Cinco;

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Bueno, ese viernes se aseguró de levantarse en hora y huir de su madre con éxito. ¿El problema? Ahora se lamentaba haber ido. Tal vez debió hacer lo que ChanYeol le dijo. Dejarlo pasar y olvidar al pequeño chico de hoyuelos. Ya que si antes no tenía posibilidades por ser algo inseguro al hablarle al chico, ahora menos.

El pequeño con hoyuelos no iba solo ese viernes, y la sonrisa en su boca lo hacia brillar. Era una sonrisa deslumbrante, preciosa, dulce ah, podía pasar el resto del día buscando adjetivos diferentes para describir su sonrisa.

El chico que iba con él era alto y si, guapo. ¿Por qué negarlo? ¿Era un amigo? ¿Familiar? ¿Novio? Ojalá no fuera lo último. Eso lo destrozaria aún y así ni se dignara a hablarle, aunque de todos modos ya estaba sufriendo.

Suspiró mientras pensaba las posibilidades de morir por accidente o de preguntarle sutilmente al chico con hoyuelos, alias su enamorado, si ese otro tipo de cara sería era algo más, y de que si YiFan tenía una oportunidad o algo. Ciertamente sabía que ni un mísero "A" le diría, pero valía intentar pensar en los posibles escenarios y que en su mente todo se volviera un poco muy cursi. Estaba resignado a soñar.

Volteo a ver de nuevo a su enamorado y compañía, pudo haberse asustado de que el chico con cara de culo lo miraba fijamente. Alzó una de sus cejas viéndolo de modo retador. ¿Por qué le miraba así? Se sentía analizado, o algo así. Daba miedo, más cuando el chico no tenía ninguna expresión legible.

Parpadeo un par de veces, su expresión cambiando a una de toral sorpresa. ¿El chico le había sacado la lengua? No, por supuesto que no era eso. Tal vez solo sintió los labios resecos y se los humedecio de un modo no tan discreto. Seguro fue eso, no sería tan tonto de pensar que el tipo le hubiera echo algo tan infantil como sacarle la lengua.

YiFan desvío la mirada aún pensando en si lo que había pasado fue real o no. Tenía que comprobarlo una vez más. Giro de nuevo el rostro apoyando su cabeza en el vidrio, primero viendo a su enamorado, estaba tan bonito como todos los días, tarareando algún a canción que estaba escuchando mientras miraba por la ventana. Dirigió su mirada luego hacia el cara de póquer, este seguía mirandolo y una vez más le saco la lengua. Si, eso sin duda había sido lo que era. Frunció su ceño con claro disgusto. ¿Por qué diablos le estaba sacando la lengua?

Vio como se agachaba un poco para estar a la altura del oído del chico hoyuelos, le saco el auricular y luego murmuró algo. YiFan se giro alterado de inmediato para ver por la ventana, solo que no había calculado la distancia y que estaba más cerca de la ventana, por lo que el golpe de su cara con la ventana fue inevitable. El golpe de su rostro resonó en todo el jodido bus y el dolor en su nariz y frente fue masivo. No pudo no gemir de puro dolor. La señora a su lado enseguida se volteo a verle, preguntándole si estaba bien.

Joder. No, no estaba bien. Se había roto la nariz y posiblemente el cara de póquer le dijo a su novio o lo que fuera que le estaba viendo como un total acosador. ¡Eso era peor que hacer perdido el sentido del olfato! Diablos, dolía horrible su nariz y su frente. Podía sentir las lágrimas acumularse en el borde de sus ojos. No quería llorar pero un golpe tan fuerte como ese y en su nariz, que era una zona sensible era digno para lloriquear un poco y más aún cuando sintió algo tibio descender por uno de los orificios de su nariz. Oh no, estaba sangrando, eso no podía estar pasándole a él.

De su bolsillo saco rápido un par de pañuelos descartables que tenía, no tardando mucho tiempo para cubrirse la nariz y apretar. Evito mirar a la gente pues sabía que estaba siendo el centro de atención en ese momento. La vergüenza lo invadía a niveles inigualables. ¿Y si fingia convulcionar? ¿Un desmayo? Llamarían a la ambulancia y se lo llevarían... aunque eso solo significaría que estaría en un hospital y llamarían a su madre. No, no se arriesgaría a tanto. La humillación ya había sido echa.

Miro discretamente hacia el frente, el cara de póquer no dejaba de reírse silenciosamente, seguramente de su asaña mientras el chico de hoyuelos lo miraba.

<< Diablos. >> Pensó.

Lo estaba mirando, estaba notando su existencia y eso no era bueno para su salud mental en ese preciso momento.

Debía bajarse rápido de allí sino quería morir de más vergüenza. No importaba que esa no fuera su parada, de todos modos iba en ese bus solo por ese chico, pero daba igual. Podía ir a la casa de JunMyeon a que le ayude con su nariz y tal vez a que lo escuche llorar cuan niña por su fallido amorio. Esta vez no iría a lo de ChanYeol, el idiota le había prohibido la entrada a su casa a las nueve de la mañana o más temprano.

-SeHun. Deja de reírte. ¿No ves que se hizo daño?- Le riño YiXing dándole un golpe a su brazo.

SeHun debía dejar de reírse. Pero no podía. ¡Había sido gracioso! El alto con cara de modelo americano había sido un total tarado. Se dio cuenta que miraba mucho a su hyung, y que a él no lo veía con buenas expresiones. ¿Pensaría que eran algo más? Era seguro que el alto cara modelo americano estaba interesado en su hermano y no era la primera vez que iban en el mismo bus, de eso se dio cuenta con la mirada que descubrió que le daba, como si fuera inalcanzable ya.

SeHun sabía los gustos de su hermano, y si. Ese tipo era el prototipo de buen hombre para su hermano. Solo esperaba que no fuera un hijo de puta. Lo de tarado ya lo había comprobado en cuanto se dio el rostro contra la ventana. ¿Tan duro fue el golpe como para hacerle sangrar la nariz? Si así fue, entonces su frente tendría un chichón parecido al cuerno de un unicornio. Si era así, a su hermano le iba a gustar.

-Lo siento hyung.- Se obligó a calmarse. El quería seguir riéndose hasta que le doliese más el estómago.

-Me preguntó si estará bien. Fue un golpe fuerte.- Susurró su hermano con cierta preocupación girando a ver por la ventana opuesta, en busca del tipo guapo para asegúrese de que no se hubiera desmayado u algo.

-Estará bien. Si no rompió el vidrio con su nariz no es tan grave.- Se encogió de hombros.

-No te burles de su nariz. No estás en esa posición.- YiXing volvió a darle un golpe a su brazo. Si le doliese se quejaria, pero los golpes de su hyung eran como caricias.

-Ow. Lo defiendes y no sabes ni quien es.- Se burló.

YiXing puso sus ojos en blanco. No entendía el humor de su hermano. Al despertarlo le había gruñido como animal, hasta le insulto, pero ahora, se reía e incluso trataba de avergonzarlo. SeHun se quejaba de él ser rarito pero muchas veces no se veía a él mismo. Era un bipolar en potencia.

Cada viernes. {Kray} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora