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Imagina HOT Joel Pimentel

Apreté las piernas rogando porque nadie se diera cuenta de lo excitada que estaba. Mierda. El profesor me ponía tan caliente que me hacía mojar mis bragas como nadie lo había hecho en mis 18 años. Su voz tan oscura. Sus labios rojizos que piden a gritos ser probados. Y ese ''paquete'' que Dios le dio. Porque si bien no me equivoco, mi profesor de ciencias está bien dotado. El timbre sonó y todo alumno salió disparado como una jauría de leones en busca de carne fresca. Guardé mis libros lentamente, desabroché dos botones de mi playera dejando al descubierto más de lo debido, y subí mi falda. Caminé hacia el profesor Pimentel, él cuál se encontraba detrás de ese escritorio de madera color caoba y me incliné, haciendo que mis grandes pechos salieran de mi blusa inmediatamente.
Tu: Profesor Pimentel, no entendí muy bien sobre el aparato reproductor masculino. ¿Podría explicarme de nuevo?.-Pregunté con una voz sexual. Él se paró y cerró la puerta con llave. Me tomó fuertemente del brazo, me lanzó hacia la pared y me acorraló.
J: ¿Que pretende, señorita t/n?.-Preguntó muy cerca de mi oído.-Si su propósito es calentarme créeme que ya lo ha logrado.-Dicho eso frotó su gran y erecto miembro en mi estómago. Jadeé. Lo tomé por el cuello de su camisa a rayas y lo atraje hacia mí, acortando los pequeños centímetros que nos separaban. Ni una corriente de aire pasaba entre nosotros.
Tu: Pretendo más que eso, profesor Pimentel.-Murmuré sobre sus labios
J: No sabes cuánto me calienta que me llames de esa forma.-Susurró explorando mi espalda con sus duras manos.
Tu: Apuesto a que se calienta con todas, profesor Pimentel.-Quería provocarlo más.
J: No es así. Sólo con las niñas malas como tú.-Bajó la palma de su mano y me dio una fuerte nalgada. Chillé. Esas que siempre...-Dio otra nalgada.-Tratan de calentar.-Otra.- A sus profesores de ciencias.-Y entonces lo besé. Maldita sea, sus labios eran perfectos. Éste hombre transpiraba sexo por cualquier lugar que le vieras. Mordió mi labio inferior y pasé mi lengua por sus labios.

J: Me saliste una fierita.-Su mano izquierda vagó por mi abdomen, y al llegar a mi falda la introdujo dentro de ésta, mientras frotaba mi húmeda feminidad. Gruñó.-Estás jodidamente húmeda. Caliente, ardiente y húmeda para mí.-Gemí al sentir sus dedos introducirse en mí.
J: ¿No usas ropa interior?.-Susurró con voz acalorada.-Me quieres calentar.-Y era cierto. Todos los viernes no usaba ropa interior por la única y estúpida razón de que tenía clase con el profesor Pimentel.
Retiró su mano y lamió su dedo índice
*Narrador exterior*
J: Eres deliciosa.-T/n tembló y Joel la cargó por las nalgas. Haz conseguido tu objetivo.-Dijo Joel.-Te haré mía. Mía, mía y únicamente mía.-La recostó sobre el escritorio y bajó su faldita blanca que le llegaba por encima de los muslos. La lanzó hacia un lugar lejos de ellos y procedió a observar su mojada y palpitante feminidad. Él gruñó, y t/n se calentó aún más. Acercó su rostro hasta la parte íntima de t/n y hasta que sintió su respiración cerca entró en razón: Iba a tener sexo con su profesor de ciencias. Y de repente soltó un chillido. Joel lamía de arriba abajo su clítoris. Dios mío, no iba a aguantar antes de tener un orgasmo de Joel.
J: Eres perfecta.-Susurró aún con los labios en su clítoris. Dio un pequeño golpe en su vagina, provocando que t/n gritara de dolor. Joel se subió encima de ella y comenzó a besar sus labios. Se dio cuenta de que t/n tampoco traía sostén, debido a que sus pezones se remarcaban mucho contra la blusa negra de tirantes.
J: Eres una niña muy muy mala.- Susurró mientras rompía su blusa de tirantes y sus pechos salían al aire.
Tu: Joel...-Gimió t/n justo antes de que él tomara un pezón y lo hundiera en sus labios. Bajó su mano e introdujo de nuevo un dedo en ella, mientras mantenía el ritmo.
Tu: Profesor, otro.-Murmuró como pudo. Joel no metió uno más, sino 2, y ya eran 3 dedos que entraban y salían dentro de ella.
Tu: Profesor... Me corro...-Gritó desesperada ella. Arqueó la espalda, empujó las caderas y llegó al tan esperado orgasmo. Joel lamió todo y subió a sus labios.
J: Ya tuviste tu orgasmo. Ahora me toca a mí.-Dijo Joel gruñendo. Se quitó su camisa y dejó al descubierto su trabajado torso.Excitante. T/n lamió una parte de su clavícula. Joel gimió. Las manos de t/n exploraron su vientre, bajaron hasta el cierre de su pantalón y lo abrieron. El miembro de él salió disparado, ya que Joel tampoco traía ropa interior.
Tu: Joder. No me va a caber todo eso.-Murmuró t/n jadeante al ver el tamaño de ese grueso pene.
J: Pruébalo, chúpalo, mordisquéalo como si fuera una paleta.-Ordenó Joel. Ella se relamió los labios y se metió la mitad del pene en sus labios. Lo chupaba rítmicamente, mientras que con su mano lo frotaba. Los gemidos masculinos de Joel la estaban calentando más de lo debido, otra vez estaba mojada. Él no tardó en llegar al orgasmo, descargando todo el semen en la boca de ella. T/n lo tragó. Ese néctar que había querido probar desde que él había entrado al instituto.
J: Eres una salvaje.-Le susurró Joel.-Así me gustas, cachorrita.-T/n se sentó encima del escritorio y abrió las piernas, invitándolo a follarla ahora.
J: Aún no te haré mía.-Murmuró Joel sentándose en un banco frente a ella. T/n arqueó una ceja.
J: Tócate para mí.-T/n vacilante, posó su mano en su feminidad e introdujo un dedo. Lo movía lento. Joel la observaba con la mirada oscura, nublada de deseo.-Pellizca tus pezones y mete tus dedos más rápido.-Dijo de nuevo Joel. Ella lo obedeció y comenzó a aumentar el ritmo de su dedo. Su segundo orgasmo se acercaba.-Vamos... Córrete para mí.-JOEL... DIOS MIO, JOEL...-gritó t/n y al gemir su nombre, llegó su orgasmo. Aún sentía las ondas de placer vagar por su cuerpo cuando Joel la tomó bruscamente y se introdujo en ella de un fregazo. T/n gritó fuertemente. Las embestidas de Joel eran fuertes y rápidas. T/n cerraba los ojos, pero Joel le ordenaba que los abriera para que viera todo.
Tu: Eres un Dios.-Susurró t/n entre jadeos. Mordió su labio inferior y gimoteó. Joel ahora se encontraba acostado en el escritorio, mientras T/n daba saltos sobre su miembro erecto.
J: No pares nena.-Gemía él.-Justo así. Varios minutos después, Joel la tomó y comenzó a embestirla fuerte. Necesitaba llegar al orgasmo ya.JOEL. DIOS MIO. DUELE.-gritaba ella mientras arañaba su espalda. Joel acercó sus labios a la oreja de ella y comenzó a gemir cerca de ella. Córrete conmigo.-Le susurró él. Y con eso bastó para que t/n explotara en el orgasmo de su vida. Ambos cuerpos sudaban, y eso lo hacía más excitante. T/n se puso su falda blanca, luego tomó la playera interior de Joel y se la puso, ya que su blusita había sido desgarrada por él. Joel se acercó a ella y le succionó el cuello, dejándole una marca morada-rojiza.
J: Recuerda que eres mía. Mía y de nadie más.
Tu: Como usted diga, profesor Pimentel. FIN.
Espero que les haya gustado, si es así dejen algún comentario y si quieren mencionen a alguien para que también lo lea. 🔥🔥🔥🔥

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