-Paso por ti en 15 minutos, te amo -dijo él del otro lado de la línea telefónica.
-Está bien –le contesté aguantando la risa de ver la cara de mi amiga.
-¿Qué pasa? -dijo ¿celoso? bueno, es él, no es algo raro escuchar su tono.
-Nada amor, 15 minutos, adiós -dije y colgué.
Al fin pude estallar a carcajadas al ver la cara de amiga sufriendo al no poder subir el cierre del vestido que acababa de comprar, su cara es tan cómica que guardaré este momento por el resto de mi vida.
-Mar -hablé riendo.
-¡Cher no te rías y ayúdame! en 20 minutos pasa Alan y no he podido meterme a este vestido, no puedo creer que vaya a desperdiciar mil pesos en esto que ni siquiera me queda, nunca había despilfarrado dinero en algo inservible.
-Ashton llega en 15 –contesté ayudándole- Si vas a entrar –ayudaba a subir el cierre.
-Ashton, Ashton, Ashton -dijo imitando mi voz, por fin subió el cierre-.
-Alan Alan Alan –mencioné imitando su voz.
-Gracias, ahora dime la verdad ¿me veo bien? -dijo 'modelando', algo típico de Sea.
-Si si -dije y me deje caer en su cama boca arriba.
-Cher -dijo imitando mi acción a mi lado.
-¿Mande? -pregunté aun acostada.
-No nada, ya se me olvido -dijo y reímos.
-Que olvidadiza, dime ¿cómo se apellida Alan?
-Hood, Alan Hood –contestó y dio un suspiro.
-Hay amiga, bien que unas cosas no se te pueden olvidar ¿de dónde es?
-Pues ... Lo he conocido de casi toda la vida.
-Qué bello -dije sinceramente.
-Sabeees .... -dijo Sea.
-¿Qué?
-Ashton es muy ... No sé cómo decirlo ¿Posesivo? ¿Celoso?
-Claro que no -dije viendo el techo.
-Cher ....
-Está bien, lo es pero solo un poco.-dije.
-¿Un poco? se ve ... Cuando alguien te gusta no ves los defectos -dijo Sea.
-Aja habla la que me enseño una foto de Alan y no se da cuenta de lo narizón. -dije divertida.
-Claro que no -dijo en su defensa.
-¡Claro que sí! -dije riendo.
-Hay si pues... Tengo una idea, te propongo algo.
-Hay Sea tú y tus propuestas raras, no sé qué esperar esta vez.
-Bueno es más bien una idea que te dejaría ser feliz -dijo
-¿Qué? -la verdad me dan miedo sus ideas.
-Debes de darle una lección a Ashton, no es normal que sea tan posesivo, te manda cada que él quiere.
-Sea ¿hablas enserio? ¡Estas recontra loca! –Dije- ¿De qué tipo de lección hablas? A veces sueles asustarme.
-No, no estoy loca, soy realista, debes de darle una lección, una lección que nunca olvide, que te deje ser quien eres, te deje tener más amigas, salir con nosotras, tener amigos, te deje vestir como quieres, peinarte, Cher tu bien sabes que Ashton es sobreprotector, posesivo celoso ni se diga pero dale una lección.
-Sea...- no me dejo terminar-
-¡Corta con él! -dijo
-¿que? estás loca, vamos Sea Smith Grey, no le terminare, ni porqué Ashton es tu primo, debes de apoyarme, una prima normal estaría feliz de esto....
-¡¡Cher!! Ashton es mi primo y todo lo que quieras pero no me dejas explicarte-
-Continúa -dije divertida.
-Si cortas con él, sabrás todo lo que hará, así te podrás hacer lo que quieras, y como él te ama, entonces él te dirá que no lo hagas pero tú dirás que él no tiene derecho sobre ti, o sea le pondrás reglas, y Ashton tendrá que aceptarlas -dijo algo obvia.- Es fácil, y estoy segura que va a funcionar, volverán en menos de lo que canta un gallo.
-Sea, luego hablamos de esto, ya casi llega TU primo -dije remarcando el TU.
-*rodó los ojos*- Cher por favor, sólo piénsalo. -dijo
-Adiós Sea- dije saliendo de su cuarto.
-Adiós Cher y piensa -dijo gritando.
Salí de su casa y crucé la calle para llegar a la mía, mi madre como de costumbre no estaba, solo su notita de "Fui al café, vuelvo a las 8" Creo que esa nota me hace más compañía que mi propia madre. Vi mi reloj de pulsera, era las 4:30 de la tarde, Alex mi hermanito seguro estaría jugando con el vecino, siempre quiere jugar con él, y papá, bueno papá vive en Guadalajara, yo quería irme con él pero no quería dejar a Ashton solo acá en la ciudad, pero estas 4 últimas navidades (los cuatro años que llevo con Ashton) nos hemos ido Ashton, mi hermanito y yo a Guadalajara a celebrar allá la navidad, Ashton la pasa con sus abuelos y yo con mi papá y mis abuelos, amo esas navidades, son mi época favorita del año, ¿de quién no? Lo que dijo Sea hizo que pensara, tal vez sería buena idea, hay Dios, pero que mala soy, ¿cómo podría hacerle esto a Ashton? pero tiene razón, debo de ponerle a Ash límites, él no debe de mandar sobre mí, seguro será bueno, ya me decidí, lo haré, pero no ahora, tal vez luego, necesito tiempo para planearlo, además una parte de mi me pide que no lo haga, podría salir alguno de los dos o los dos lastimados y eso nunca me lo perdonaría, Ashton es el amor de mi vida, pero si quisiera que él fuera un poquito más abierto, que su mente la abriera aunque sea un poco, no le cuesta nada hacerlo, al contrario, creo que sería un poquito más feliz de esa manera, Ashton suele ser muy duro y no le gusta ser abierto, tiene miedo de los cambias, me he dado cuenta de eso, he tratado de ayudarlo pero siempre salgo regañada y no es algo que me guste, odio hacerlo enojar porque deja de ser ese Ashton del que me enamoré, se convierte en un Ashton casi sin emociones, un Ashton que sólo se limita a contestar si, no, tal vez, adiós. Son los 5 minutos que más tortura me producen, no quiero hacerlo molestar más de lo necesario, sólo así podemos ser felices, independientemente de todo el amor que corre por mis venas, porque todo mi amor es para él, no sé en qué momento Ashton se convirtió en mi persona, en mi persona favorita, no soy capaz de cambiarlo por alguien más, ni siquiera había pensado en la posibilidad de cambiarlo, no creo que este amor se acabé, tengo mucho amor para darle por mil años más.
-¡¡¡Cher!!! -gritaron del otro lado de la puerta, era la voz del hombre que me hace temblar.
-¡Voy! -dije para agarrar mi celular y guardarlo en la bolsa de mi pantalón, abrí la puerta- Hola Ash –lo saludé nerviosa, pese al tiempo que llevamos juntos, nunca se me quitan los nervios cada vez que lo tengo así de cerca.
-Hola mi amor -dijo Ashton para después besarme, besarme como si no me hubiera visto en 10 años, como si no hubiera mañana, como si así nos quedáramos eternamente en esa forma, amo a este hombre con todo mi corazón- Te extrañé en todo el día, no dejé de pensar en ti y en lo mucho que me gustas.
-Eres un cursi de primera –le mencioné y él soltó una risa delicada.
-Sólo soy capaz de decir estas cosas cuando te veo, me inspiras y es algo que nadie lo había logrado.
-Te amo Ashton Grey –le dije acercando mi rostro al suyo.
-Créeme, no me amas más de lo que yo te amo a ti, eso es algo insuperable, nunca conocerás a alguien que te ame más que yo, tenlo por seguro. –y me volvió a besar como si no hubiera un mañana.