CAPÍTULO 26: RECUPERAR LO PERDIDO

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CAPÍTULO 26: RECUPERAR LO PERDIDO

Sue y la pelirroja comenzaron a hacer la reanimación cardiorespiratoria a la joven, pero no respondía. Todos sus amigos lloraban. Lily se arrodilló a su lado y sujetó firmemente su mano. Después de unos minutos intentando reanimarlo, decidieron dejar de intentarlo. La morena comenzó a gritar y llorar. Apenas había podido disfrutar de su amor por la rubia. La visión de Sam se había cumplido.

En ese momento, Brittany decidió arriesgar. Si no lo hacía, Dani moría, por lo que no tenía nada que perder.

– Apartaros de ella. – Exigió la rubia. Todos obedecieron excepto Lily que no soltaba la mano de Dani. – Sé que suena raro después de que yo no confié en ti, pero necesito que confíes en mí...

La joven soltó a su novia sin saber cual era la intención de la más alta. La ojiazul abrió la camisa de la joven sin preocuparse por desabrochar los botones, que saltaron en todas direcciones. Puso sus manos en el pecho de Dani y soltó una descarga. Buscó el pulso en su amiga y no pasó nada. Volvió a intentarlo y en ese momento vieron como el pecho del joven cogía aire y lo soltaba. Todos estallaron en gritos y felicitaciones a la menor de las Pierce mientras Lily volvía a sujetar la mano de Dani. La chica recuperó la consciencia y vio su novia con los ojos llenos de lágrimas.

– ¿Qué ha pasado? – Quiso saber Dani. La otra dejó escapar una risa nerviosa cubierta de lágrimas. A lo lejos se escucharon unas sirenas, indicando que alguien venía en ayuda de los chicos.

– ¿Por qué no hiciste lo mismo con Kurt y Mr Schue? – Preguntó enfadada Quinn.

– Ellos tenían heridas graves. Habían perdido mucha sangre y no podía reanimarlos... Lo siento. – Dijo la ojiazul apenada. La ojiverde se abrazó a ella para consolarla. En el fondo entendía las razones, aunque eso no quita que le doliera lo sucedido. No debía olvidar que Kurt y la menor de las Pierce habían sido amigos y que ella estaría casi tan afectada por lo ocurrido como ella o Blaine.

Tres horas habían pasado desde que el ojiverde recuperara la consciencia. Los secuestradores habían sido detenidos por la policía. Todos los miembros de New Directions y el resto de niños presentes en el patio del McKinley habían declarado en la comisaría. Santana y Brittany habían comprado un ramo de flores y recorrían los pasillos del hospital en busca de la habitación de su amiga. La encontraron en la cama, acompañado de Lily.

– ¿Se puede? – Preguntó la morena mientras golpeaba la puerta con los nudillos de su mano.

– Claro, pasad... Me alegro de veros... Aunque creo que lo que debería hacer es darle las gracias a Brittany por salvarme la vida... – Dijo la enferma recibiendo el regalo.

– ¿Qué te ha dicho el médico? – Quiso saber la más alta.

– Que no saben nada. Nunca se habían encontrado con una chica sana a la que le había dado un ataque al corazón porque una niña la había tocado y que había sido reanimada por una joven que había emitido dos descargas en ella... No lo entiendo, si eso es algo que pasa todos los días... ¿Cómo puede ser que no hayan tratado a nadie con ésto? – Bromeó Dani.

– Veo que estás de buen humor... – Comentó Santana.

– No es consciente de que ha estado a punto de morir. – Protestó Lily.

– Esperemos que todo esté bien y tu salud no se vea afectada. – Añadió la ojiazul.

En ese momento entraron Holly y Sue. Ambas preguntaron por la salud de la joven que hizo el mismo comentario que les había dicho a sus amigas.

– Creo que merecéis una explicación de lo que ha pasado con vosotras. La policía nos ha dejado investigar con ellos el refugio de “la organización”. Hemos descubierto que sois su experimento. Tenéis una conexión que a nadie se le había ocurrido. Vuestras madres acudieron al mismo ginecólogo. A través de las pruebas que les hacían a las mujeres, introducían una sustancia química que ahora todos tenéis en vuestra sangre y es la que produce vuestro poder. Os habéis adaptado a ella hasta tal punto que vuestro cuerpo la produce por sí mismo. Las pastillas que os daban cuando os secuestraban o la inyección que os ponían era otro producto artificial que reaccionaba con esa sustancia, y que producía que ya no tuvierais poder hasta que vuestro cuerpo volvía a producirlo. Lo siento, pero no es reversible, tenéis que aprender a vivir con ello. – Sylvester habló.

– ¿Y qué pasará más adelante? ¿Habrá más niños con poderes? – Quiso saber Brittany.

– Han estado inyectando esa sustancia hasta ahora, por lo que hay niños con poderes que no han nacido todavía. Hemos avisado a todas las mujeres que han estado con ese ginecólogo. Tienen que saber que sus hijos pueden tener poderes. Además de que queremos hacer una asociación para ayudar a esos niños y a sus familias. No queremos que se repita el caso de Brittany. – Explicó Holliday.

– ¿Qué queréis decir con eso? – Se extrañó la latina.

– Que no quieren que pasen dos años hasta que un niño pueda controlar su poder, con el riesgo que eso conlleva para él y para su familia. – Añadió Pierce.

– ¿Qué pasará cuando nosotros tengamos hijos? – Preguntó Dani.

– No lo sabemos. Pueden ser muchos casos. Que no lo hereden, que sólo hereden uno, que lo hagan de los dos... No se sabrá hasta que alguno de vosotros tenga hijos. Los mayores tienen dieciocho años, por lo que creo que tendremos que esperar un poco todavía... En ningún caso se nos ha pasado por la cabeza el investigar... No sois cobayas humanas... ¿Vosotras no os quedaréis embarazadas, verdad? – Dijo Holliday. Todas rieron por la broma. Ahora ya no tenían ningún tipo de preocupación. No les iba a pasar nada. Los secuestradores estaban en la cárcel y con todos los cargos que tenían, lo más probable era que pasaran muchos años allí. Todos los niños habían vuelto con sus familias y se recuperarían. Brittany y Santana podían vivir su amor sin miedos. Dani ya podía confiar en Lily y ambas podían por fin tener una relación. La rubia además podía retomar sus sueños de estudiar derecho en Columbia para ser juez. Estaban preparadas para lo que les vendría porque estaban seguras que lo peor ya había pasado. No tenían que ocultarse más, no había motivos para temer. Ni por ellas ni por sus seres queridos. Les hubiera gustado que Kurt y Mr Schue hubieran podido pasar con ellos esos momentos, pero lo mejor que podían hacer por ellos era seguir con sus vidas y demostrarles que su sacrificio no fue en vano. Siempre estarían en sus corazones, pero ellas se esforzarían para que se sintieran orgullosos.

El Poder del Amor (Brittana girlxgirl)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora