The 16th Assault

Capítulo II: "Los Vándalos".

CAPÍTULO II: LOS VÁNDALOS

No te nos vayas hijo de puta, ¡resiste!

Clément...maldita sea.

....

Dispararle a Valkyr fue una de las cosas más divertidas que había hecho en todo ese año, llámenme psicópata, pero tener la razón ante alguien que tiene la dicha de retarte a hacer cualquier acción, es muy satisfactorio, no me lo nieguen, sé que más de una vez le han cerrado la boca a un amigo con algún argumento y se han sentido en la cima del Everest. Pero bueno, en este caso creo que le callé su pequeña gran habla con una bala, pero estaría bien, en mis días de entrenamiento nos enseñaron como neutralizar a un enemigo sin provocarle ningún daño severo y un sangramiento tan lento que se podría salvar a menos que la ambulancia llegara en 1 hora.

Mientras corría, podía escuchar a algunos compañeros de Valkyr en el fondo tratando de ayudarle, otros gritaban por una ambulancia, pero sabía que el ladrón de bancos profesional estaría en excelentes condiciones, al menos en ese preciso instante.

La cafetería de la Calle Lindsley sería nuestro punto de encuentro, pero primero tenía que hacer una parada por casa, mi esposa me estaba esperando, y tenía que darle buenas noticias con respecto a un trabajo, ¿Cuál es la parte triste de esta historia?, que en esa pequeña y retorcida salida que tuve, no hice más que averiguar, y no me comprometí a buscar el oficio per sé.

"Cariño, ya llegué" – Dije en ese punto, aparentando otra vez como nada hubiera sucedido, ¿Es loco, no?, entrar a tu hogar tranquilamente, que tu esposa e hijos te reciban, y que tu persona recién esté llegando de dispararle a un hombre, pero bueno...él se lo buscó, ¿O no?

"¿Dónde estabas?" – Los niños se estaban preocupando.

"Nada cielo, solo estaba visitando a viejos amigos y toda la cosa, recuerda que tengo tiempo sin venir y bueno...siempre viene bien estar en contacto con las viejas raíces".

"No trajiste ni el cereal, ni el aceite" – Dijo Marlene en todo acusativo.

"Lo siento cielo, me distraje hablando y se me ha olvidado, si deseas luego de almorzar puedo ir con Khaleel a comprar las cosas".

"Está bien, tranquilo, estoy preparando el almuerzo, ven...necesito un ayudante de cocina guapo como tú".

"En lo de guapo estás bien, en lo de ayudante de cocina...una total falacia".

Mientras ayudaba a Marlene con la comida, un mensaje de texto llegó a mi celular.

"Eres bueno con las armas...veremos qué tan bueno eres a la hora de ir a la carga, V".

Bueno...me había dicho hijo de puta, pero al mismo tiempo me le gustó la rebeldía que mostré para poder dispararle, estaba ganando puntos, necesitaba entrar en el negocio.

"¿Todo en orden, cielo?" – Preguntó Marlene.

Si...no te preocupes amada mía, solo estoy hablando con el hombre que me introducirá a una nueva organización profesional de ladrones de bancos, del resto, excelente.

"Ehm...si cielo, todo está bien, tranquila, ¿Está listo el pollo?"

"Si, solo me falta ponerle unas especias y estará listo para comerse, si deseas anda y descansa un rato, luego sales con Khaleel".

"Si...iré a recostarme, no he estado durmiendo muy bien, eres firme testigo de ello".

La cama sintió el peso de mi cuerpo mientras me lanzaba sobre ella, miraba hacia la ventana y el ambiente estaba bastante cálido, una paz que no había sentido en un largo rato...aún me preguntaba por qué estaba haciendo esto, o mejor dicho...¿Por qué quería hacer esto?, los años de abusos, el maltrato que recibí, cada lágrima de impotencia por no ver a mi familia y cada gota de sangre por las heridas de batalla, fueron factores para la decisión que tomé, y que a día de hoy...no me arrepiento.