Mi Novia. Una Ninfomana

Angelical?, mejor dicho Diabla

Era increíble la manera en como el sexo continuo y con una sola persona no la lograba satisfacer, son modalidades que empleaba y que no se controlaba, y lo más asombroso es la corta edad con la que contaba, llegue a un punto tal, que ya no quería estar más con ella, básicamente no quería seguir esa relación, así que busque la manera de terminarle.

Recuerdo un día en el cual habíamos quedado en ir al gimnasio, y me dijo que pasara buscando a su amiga, y que la esperara en mi casa que ella al rato iba, me dispuse a buscarla y llegué a mi casa junto con ella, pasamos nos sentamos en la sala y nos dispusimos a conversar un rato, de pronto me pregunta si podía prestarle el baño para refrescarse darse una ducha, yo con mucha amabilidad le dije que si, llevándola al mismo y buscándole una toalla, de tal manera me percate que ella en ningún momento cerró la puerta más no me faltó tiempo para entrar y decirle que solo iba a cepillarme, jaja, ambos sabemos que no era así, la curiosidad esta vez sí que no mató al gato, más bien lo excitó demasiado, tras abrir la cortina del baño, y al verla en la ducha, completamente desnuda, su tono de piel canela pasión intensa, sus grandes y bien formados senos con su aureola definida y esos ricos pezones a los que me dispuse a chupar en su debido momento, esa vagina tan proporcionada la cual se me hacia agua la boca, solo fue cuestión de segundos para que mi pene se endureciera y me quitara toda la ropa y me metiera a la ducha a poder tocarla como quería, y disponer de todo su cuerpo, la dirigí al inodoro en el cual me senté, y la coloque sobre mi, mientras ella solo me decía que no quería traicionar a su amiga, que no estaba bien lo que hacíamos, y mientras me lo decía ya la estaba penetandro de tal manera que ahora solo me pedía que se lo metiera completo. Del inodoro la cargué y mientras la tenía penetrada me la llevé a la sala y seguimos con la acción, fue rico poder hacerla mia en ese momento y disfrutar de esas sensaciones que me brindaba y hacerla sentir super mojada, al terminar nos dispusimos a cambiarnos, y a sentarnos como si nada hubiera pasado en la sala, al rato tocan la puerta, como ya sabía era mi novia que al llegar nos vio y ella se dio cuenta de lo que había pasado pero aún así no le importó.

Pero poco a poco fui buscando la manera de deshacer dicha relación hasta que me funcionó, nos dejamos y cada quien por su lado.

Al tiempo, me encontraba con unos amigos y quedamos en ir a la casa de uno, para hacer un almuerzo y compartir, ya saben entre panas, pues cosas del destino ella venía saliendo del colegio con su amiga, y pues uno de mis panas la invitó, y yo pues como si nada, para mí ya no era nada más.

Al llegar a la casa, nos dispusimos a sentarnos en la sala, ellas tomaron la iniciativa de cocinar y pues todo comenzó a tornarse un poco creativo, les pedimos a las dos que comenzarán a cocinar con menos ropa ya que la cocina atraía el calor, y pues ellas aceptaron, lo que pasó después es algo que no olvidaría nunca, ya que eso fue el principio de una gran orgía sin fin, era increíble ver cómo ambas se dejaban follar una y otra vez entres varios sin lograr satisfacer sus ganas, como nos las rotabamos una y la otra y cada vez querían más, como se ahogaban de hacer sexo oral una y otra vez sin descansar, y ser penetradas a la misma vez por sus dos orificios, me sentía en una película pornográfica, en un gan bang, esa rutina fue toda la semana durante unos meses, y cada vez eran ellas las que nos dejaban casi que en coma a nosotros, increíble pero cierto, jamás creí que una chica tan angelical, fuera toda una diabla oculta como me lo demostró.

Las apariencias engañan, que experiencia tan loca y fascinante a la vez.