La Sonrisa que cambió al mundo.

Capitulo VII

"Giros del destino."

Ellen se habia levantado un poco confundida, habia tenido un sueño muy extraño. Fue al baño y se lavó primero la cara, luego cuando cepillaba su cabello, tuvo una visión donde se vio a ella junto a otra joven de cabello rosa. Estaban cerca de una playa donde la arena brillaba cada vez que era tocada por las olas del mar. De repente sintió un mareo, seguido de un dolor en una parte de la cabeza, como una punzada y se sentó un momento. Sabia que algo pasaba y no podía evadirlo. Su corazón le decia que era algo importante y que tarde o temprano, tenía que encontrar pronto una solución y aclarar sus dudas. Después se fue a bañar y cambiarse para ir a estudiar, tomo su desayuno, se despidió de su madre y se fue caminando rumbo a la academia. Iba en la calle distraída pensando en la visión que tuvo cuando de repente escuchó la voz de alguien, una voz muy familiar.

- ¡Ellen! -gritaba una chica desde el otro lado de la calle Well.-
- ¿eh? ¿Quién me habla? -pregunta Ellen al momento que se detiene y voltea a ver por todos lados, hasta que ve a una chica de cabello azul, pálida y delgada que le hacia señas con las manos desde el otro lado de la calle.-
- Eres tú… Elise… hace tiempo que no supe de ti. -decia muy sorprendida, al momento que la peli azul se pasaba la calle.-
- ¡Elle! ¡Que alegría verte amiga! No te imaginas lo mucho que te extrañe. -mientras se le acerca y la abraza.-
- Yo también te extrañe, incluso Bler. -contestaba Elle abrazándola más.-
- Cierto ¿Dónde esta ella? -pregunta Elise viendo por todos lados.-
- Fue por una amiga que hicimos hace poco, se llama Agnes. Ya nos alcanzará junto con ella. -decia al momento que miraba al cielo.-
- Oh bueno, espero verla. ¿A dónde estudias?
- En la academia Lowood.
- Woww!! Dicen que es muy buena y de las mejores del país. -menciona Elise muy sorprendida, al instante que saca una barrita de chocolate y le da la mitad a Ellen.-
- ¡Muchas gracias linda! Aún recuerdas que amo el chocolate. Y pues claro la academia es de lo mejor.-decía al momento que empezaba a comerse la golosina.-
- ¡Claro que si! ¡Como olvidar tan importante detalle! Por cierto veo que sigues sin sonreír. Solo veo que medio haces una media sonrisa, pero lo haces con miedo. Sabes bien que puedes confiar en mi. Incluso se que puedes ver cosas que otros no ven. Bler no lo sabe ¿Verdad?.

Ellen se quedó un momento callada. No le gustaba hablar del tema, pero sabia que no podía evadirlo todo el tiempo. Así que luego de ver hacia el suelo por unos breves segundos. Miro a Elise y le dijo:

- Sinceramente… sigue sin saberlo, no creo que sea nada importante. En cuanto a que no sonrió, es solo algo que prefiero no decir. Porque aún sigo sin entender bien la razón, ni yo misma lo se con certeza. Pero cuando lo logré descifrar y cuando me sienta lista lo diré. Todo es confuso y lamentablemente mi abuela ya no esta. Porque se que ella sabia algo.
- Comprendo, y por tú mirada entiendo que no es fácil para ti hablar del tema así que lo mejor será cambiar de tema. Cuéntame ¿Has conocido algún chico? -decía Elise con una sonrisa traviesa.- 

En ese instante Ellen se puso muy sonrojada, sus mejillas se pusieron llenas de color como si hubiera usado rubor. Tartamudeando un poco le dijo a su amiga:
- Bueno… pues…emmm… sí… conocí a un chico. -decia al momento que miro hacia otro lado aún toda sonrojada.-
- Vaya, vaya así que hay un chico eh. Era de esperarse, eres muy hermosa y tienes una personalidad única. -comentaba Elise sonriéndose.- ¿Cómo se llama?
- Su nombre es Evan y es mi compañero de clases. Es muy tierno y amable.
- Interesante, me gustaria conocerlo para advertirle de lo bien que debe cuidarte a ti.
- Debes estar tranquila, él y yo de momentos solo somos amigos. No te negaré que me gusta pero no pienso dar un paso tan importante tan rápido. Acabo de conocerlo.
- Pero existen los casos de amor a primera vista. -argumenta Elise.-
- Has visto muchas películas y series de romance al parecer Eli. -le dice mientras se vuelve a sonrojar.-
- Puede ser, pero no puedes negar que es verdad y suele suceder. Uno no sabe donde ni como encontrara el amor. Solo llega y sabes que encontraste a ese ser especial cuando hacen clic al instante de verse por primera vez.
- Me sorprendes Eli. Siento como si estuvieras muy inspirada.
- Solo digo lo que pienso, es mi opinión, aunque me gustaria que me contarás más sobre Evan pero bueno cambiando de tema, amiga me gustaria que te pongas sentada en la banca que esta cerca. Te tomaré una foto para el recuerdo. Sabes que amo tomar fotos. -añadía mientras le señalaba a Ellen donde debe sentarse y sacaba una pequeña cámara color azul.-
- ¡Claro! Con gusto amiga, aún recuerdo cuando éramos niñas y te gustaba fotografiar en cualquier lado que íbamos y me ponías a que yo fuera tu modelo. -decía ella mientras se sentaba y se arreglaba un poco el cabello.-
- Eres bella Ellen, así que puedes ser modelo incluso de esas de Victoria’s Secrets.
- No exageres tampoco. -decía mientras hacia una media sonrisa.-
- Pero si es la verdad, tienes la capacidad. Bueno se te hace tarde para estudiar, así que debemos apurarnos, te daré mi nuevo número y me llamas cuando puedas y así vamos juntas un día a tomar café por la tarde.
- ¡Genial! – le dice Ellen mientras guarda el papelito que le da Elise en su mochila-.
Ellen comenzó a posar sentada en la banca de la calle Well, mientras su amiga le tomaba una foto. Sus hermosos ojos avellana combinaban a la perfección con su cabello castaño claro, su rostro en forma de corazón, parecía un ángel. A Elise siempre le agradaba la mirada de su amiga cada vez que le tomaba una foto. Sus ojos reflejaban un brillo único y especial . En ese instante pasaba cerca de ahí, una señora que iba muy arreglada aparentaba alrededor de unos 40 años de edad, que se detuvo enfrente de las chicas y quitándose los lentes que llevaba puestos se acercó a Ellen.
- Buenos días niñas, mi nombre es Kelly Bourt, directora de la revista “Apple Pink.” Pasaba por acá ya que mi auto se quedo y debía apresurarme para llegar a tiempo a la editorial. Las vi a ustedes y pues la chica de uniforme me llamó la atención, me encanta la manera como poso para la cámara, se nota que tiene gracia para modelar, cualquiera puede ser linda y tomarse una buena foto. Sin embargo no todas tienen la gracia de enamorar la cámara. Me encantaría tomarle una prueba ando buscando jóvenes como ella para una línea de ropa juvenil que hace poco diseño una de las diseñadoras de la empresa que esta asociada con nosotros. ¿Aceptas? -pregunta ella mientras mira a Ellen-. Si en dado caso te decides ir, aquí te dejó la dirección del lugar y una pequeña tarjeta para que le muestres al vigilante y luego a mi asistente para que te dejen entrar a mi oficina sin problemas. Bueno debo irme, un gusto niñas. ¡Nos vemos! -se despide dándole un beso en la mejilla a cada una, y luego seguía caminando-.

- Wowww!! Esto no me lo esperaba, es increíble. -decía con alegría Elise mientras miraba la tarjeta que le dejo la señora Kelly-.
Mucho menos yo, además esto no es para mi. Pronto iré de nuevo a mis clases de tiro con arco y con la academia no tengo tiempo.
-No digas eso Elle, esto es una gran oportunidad, eres inteligente y se que encontraras la manera de organizar bien tú tiempo. ¡Tú puedes!
-No te prometo nada, pero lo pensaré. Mientras tanto correré un poco , tengo que llegar a clases. ¡Nos vemos Eli! Prometo escribirte y así reunirnos pronto con Bler. ¡Te quiero! -decia Elle mientras poco a poco iba desapareciendo de su amiga al momento que corría-.
- Sin duda, nos veremos pronto Elle. En mi viaje descubrí algo que tiene que ver contigo y te lo diré en el momento adecuado.
-Se decia así misma Elise mientras miraba a su amiga alejarse.-

Bler estaba esperando a Ellen, en el jardín de la academia junto a Agnes. Cuando vieron que un hermoso Mercedes clase “B” del año de color negro, se estacionaba cerca de la entrada. Al momento se bajaba un joven alto, pelirrojo y muy guapo. Iba vestido a la moda y junto a él vieron que iba Adler. El joven que conocieron cuando fueron a la torre de Londres. Ambos chicos se acercaron a ellas.

- ¡Hola chicas! Que alegría verlas. -decía Adler mientras les ofrecía la mano en señal de saludo-. Les presentó a mi hermano Alec. Hace poco ha venido al país, se encontraba de viaje.
- ¡Un gusto chicas! -Añadía Alec mientras le daba un abrazo a cada una-. Mi hermano no me comentó que habían chicas tan guapas acá.
- Pero lo bueno es que ahora lo sabe. -respondió Bler sonrojada.-
- Es un gusto conocerte Alec, y nos alegra verte de nuevo Adler. A ver cuando vamos otra vez a un tour más en la torre de Londres. Recuerda que faltaron lugares que nos explicaras. O podemos ir a tomar el té o café. -agregaba Agnes sonriendo.-
- ¡Por supuesto! – exclamaba Adler-.
- Bueno niñas, nos vemos más tarde tenemos que ir donde el director y arreglar otro asunto. ¡Me alegro verlas!
- Esta bien Alec. ¡Cuídense mucho!

- ¡Agnes! No me esperaba que el guía de la torre tuviera un hermano, ambos son muy guapos. Ojala tengamos la oportunidad de conocerlos más. -decía Bler suspirando-.

- Si, me encantaría que fuéramos amigos. Se ven muy buena onda. Pero en fin, ya viste la hora ya es un poco tarde y Ellen aún no ha venido y eso es raro. Me preocupa.

- Tranquila, ha de estar bien. De seguro tuvo un retraso, aún faltan 15 minutos. No debe tardar en venir.

- Eso espero, además tengo entendido que ella ama la literatura y es de las primeras materias que vemos el día de hoy. No creo que quiera perderse la clase.

- Es verdad. -añadía Bler mirando hacia la entrada-. Aunque a lo lejos veo a alguien corriendo, debe ser ella. –

Ellen  venia corriendo, cuando se iba acercando a sus amigas, se detuvo y bajó su mochila. Agnes y Bler la miraban muy preocupadas.

- Te ves muy cansada Elle. ¿Qué paso? -preguntaba Bler, ofreciéndole una botella de agua-.
- ¡Gracias amiga!, necesitaba refrescarme. Me siento un poco agotada. -decía al momento que empezaba a tomar agua-.
Perdonen la demora, lo que pasa es que en el camino, me encontré con una vieja amiga y nos pusimos ha lar un poco luego ella como ama las fotografías. Me hizo que posara sentada en una banca de la calle y en eso una señora de la revista “Apple Pink” nos vio y se acerco a nosotras al parecer le agrado mi manera de posar y quiere hacerme una prueba.
- ¡Oh por dios! ¡Que genial Elle! Esa es una buena noticia, espero te animes a ir, se que tienes muchas cosas que hacer. Pero no debes desaprovechar esta oportunidad. Pero luego me cuentas los detalles, debemos entrar a clase. Ahora la maestra Mclaggen nos va explicar lo de la obra de teatro que haremos el próximo mes. Aunque me muero de curiosidad sobre a quien te encontraste.
- Pues esa vieja amiga, es Elise. ¿te acuerdas Bler?
- Por supuesto, nos llevábamos genial con ella, y claro a ella siempre le ha apasionado tomar fotos y también pintar cuadros. Así que fue ella, bueno espero le hayas pedido el número, luego de clases la iremos a ver.
- Espero podamos Bler. -decía Ellen, mientras empezaba a caminar para ir a clases-. Debemos apurarnos ya faltan 5 minutos. ¡Vamos!
- ¡Corramos! -respondía Agnes mientras empezaba a correr-.


- Se notan que son muy buenas amigas. -decía una joven mirando desde la ventana de su salón-.

- Sí, evidentemente lo son Sofía, y según lo que nos ha dicho Azura hasta el momento , debemos vigilar que ninguno de los seguidores de Hope se les acerque.

- Pero, no se como identificar a uno de ellos. -decía la chica con un gesto preocupado-.

- Ten presente que podemos ver el color del alma de las personas. Así sabremos quienes son, si miras un tono rojo resplandeciente en alguien es porque es un jukyo y por lo tanto leal a Hope. Ahora debemos sentarnos, la clase esta casi por empezar y se escucha que ellas están llegando al salón.