Capítulo 31: parada en el pueblo de la eterna navidad

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Una vez vimos que el tren se detuvo por completo tome mis cosas, pero entonces una de las muchas cosas que me dijo shina volvió a mi cabeza, "debes tener el libro junto a ti en todo momento, por si llegas a encontrar al humano faltante", y eso hice, saque el libro de mi maleta y lo puse en la bolsa que nos habían dado en el pokegremio de hoja verde, me colgué la bolsa y tome mis maletas, salimos del camarote, myc, rouge, toby y yo, caminamos por el largo pasillo del vagón hasta llegar a la puerta más cercana de este, la cruzamos y lo primero que sentimos fue el viento frio de la montaña impactando en nuestro rostro y algunos copos de nueve que caían del cielo, sentía como myc se pegaba más a mí, ella al ser un pokemon tipo fuego era obvio que este frio no le caía nada bien, asi que abrace a myc contra mí para poder generar algo de calor para ella.

Una vez bajaron todos shina nos dio la orden de que la siguiéramos, el pueblo era un lugar frio y con mucho viento, pero lleno de vida, de felicidad, había pequeños niños corriendo de un lado al otro, los pokemon que en su mayoría eran de tipo hielo viviendo en sus casas y trabajando en sus negocios, las casas hechas de madera con nieve acumulada en sus techos, el pueblo parecía estar estancado en la navidad eternamente debido al ánimo y generosidad de los pokemon que lo habitaban, por un momento myc se olvidó de aquella sensación de frio y se dejó atrapar por aquel aura de calma y felicidad que emanaba el pueblo.

Caminamos tras de shina hasta que nos detuvimos en una posada, entramos a esta y lo primero que notamos fue la sensación de calor en el lugar, pero para myc seguía haciendo algo de frio, la posada por la parte de la planta baja era un lugar de comida, había algunos pokemon comiendo, shina se acercó a la barra del mini bar de este y el que la atendía era un infernape, un al ver a shina una pequeña sonrisa se dibujó en su rostro, este se acercó hacia ella y los dos se saludaron como dos viejos amigos que no se veían en un buen rato.

-pero mira a quien tenemos aquí, Shina la lucario- dijo la voz femenina de la infernape quien se le notaba feliz

-también me alegro de verte Gynna- respondió shina de forma tranquila pero igual feliz

-bueno y dime, ¿Qué te trae a las frías pero hermosas montañas Beorh?-dijo ella

-asuntos del pokegremio, pero no es nada de lo que tengas que preocuparte-dijo shina en el mismo tono de amabilidad

-bueno y en esos asuntos del pokegremio, en que puedo ayudarte-dijo ella

-quería ver si tenías lugar para nosotros doce-dijo shina, la infernape alzo un poco la vista y con una rápida y fugas mirada nos inspecciono a todos, luego volvió a posar su mirada en shina

-estas de suerte, tengo 6 habitaciones disponibles- dijo la infernape mientras dejaba seis llaves encima de la barra entonces shina puso una de sus patas sobre estas, pero en ese momento la mano de la infernape se puso sobre la de shina-¿y cómo piensas pagar?- dijo Gynna

-creo que ambas sabemos cómo- dijo shina en un tono algo pícaro, luego acerco un poco más su hocico hacia la nariz de la infernape y le dio un pequeño beso con su lengua a la nariz de Gynna, quien se sonrojo un poco, aparentemente eran más que amigas, me sorprendió un poco eso pero luego lo asimile la verdad ver parejas del mismo sexo era ya algo normal, pero algunos de nuestro grupo si quedaron algo sorprendidos.

-como siempre, dándole al clavo a la primera- dijo Gynna

-pues, para mi chica especial lo que sea- dijo shina quien acaricio un poco la cabeza de la infernape, esta froto su cabeza contra la pata de shina y se dieron mimos mutuamente durante un momento, luego shina tomo las llaves y nos hizo una seña para que la siguiéramos, entonces eso hicimos, pero antes de seguir shina se despidió de su amiga y esta hizo lo mismo.

Subimos las escaleras hasta llegar al piso de arriba que estaba el cual estaba lleno de puertas de habitaciones, las cuales cubrían el pasillo y al final de este había otra escalera, shina se detuvo frente a una de estas y le dio las cinco llaves a Dazzle, ella quedándose con una.

-si no les molesta, me gustaría tener una habitación solo para mí- dijo shina

Todos negaron con la cabeza dejando entender que shina quería algo de privacidad, asi que se la dimos, ella se despidió no sin antes decirnos que nos repartiéramos en las otras cinco habitaciones, fue entonces que ella metió su llave en la puerta con el número 24, giro la perilla entro a la habitación y cerró la puerta tras de si.

-y bien, ¿Cómo nos organizamos?- dijo Dazzle

-pues nosotros podríamos dormir en una habitación- dijo poko, mientras señalaba a, rick, reiner y Tarik.

-pero, ¿no será muy poco espacio para ustedes?-

-no, además mira, una de las habitaciones que nos dieron llave es la más grande, asi que no, no tendremos problemas-dijo Tarik, mientras tomaba la llave de aquella habitación

Se dirigió a esta con los demás siguiéndole por detrás, metió la llave y giro la perilla, abrió la puerta y entro y detrás de él poko, rick y reiner, quien cerró la puerta detrás de él, ahora en el pasillo, solo quedábamos, leon, karra, rouge, toby, Dazzle, Lawliet, Myc y yo, en el pasillo, fue entonces que nos reunimos en pares y Dazzle le dio una a cada par, quedándonos por parejas en las habitaciones, metí la llave en la perilla y la gire abrí la puerta y le cedí el paso a myc, pero justo cuando iba a entrar siento la garra de rouge que se posa sobre mi hombro, volteo y veo que ella me mira.

-si algo llega a pasar, no dudes en venir y tocar a mi puerta, o pegarle al muro con fuerza, yo vendré enseguida- dijo ella

-gracias, créeme que lo hare- dije, entonces ella me sonrió y se metió a la habitación de al lado

Luego yo entre a la mía y cerré la puerta detrás de mí, para cuando entre myc había encendido la pequeña chimenea que había ahí la cual iluminaba toda la habitación, un rectángulo de 2 metros de ancho por 6 de largo, era pequeño pero cómodo para los dos, vi que ella había dejado sus cosas en el piso y se recostó en la cama, donde se envolvió con todas las cobijas, pero aun temblaba un poco, hice lo mismo y deje mis cosas en el piso al igual que ella y me recosté a su lado, tapándome con las cobijas, me acerco lo mas que puedo a ella y la abrazo, siento como tiembla.

-estas bien myc-pregunte

-sí, solo que, no estoy acostumbrada a este frio-dijo ella quien aún temblaba

Paso mis brazos por encima y por debajo de ella y la abraso, siento como poco a poco su temblor va bajando.

-gracias, pero aun ciento frio- dijo ella, entonces me levanto, me quito la chamarra y se la doy, ella se la pone y se cubre con las cobijas y la abraso de nueva cuenta, su respiración y todo su cuerpo se habían relajado-ya estoy mejor, gracias- dice ella

Quien se da la vuelta para ver mi rostro, fruta su hocico con el mío y luego lo recarga en mi pecho, y se queda ahí hasta quedarse dormida, la miro, acaricio su cabeza un rato, levanto mi cabeza y veo por la ventana que había ahí, veo como los copos de nieve uno a uno se acumulan en esta, pienso y pienso un largo rato, hasta que quedo completamente dormido en aquella habitación abrasado con la persona que he amado más en toda mi vida.

Mundo Miterioso exploradores de lo desconosidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora