La música de una banda famosa se reproducía por los parlantes del estadio. El bullicio de la gente era ensordecer, cientos de personas con vasos de plástico, trompetas, gorros, playeras y pintura en la cara con colores alusivos a su equipo favorito se reunían. Era noche de viernes y final de exámenes parciales, lo que era el equivalente a fiestas sin control y mucho alcohol por delante. El equipo festejaba en los vestidores, era el primer juego de la temporada y todos sabían que una buena racha los respaldaba.
-¡Muy bien equipo! Un buen fin de temporada nos espera; Liam excelentes movimientos pero por favor dile a Zayn que no traiga pancartas enormes, hay gente detrás de él - todo el equipo vitoreó mientras Liam solo negaba sonrojado por la actitud de su omega.
Miré el reloj de los probadores dándome cuenta que el juego se había alargado más de lo debido, mi hermoso bebé debe estar desesperado por saber dónde estoy. Corrí a las duchas y me preparé lo más rápido que pude.
Al salir me encontré con mis compañeros ya listos para festejar y una que otra porrista prendida de uno de sus brazos.
-Styles vi unos cuantos ojos sobre ti, tienes que esforzarte más si quieres que te ofrezcan un lugar - comentó mi entrenador, un beta con una carrera en él futbol que muchos de nosotros aspirábamos.
-Por supuesto, señor Calvin - dije con una sonrisa, tomándolo de los hombros - esta temporada será la que he esperado, no lo voy a defraudar.
El coach solo palmeó mi espalda gritándole al equipo que era hora de largarnos de ahí.
-Hey, Harry, iremos a festejar el triunfo del equipo ¿irás? - dijo Joe, un compañero de equipo cuando me vio salir del vestidor.
Liam, pasó corriendo a lado de mi y abrazó a su omega quien envolvió sus piernas en la cintura de su novio.
-Hoy no, chicos. Es viernes de lasaña - dije tomando mi maleta y caminando a la salida de los vestidores.
-Cierto, salúdame a Louis, dile que lo extrañamos en las gradas - me gritó Liam, con Zayn pegado a su cuello dándole besos.
-¡Si!, extrañamos a nuestro renacuajo favorito - gritó Zayn.
-Si, le diré pero no prometo nada - dije más para mí mismo.
Después de una despedida rápida y de evadir a las porristas, caminé a mi vieja camioneta dando un suspiro cuando escuche el griterío de la gente que festejaba nuestra victoria. Mi teléfono había sonado sin parar desde el momento en que salí del campo, estaba muy seguro de que eran invitaciones a fiestas y felicitaciones sobre mi desempeño, siempre era lo mismo cuando ganábamos algún partido, pero yo tenía cosas más importantes en mente.
"Estoy listo"
Sonreí y conduje por la ciudad camino a la escuela de Louis, sabía que hoy fue un día difícil para él ya que su mamá me envió un mensaje; también era el final de sus exámenes parciales y al conocer a mi novio, era seguro que tenia estrés más de lo que debería.
Cuando aparqué en el estacionamiento me di cuenta de que casi no quedaba nadie, por lo que me apresuré a entrar al edificio.
-Hey, Harry! Buen juego, Louis está esperando desde hace rato, vas tarde - dijo la recepcionista apenas me vio.
-Gracias, Mae - dije sonriéndole y conociendo el camino.
-Harry! - gritó y me giré con una ceja alzada - Lou no tuvo un buen día, alguien fue un poco rudo con él y lloró durante un tiempo.
Asentí con el ceño fruncido caminado más rápido hacia mi novio.
Al entrar al área de braille me di cuenta que solo quedaba mi omega sentado en el lugar, suspire y entre con cuidado.
-Bebé...
-Llegas tarde, Hazz - dijo suavemente mientras tocaba un libro.
-Lo sé, amor. Pero estoy seguro que aún no han cerrado tu restaurante favorito - dije esperanzado - de seguro aún hay lasaña y podemos ir a casa para acurrucarnos en el sofá.
Louis tragó con labios apretados y asintió mientras cerraba el libro.
-Ven, Harry - susurró, alzando una mano para que me acercara.
-¿Que sucede, amor? - dije besando su mano.
El bajo la mirada y su labio tembló un poco.
-¿Cómo va el entrene? - dijo con voz quebrada.
Fruncí el ceño y tomé su rostro que ya se manchaba con lágrimas.
-Muy bien, hoy fue el primer juego de la temporada, vamos arriba en las listas.
Sonrío tristemente y beso mi mejilla.
-Que bueno, te esfuerzas mucho, corazón.
-Tu igual mi amor, verás que este semestre ambos lo haremos bien y podremos entrar a la universidad que queremos.
Sollozo y se aferró al final de mi suéter.
-No creo que debamos planear ir juntos, Harry.
-¿Por qué dices eso? Lo hemos planeado desde antes... - susurré viendo como su llanto se intensificaba.
-Entorpezco tu vida, quiero lo mejor para ti y si eso representa no estar ahí...
-Louis ¿qué está pasando?
El respiró lentamente y tomo mi mano.
-Tu mamá vino hoy, dijo que te dieron la beca de futbol pero que la rechazaste porque nos emparejaremos al final del semestre.
Mi corazón de aceleró fuertemente porque no era algo que le pensaba contar a Louis, mi madre lo sabía porque el reclutador llego a mi casa de sorpresa.
-Lou...
-Fue en una buena universidad Harry, por no decir la mejor en todo el país, la que te abre muchas puertas para entrar a equipos profesionales y ¡la rechazaste por un ciego sin chiste!.
Endurecí la mandíbula.
-No hables así de ti mismo.
-Desde el accidente no hago otra cosa más que perjudicarte ¿por qué sigues conmigo?
-Porque te amo, porque supe que eras mi omega desde la primera vez que te vi - dije sin rodeos.
-¿Cómo puedes amar a alguien feo e insuficiente como yo?
-Claro que no Louis Tomlinson, eres el ser más hermoso que hay en el mundo, no me importa tu condición, no me importa que digan que estoy loco, te quiero y representas mi futuro.
-Harry...
-No, Louis. Mi madre casi se muere porque no acepte una beca, y no me importa ¿sabes porque? - él negó aún mirando al piso - porque no tienen el mejor programa de aprendizaje para personas ciegas; y si no pueden ofrecer algo que a mí me importa, más allá de un buen puesto en su equipo o instalaciones de lujo, sigue siendo una escuela común y corriente, no me haré mejor jugador por estar en ella, al contrario me volveré mejor alfa al estar contigo porque nos cuidaremos en uno al otro.
Besé su frente con cuidado, quitando las lágrimas que se esparcían por sus mejillas.
-Te amo demasiado, Harry - sollozó besándome lentamente.
-Infinitamente te amo, mi omega - susurré besando su cuello.
Tomé su mano y agarré su mochila para caminar fuera del edificio.
-Espero aún quede lasaña, se me antoja desde la mañana que estaba entrenando - dije abriendo la puerta del copiloto.
Louis rió suavemente.
-Parece que alguien ama los viernes de lasaña - dijo mientras esperaba a que le ponga el cinturón.
-No más que a ti - dije besando suavemente sus labios - aunque estas cerca de ser relevado por hoy.
Golpeó mi brazo, mientras encendía el auto.
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Espero les haya gustado, faltan dos extras más pero los subiré dependiendo de la aceptación que tenga la historia ya que casi nadie lee Larry jaja :(
