La Sonrisa que cambió al mundo.

Capitulo I

"El inicio de una nueva etapa"

Londres, Inglaterra.

12 de Febrero, el sol apenas estaba saliendo, en una bella casa a las afueras de la ciudad de Londres. Una joven de aspecto dulce aún descansaba en su cómoda cama, cuando de pronto el reloj marcaba las 6:00 am y su alarma empezaba a sonar, se escuchaba la canción "Monochrome no Kiss" de Sid. Poco a poco la joven abría sus ojos y empezaba a buscar su celular para apagar la alarma, se levantó de su cama y se dirigió al baño para bañarse y alistarse para ir a estudiar. Seria su primer día de clases en la academia.

-¡Elle! -Gritaba su madre desde la cocina.-
-¡Ya esta listo el desayuno!

-Ya bajó Mamá! - Contestaba Elle mientras bajaba poco a poco las gradas, ya lista con su uniforme y mochila.-

-Mmmm! ¡Que delicioso aroma! -Decía Elle mientras se acercaba a la cocina para desayunar.- ¿Serán huevitos con tocino? -Preguntaba mientras abrazaba a su mamá y le daba un beso en la mejilla observabando que efectivamente su mamá hacía los huevitos que tanto le encantan. Que junto con un vaso de jugo de naranja hacían la mejor combinación de desayuno-.

Elle se sentó para desayunar en el comedor junto a su mamá mientras miraban las noticias en la televisión. A las dos les gustaba informarse de lo que pasaba en el mundo y en su país a primera hora.

-Mamá ¿Qué opinas del nuevo hallazgo que encontraron en la torre de Londres? -Preguntaba Elle observando a su madre.-
-Creo que es bastante interesante, sobretodo ahora que encontraron ese misterioso talismán. Hay un testigo que dice que en el lugar donde lo encontraron estaba una chica con ese mismo talismán y que de pronto desapareció. -Decía su madre mientras meneaba con la cucharita su café negro.-
-Me parece muy misterioso madre, creo que me daré una vuelta por ahí después de clases.
-¿No crees que es muy peligroso Elle? -decía su madre mirándola con preocupación-
-Tranquila mamá, no me pasara nada. Solo pasaré por ahí por curiosidad, te prometo que no tardaré y vendré temprano a casa.
-Espero que así sea Elle, debes tener mucho cuidado.
-Lo haré, mamá. Lo prometo, ahora debo irme se me hace tarde para mi primer día de clases en la academia. ¡Te amo! ¡Hasta luego! -Decía Elle mientras tomaba su mochila y lonchera y salía de su casa, tarareando una canción que le gusta mucho.-
Elle iba caminando un poco cerca de la torre de Londres, tenia muchas ganas de acercarse al lugar pero recordó que tenia que ir a sus clases sobretodo por ser el primer día y que podía ir después a ver nuevamente.

-Creo que todo lo que ha pasado últimamente es muy extraño, las misteriosas desapariciones, suicidios y lo más reciente un talismán. -se decía así misma Elle toda pensativa mientras caminaba por la calle Well , casi llegando a su academia.-

De pronto una chica de estatura media y cabello castaño, muy sonriente se le acercaba dándole un abrazo.
-¡Elle! ¡Que alegría verte de nuevo! -le decía su amiga Bler mientras la seguía abrazando-
-¡Bler! ¡Que genial que seremos compañeras en la preparatoria también! Sera nuestro primer año en la academia Lowood me siento emocionada y nerviosa a la vez. Me preguntó ¿Cómo serán los profesores de acá? -decía Elle con emoción y sonriéndose-
-De seguro deben ser geniales, estrictos o aburridos, aunque tratándose de la academia Lowood de seguro han de ser súper buenos, afortunadamente pasamos el examen y ahora estudiamos donde siempre soñamos estudiar la preparatoria. ¿No lo crees así Elle? -Decía su amiga mientras iba tomándose un poco de café que llevaba en su botella-
-Sí, tienes razón, he escuchado que es de las 5 mejores academias de toda Inglaterra. Así que es un privilegio que estemos ahí. Por cierto veo que sigues tomando café en la botella que te di hace 2 años.

-¡Claro! Significa mucho para mi, eres mi mejor amiga, como una hermana, y valoro mucho cada detalle que has tenido conmigo. Todo lo que me has ayudado, sin duda eres genial amiga.

-Sabes que estamos para apoyarnos y ayudarnos, ya llevamos más de 8 años que nos conocemos donde hemos pasado muchas locuras juntas.

-Y se vienen muchos años más sin duda, aunque tengo una duda amiga. -De pronto Bler se detuvo y se quedo parada viendo a Elle-.

-¿Qué duda? -Decía Elle extrañada y sorprendida a la vez-

-Es sobre que... bueno pues, te muestras alegre y amable pero no entiendo porque no dejas ver tu sonrisa. ¿Hay algo que no me has contado?

Elle de pronto se quedó helada, no sabia que decirle a su mejor amiga, le había contado tantas cosas, sin embargo jamás le dijo la razón por la cual dejo de sonreír con un brillo en la mirada. Mirando el cielo ella le dijo:
-No se Bler, pero de momento ya es tarde para las clases. ¡Vamos!

No había terminado de haber dicho la última palabra cuando salió corriendo y detrás de ella Bler la seguía, tratando de llevarle el paso ya que Elle corría muy rápido. Ella sabia que algo le pasaba a su amiga ya que cada vez que se ponía a correr de repente era porque algo le preocupaba.