estás escribiendo.

    Maldito soplón.

   —Ajá.

   —¿Es un nuevo cypher, verdad? Quiero que me incluyan, porfa. No seas malito.

    Puede ser tan versátil que me abruma. Es bueno actuando.

    Su puchero me desarma, arrugo el ceño al recuperar la compostura:
    —Habla con mi representante.

   —¿Qué? ¡¿Tengo qué hablar con Nam Joon-ah, o con Bang PD?! ¡OYE! ¡No te vayas!

   Tras dirigirme a mi estudio, encuentro a Jung Kook saliendo de ahí, lo atrapo de la solapa de su amplia camiseta.

   —¿Qué hacías allí dentro?

   —Nada —respondie nervioso.

    —Dime —insisto, soltándolo rápido.

    —Nada... Te quiero, hyung.

    —Yo no —espeto entre risas, claro que lo quiero pero no voy a ser cursi hasta que me diga que hizo: —¿Lo has visto, no?

    —¿El qué? —contesta con su gran sonrisa de travieso.

     Palmeo su mejilla como mafioso:
     —Muy bien, así se habla. Pero no tendrás el protagónico por chusma.

    —¡Aaaaah! —Intenta hacerme cosquillas, aunque me hace reír vuelvo a la seriedad—. Perdón, hyung, ya no le molesto...

    Pero el jodido no hace eso, solo estira mis mejillas, apretujándolas sin hartarse.

   —¡Ya vete! ¡Ah!

   Corre y brinca como venado en peligro. Uf. Entonces me di cuenta que no queda nadie más. Nadie excepto... él. Estoy media hora meditándolo, doy vueltas en mi silla giratoria. Me pone nervioso la idea pero me agrada hasta al pensarlo en voz alta.

     —Sope, uhm.
  
    Nosotros hasta hemos escogido nuestro color. ¿Ven lo qué sucede cuando un ship es bien hecho por nosotros mismos?

    Y NO LO RESPETAN.

   ¿Acaso el yoonmin tiene un color? No. Y no quiero que vengan con el verso de que Tony Montana es el himno del Yoonmin. Las vocales de Ji Min son las de un ángel pero ahí tiene la voz de camionero. Fin del comunicado. Pero el rap de Ho Seok es... ¿entienden?
  
    Ya van a entender. Un ejemplo didáctico: Ponganse al Sol e intenten mirarlo: ¿Qué sucede? Pues se quedan ciegas. Eso sucede con Ho Seok. Fin del comunicado, parte dos.