El chico de último año •Maylor•

5. Sin beso

Estaban en la bañera, Roger sobre Brian besándolo cuando escucharon que sus padres llegaron.
"¡Mierda! ¿Qué hacemos?" susurró con desesperación.
"No lo sé" May se quedó pensando. "Finge que tú estás tomando un baño, y que yo te espero en la habitación, no creo que entren a verificar si es cierto"
"Hola, chicos" escucharon decir a Winifred.
"Hola, mamá. Estoy tomando un baño"
"¿Dejaste a Brian sólo en tu cuarto?"
"Sí, pero ya voy"
"No te demores. Se va a aburrir"
"Está bien. Buenas noches"
"Buenas noches, hijo. Saluda a tu amigo"
"Lo haré"
Escucharon cómo subían las escaleras. Por suerte la habitación de sus padres estaba en el piso de arriba.
"Estuvo cerca" suspiró el ojiazul.
"¿Te imaginas si entraba?"
"Creo que nos matarían"
"No sé por cuál de todos los motivos: porque somos gays, porque somos novios que recién se conocen o porque estamos bañándonos juntos después de haber tenido sexo"
"Un poco de cada uno" se rió. "De todas formas, no lo cambiaría"
"Ni yo. ¿Cómo lo hice?"
"Bien, cariño. Me dolió un poco al principio, pero después me dejé llevar"
"Me alegro que te haya gustado"
"Oh, claro que sí. ¿Sabes por qué en un momento me excité más?"
"Emm..." May apartó la mirada. Por algún motivo lo incomodaba hablar del tema. "Es que..."
"Bri, cielo, no tienes porqué decirlo si no quieres. Sólo pregunté porque soy tonto y no tengo idea de estas cosas"
"No eres tonto por eso. Lo eres por otras muchas cosas" se burló.
"¿Ah si? Bueno, ahora te quedas solo y sin beso de buenas noches" dijo Roger haciéndose el ofendido saliendo del agua.
"Oye, era un chiste. No te enojes" Brian salió tras él.
"Shh, no hagas ruido" sentenció entrando en la habitación
"Pero no quiero que te enojes" susurró cerrando la puerta tras él.
"Te aguantas por llamarme tonto"
"Sabes que no eres tonto, mi amor"
"Sí, pero parece que tú no"
"Eso es mentira. Puedo ver que eres realmente inteligente. Y que detrás del chico solitario y lector se oculta una persona increíble llena de amor para dar y mucho talento"
"Por Dios, eres hermoso. ¿Todo eso lo dedujiste ahora?"
"Desde la primera vez que te vi el año pasado lo supuse, ahora lo confirmo"
"Me enamoraste en un segundo, ¿cómo pudiste?"
"Cuando encuentras a la persona indicada, no hace falta nada más que jugársela, ¿no crees?"
"Es un sentimiento muy bonito el que me haces sentir. Ojalá no se termine nunca"
"Pensemos en el ahora, que estamos juntos"
"Después de todo, sí voy a besarte" el ojiazul se le acercó considerablemente.
"No traje mi ropa"
"¿Qué?" el rubio quedó desconcertado ante el cambio de tema.
"Que mi ropa quedó en el baño, ya vengo"
Roger se quedó perplejo, pero no lo quería presionar, así que se fue a vestir.
"Maldita sea, Roger. Ya para de ser tan lindo y deja de hacerme esto" pensó Brian para sí, sintiendo ese molesto cosquilleo en el abdomen otra vez. "Y tú, estúpido cuerpo de adolescente, te odio"
Trató de distraerse, pensar en otra cosa: el colegio.
"Vamos, Brian. Deja de pensar en él"
Falló.
El hecho de estar en su baño no lo ayudaba.
"Dios, no puedo" dándose por vencido se decidió a volver con su novio, pero allí estaba, esperándolo tras la puerta.
"¿Hice algo mal?" preguntó el rubio con la cara más triste e inocente que tenía.
"No, tú no"
"Y tú tampoco"
"Sí, yo sí"
"¿Y qué se supone que hiciste?"
"Roger..."
"¿Qué te pasa, Brian?"
El rizado lo tomó de la mano para que entre en el baño y así cerrar la puerta. "Tengo un problema..."
"¿Estás bien?"
"Sí, pero..." se sentó sobre el retrete.
"Dim..." se interrumpió a sí mismo cuando por la toalla que aún cubría al mayor se notó su erección. "Ay, cariño" se sentó a horcajadas sobre él.
"Ro..." sus palabras fueron cortadas por un beso, suave, pero que demandaba mucho. Sus lenguas se chocaban en un juego, que cada vez se tornaba más caliente. Al mismo tiempo, entrelazaron sus manos para quedar más unidos.
"Debemos parar" sentenció May separándose, pero manteniendo sus frentes pegadas.
"No" el ojiazul lo besó de nuevo.
"Rog, de verdad"
"Bien, pero me la debes"
"Sí, cariño. Vamos a dormirnos, ¿quieres?"
"No, no quiero"
"¿Y qué quieres?"
"Que la noche sea eterna, y sólo de nosotros"
"Me gustaría estar siempre así"
"A mí igual. Por toda mi vida, hasta que seamos viejitos"
"Piensas muy a futuro"
"¿Tú no?"
"Sí, y me imagino a tu lado"
"Ay, mi amor"
"Aunque sea vamos a la cama, ¿si?"
"Bueno, tú vístete para evitar accidentes"
"¿Consideras un accidente a que tu mano escurridiza termine sobre mí?"
"Exactamente eso" Roger le rozó los labios con su dedo índice y se fue.
Brian se puso la ropa y regresó al cuarto.
Ambos se acostaron en la cama, de perfil, para quedar frente a frente.
"Tengo un poco de sueño" dijo el rizado bostezando.
"Entonces duérmete, cielo"
"¿No te molesta?"
"Claro que no"
"Ven aquí" May se colocó boca arriba para que su novio se acomode en su pecho.
"Se supone que yo te debo acariciar a tí para que te duermas" susurró Roger.
"El hecho de sentir que estás cerca y tocar tu sedoso cabello, me relaja"
"A mí me relajan los latidos suaves de tu corazón"
"Te quiero, ¿sabes?"
"Yo a tí"
Se besaron dulcemente y terminaron por quedarse dormidos.