Amor imposible |Lumiro

243 5 0
                                    

-¡Ramiro,basta! No podemos seguir así-dijo Luna separando sus labios de los de Ramiro.

-¿Vas a separarte de Matteo?-le pregunto seriamente Ramiro.

-No puedo hacerlo. Yo lo amo,Ramiro,entiendelo.-le respondio ella mintiendole y sintiendose culpable por lo que sentía por el mejor amigo de su novio.

-¿Lo amas?-rio secamente.-No me hagas reir,Luna. No estarías aca si eso fuera cierto. Ambos sabemos que no sientes por Balsano lo mismo que sientes por mi.

-Eso no es cierto-nego ella. Aún no quería aceptar lo que le estaba pasando con Ramiro.-Lo nuestro son solo besos y ya. No siento nada por ti,Ramiro.

"No siento nada por ti" esas palabras que siempre temio escuchar finalmente se las dijo la persona que Ramiro más amaba en el mundo y le dolió mucho escucharlo.

-¿Por que no lo aceptas?¿por que te da tanto miedo aceptar que sientes algo por mi?-No entendía porque ella se negaba a aceptar la realidad.

-No voy a seguir hablando de esto. Lo lamento,pero esto no puede seguir más-dijo Luna con los ojos cristalizados y luego salió de la habitación de Ramiro.

Luna sabía que Ramiro tenía razón,pero no podía hacerle eso a Matteo. No cuando él le había salvado la vida cuando cayo a la piscina con los patines puestos allá en Cancún. Elle le debía mucho y lo mejor que podía hacer era ser la mejor novia posible.

Hubo un tiempo en el cual creyo firmemente estar enamorada de Matteo,pero eso cambio cuando Juliana la puso como compañera de patín de Ramiro. Desde ese momento,se sintio muy confundida. Pero cuando se beso por primera vez con Ramiro,lo tuvo muy claro. Estaba enamorada de su compañero de patín,no de Matteo.

Ramiro también estaba enamorado de ella. Sabía que estaba mal,que era la novia de su mejor amigo,pero,¿que podía hacer? No había elegido enamorarse de Luna. Tanto él como Luna se sentían culpables al estar engañando asi a Matteo,pero no lo pudieron evitar. Sus sentimientos fueron más fuertes.

Sin embargo,ahora,Luna le había dado fin al asunto. Ambos volverían a sus vidas fuera de ese pequeño romance a escondidas que vivían. Él tuvo que soportar con mucho dolor ver a la chica que amaba reirse y besarse con su mejor amigo y Luna tuvo que resignarse con una relación sin amor mutuo y ver como Ramiro seguía su vida sin ella.

Esos días fueron dificiles para ambos,hasta que un día tuvieron su último encuentro. Luna arrastro a Ramiro hasta un lugar muy privado y allí le dio un intenso y muy apasionado beso.

-Crei que ya habíamos terminado con esto-dijo Ramiro muy sorprendido.

-Si,pero la otra vez no pudimos despedirnos como se debía y ademas quería contarte algo-dijo Luna.

Le conto que hace unos días Matteo le dijo que iría a vivir unos meses a su país natal,Italia,y la invito a irse con él.

-¿Y aceptaste?-le pregunto él muy entristecido.

-Si.-le respondió bajando un poco la mirada-.Tal vez con estr viaje pueda aprender a querer a Matteo como debería hacerlo y nos vendría bien a nosotros estar distanciados por un tiempo. Tal vez...

-¿Tal vez que?¿tal vez pueda olvidarte?-Ramiro se ofendio. Él no queria olvidarla ni que ella lo olvide-.No,Luna. Eso nunca pasara. Yo te amo y se que tu también me amas. Cuando un amor es tan fuerte y verdadero como el nuestro,no desaparece tan pronto.

-Pero tiene que hacerlo. No quiero lastimar a Matteo y se que tu tampoco quieres eso. Ramiro,yo te amo y quisiera que estuvieramos juntos para siempre pero lo nuestro...lo nuestro es imposible.

Ambos estaban llorando. Les dolia mucho separarse pero debían hacerlo. No tenían otra alternativa.

-Nunca voy a olvidarte,Luna Valente. Nunca sentire por nadie lo que siento por vos. Jamás habra otra chica en mi vida-dijo Ramiro mientras se secaba las lagrimas que corrían por su mejilla.

-No digas eso. Tu mereces ser amado por alguien que pueda estar contigo. Deberías darle una oportunidad a Yam...

Ramiro lo penso por un segundo. Yam era una buena amiga y si,se re notaba lo muy interesada que estaba por él. Sin embargo,él solo la veía como una hermana. Él solo tenía ojos para Luna.

-Repito,jamás habra otra chica en mi vida-repitió ignorando las palabras de Luna y nuevamente volvió a besar a la chica que amaba.

Se quedaron besandose varios minutos. Ninguno de los dos quería separarse del otro,pero era inevitable. Esa era,definitivamente,su último día juntos y solo querían disfrutarlo.




Soy Luna: Los one shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora