Kevin era un buen chico que estudiaba en la preparatoria, tenía la piel morena y cabello negro, usaba lentes, sus notas eran bastante buenas, aunque no tenía amigos todos lo admiraban como buena persona.
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Sus compañeros lo invitaron a un paseo por el oscuro y sombrío bosque, que no estaba tan lejos de su casa, Kevin asintió y fueron. Estuvieron hablando de tonterías, uno de sus compañeros dijo que contaran historias de terror.
-Vale, ¿Qué historia? —dijo Kevin.
—Tengo una bien copada, es la de Slender —responde su compañero.
—¿Y ese quién es?
—Apenas voy a contarla, se dice que vaga en los árboles, es un hombre alto, sin cara y con traje, de su espalda salen largos tentáculos como los de un pulpo, rapta a los niños, porque para él son el alimento perfecto, se los come y escupe los restos, los adultos y jóvenes son un estorbo para él así que los mata fácilmente, quién sabe cómo pero nunca ha habido rastro de ellos, él suele convertir a personas en sus aliados, provocando dolor de cabeza, sangrados nasales, malos sueños y problemas psicológicos, en fin ¿qué les pareció la historia?
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De dónde la sacaste? —dice un chico.
—Internet.
—Son puras tonterías y baboseadas, no existe, y nunca ha habido desapariciones —dice el chico con una voz burlona.
Se fueron de ahí y volvieron a sus casas, Kevin se fue solo a su casa nervioso mirando a los alrededores, se quedó pensativo sobre el tal Slender, y lo investigó en Internet. Se podía invocar, investigó algunas noticias de desapariciones y fotos, después de todo eso, tuvo un trauma, empezó a tener fobia al bosque, sus calificaciones bajaban a nueve y ocho, su madre intentaba consolarlo, pero Kevin sólo se iba a su habitación, él temía que Slender fuera a por él, le contó a su madre pero ella sólo se rió y dijo.
—No tienes que tener miedo de algo que no existe.
Kevin no podía olvidar las imágenes, la historia, se empezó a poner paranoico, sangraba de la nariz a diario, siempre se despertaba, diciendo que soñaba con niños desaparecidos, tuvo grandes problemas de depresión, su madre lo llevó a un neurólogo, y le dieron su medicamento, tomó el exceso de pastillas, empezaba a ver al hombre alto sin cara, su madre cada vez se preocupaba por él y le prohibió la computadora hasta olvidar ese hombre, pero pasaba cosas peores, encontraba notas en su cuarto con un extraño signo.
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Kevin se quedaba en su habitación, llegó a desesperarse y tomó el arma de su padre, su madre se había ido al trabajo y él se quedó en su casa esperando al hombre alto, hasta que lo escuchó, tomó una cámara y grabó todo, pero no había resultado del hombre alto, él sólo volteó y ahí estaba, parado, mirándolo, él cayó al suelo asustado, le gritó que se fuera pero no hacía el menor caso, le apuntó y disparó, pero no se moría entonces el hombre alto lo tomó de la cabeza, Kevin escuchó unas palabras.
—Tu nombre ya no es Kevin, serás nombrado Observer y trabajarás para mí, ahora tienes que despertar.
Kevin se desmayó y despertó en el bosque la mañana siguiente, él solo se miró en el reflejo de un estanque y ya no era el Kevin normal, sino era Observer, Slender le dio las mismas habilidades que él tiene, Observer mató a cada familiar y a sus compañeros de escuela, dejando lugares abandonados,y buscando víctimas para Slender.
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