CAPITULO 33

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Lauren: jamás, nunca podre perdonarme lo que acabo de hacer. Quisiera haber saltado por la ventana.

Camila: querías demostrar que eres mejor que un hombre y copias lo peor de ellos.

Lauren: es que tú, ya no soportaba un insulto más de tu parte.

Camila: sí, tienes razón es mi culpa, acepto mi responsabilidad.

Lauren: no quise decir eso, la culpa es mía solo mía.

Comencé a cambiarme, es que no sabía qué hacer y mucho menos que palabras debían salir de mi boca, termine de vestirme y volteé para ver una vez más mi maldita obra, Camila estaba en ropa interior y se colocó una bata que estaba tirada sobre un mueble, me acerque para tratar de hablar con ella.

Lauren: déjame explicarte, mi amor. Trate de abrazarla pero me dio un enorme empujón mientras sus lágrimas brotaban y recorrían cada rincón de su cara.

Camila: ahora lárgate de mi vida para siempre.

Lauren: no me voy de aquí hasta que me escuches.

Camila: entonces quédate, que la que se va soy yo. Salió de la habitación a toda prisa, busque desesperadamente mis zapatos y salí corriendo detrás de ella. En el pasillo no había nadie, observe que el elevador se encontraba vacío, entonces salió por las escaleras, baje corriendo para alcanzarla, lo que acababa de pasar entre nosotras era un asco, pero tenía que impedir que me odiara más de lo que ya lo hacía; logre ver como estaba abriendo su auto y corrí como nunca antes para impedir que se fuera.

Lauren: Camila por favor espera, te lo suplico. No deje de correr ni un segundo.

Camila: basta ya de todo esto, déjame en paz. Justo cuando Camila cerraba la puerta con la mayor fuerza posible, intente tomarla con la mano, pero no calcule mi movimiento y solo se escuchó como tronaron los huesos de mi brazo derecho.

Lauren: hahahahahahahayyyyyyyyyyyyyy. fue el dolor físico más grande que había experimentado en toda mi vida, grité tan fuerte.

Mi mano me dolía terriblemente, estaba llorando desesperada, di varios pasos alrededor del auto tratando de controlar el dolor, me senté en la banqueta, gritando de dolor, ni siquiera sentía el frio el dolor del brazo era insoportable; ella bajo del auto y corrió, inclinándose delante mío.

Camila: hola, hola-no sé si por el dolor, pero su voz era tan DULCE como la recordaba-sube al auto que te tiene que ver un médico. Quería decir tantas cosas al verla frente a mí pero el dolor me ganaba y solo me quejaba, así que me levante, ella me abrió la puerta del copiloto y antes de cerrar.

Camila: espera un segundo. Salió corriendo hacia su departamento. Pasaron los tres, cuatro, cinco minutos más dolorosos de mi existencia cuando por fin apareció, cerró mi puerta y subió al asiento de chofer, llevaba una jeringa en la mano y me inyecto en el brazo izquierdo.

Lauren: a donde fuiste, pensé que me odiabas tanto que me dejarías morirme del mendigo dolor en tu auto, cómo venganza final.

Camila: es un sedante, té ayudara a no sentir el dolor por lo menos en lo que llegamos al hospital.

intentaba no mirar mi brazo y ver el daño esto se veía muy mal, pero me lo merecía, el dolor el sufrir. Vaya que esa cosa era bastante efectiva, porque lo último que recuerdo, es que el auto daba la vuelta para poder salir del edificio, mi brazo estaba tan mal que según me dijeron pase dos días en la cama de un hospital (el golpe fue tan fuerte que uno de los huesos del brazo rompió mi piel).

abrí los ojos y mi madre estaba a mi lado, me explico que tuvieron que operarme debido a la gravedad de la herida y que el medico había indicado que me mantuvieran sedada para evitar dolor, esas drogas sí que hacen su trabajo, por que a duras penas lograba entender lo que mi madre me explicaba, después entro Taylor solo para darme un beso y me dijo algo relacionado con Sinu o con Camila que tampoco entendí.

Comencé a quejarme nuevamente, pues el brazo me dolía, Taylor se despidió de mí y dejo en su lugar a una enfermera que después de ver algo en los aparatos, nuevamente inyecto algo en el suero; sentí como el dolor desaparecía lentamente pero estaba tan agotada por el dolor, pero también por Camila que decidí descansar un poco cerrando los ojos, pasé cerca de quince minutos con los ojos cerrados que cuando estaba punto de hundirme en los brazos de Morfeo, escuché que alguien entro a la habitación, seguramente era Lorena así que no abrí los ojos, escuche los pasos acercarse a mi cama, la voz que escuche me dejo completamente paralizada de la sorpresa y la emoción, era Mi niña.

Camila: desde el primer segundo en que te vi, supe que cambiarias mi vida, sólo que no sabía hasta que dimensiones, tú eres la persona que más he amado y también a la que más he odiado, él día más feliz de mi vida fue cuando me confesaste que me querías; pero me hundiste en el mismo infierno el ultimo día que nos vimos, sabes la loca de tu ex- mujer me hablo horas antes para confesarme que tú y ella se habían acostado el mismo día que tú y yo estuvimos juntas por primera vez, la mande al diablo porque me negué a creerlo, pero me dijo que podía comprobarlo esa misma noche en tu departamento, decidí enfrentarte y de haber sido verdad estaba decidida a pasarlo por alto, así de grande era mi amor, si solo hubiera sido eso, lo hubiera soportado pero cuando te vi esa noche en brazos de Renata y tus palabras acabaron conmigo.

Dios por que el ser humano se complica y se destroza así mismo la vida, ella me había amado, a tal grado de perdonar mi escarceo sexual con Renata, porque no se lo dije, porque no hable de lo que su madre nos estaba haciendo para acabar con nuestro amor; tuve la intención de abrir los ojos y decirle todas las cosas que estaban en mi pecho guardadas por años, pero decidí seguir fingiendo mi inconsciencia cuando mi piel se erizo de pies a cabeza por que logre sentir como me acariciaba con las yemas de sus dedos mi mano lastimada y la escuche romper en lágrimas.

Camila: te juro que voy a matar a mi madre por todo lo que te hiso-se agacho para darme un beso sobre la palma de la mano que pude sentir como sus lágrimas la mojaban-por todo lo que nos hiso, Taylor me ha confesado toda la verdad, aunque demasiado tarde, demasiado tarde mi amor, cómo podrás perdonarme todo el dolor que has tenido que pasar por mi culpa, él rechazo de tu familia, la cárcel, te casaste con Renata cuando debiste hacerlo conmigo, todo tu dolor mi amor, Lauren las lágrimas que derramaste por mi culpa no te las voy a poder recompensar en toda esta vida; cuándo regrese a tu vida, té juro que no sabía nada de esto, me dedique a hacerte pagar cada uno de los días que me hiciste sufrir, cuando en realidad me estabas salvando; en todo este tiempo solo nos hemos lastimado, nos hemos hecho tanto daño, nos hemos lastimado a tal grado que ya no hay marcha atrás.

Continuaba llorando desesperadamente, con la cabeza colocada sobre mi estómago, que ni siquiera se percató que a pesar de tener los ojos cerrados mis lágrimas salían de forma torrencial, ni siquiera yo supe en que momento comencé a llorar, escucharla decirla todo esto me lastimaba.

Camila: quiero que sepas una cosa en todos estos años no hubo un segundo que no sufriera por ti, no hubo un solo segundo en que dejara de amarte, a pesar de todo el dolor y el sufrimiento, jamás deje de hacerlo, te hago la promesa de que nunca voy a dejar de hacerlo; pero en estos meses te he lastimado tanto y viceversa, porque cada vez que decía o hacia algo para dañarte me lastimaba a mí misma; sé que he acabado con todo lo bueno que sentías por mí y lo acepto, aceptó esa responsabilidad, por eso me voy de tu vida para siempre mi amor, solo espero que algún día encuentre alguien que te amé, te dejo Lauren, mi amor, te abandono para siempre. Oí como sus pasos avanzaron rumbo a la puerta, dios este era el momento, tenía que tomar una decisión rápido, sí permitía que ella saliera de mi vida sería para siempre, sería capaz de borrar todo el dolor que nos hemos provocado, todas las heridas físicas, todos los insultos, sería capaz; solo tenía que abrir los ojos y hablar, solo eso; ENTONCES POR QUÉ NO LO HACÍA, escuche como llegaba a la puerta y escuche como sus pasos se alejaban por el pasillo.

Lauren: "tienes razón Camz, el daño es demasiado grande, lo único que nos queda es avanzar en la vida, alejarnos para evitar destruirnos, necesitamos tiempo para superar la tormenta de estos meses". me repetí a mí misma estas palabras con toda la intención de creérmelas, ahora por lo menos estaba segura de que Camz me amaba tanto como yo a ella, pero ambas teníamos que poner en paz nuestras vidas pero sobre todo nuestro sentimientos, pero las lágrimas no dejaban de salir para inundar mi rostro.

QUEDAN SOLO 5 CAPITULOSSSSSSSSS ASIQUE ESO ACUERDENSE QUE LAS LEO YA EL DRAMA SE ACABARÁ SOLO TENGAN PACIENCIA jajajajajaj gracias de nuevo por leer esta linda y dramática historia jajajajajaj besos y abrazos

La Niña que me Robo el Corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora