8

2.3K 286 41
                                    

Tomé una foto nuestra que tenía en mi cuarto, me puse una sudadera tuya que habías dejado hace tiempo y escribí una carta dirigida hacía ti.

Lloré demasiado, pero cuando puse el punto final en la última frase, supe que no había vuelta atrás.

Me acosté en la cama e inhale fuertemente tu olor impregnado en la sudadera y abracé con fuerza sobre mi corazón, nuestra foto y la carta. Miré la máscara totalmente rota en el piso de mi habitación.

Suspiré y tome las pastillas azules que hace tiempo anhelaba. Se que no es la salida, pero ya no encuentro otra, ¿tu la ves?

Cierro mis ojos y recuerdo la primera vez que nos conocimos, la primera pelea, el primer beso y la primera cita. Mi mente me da un resumen rápido de todo lo que pasamos y yo después de mucho tiempo sonrío, pero en poco tiempo siento cada vez mi cuerpo más pesado.

Mi alma me agradece que por fin podamos descansar.

Mi mente me acaricia y me dice que solo me deje ir, que todo terminará pronto.

«Te amo»

Logré susurrar antes de caer profundamente dormido.

Me sumergí en un sueño donde estabas tú, me abrazabas y me decías cuanto me amabas. Te bese y se sintió tan real.

Mi corazón preguntó si le daba permiso de descansar. Y le dije que si.

El sueño soltó una luz blanca, muy calida y acogedora y yo me envolví completamente en ella.

Te cuidaré desde donde quiera que yo este.

Algún día te iré a visitar y esta vez sin una máscara, porque todavía te quiero.

Iselder || TinCanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora