Capítulo 12

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Faltaban aún dos horas de camino, ya habíamos hecho una parada, así que, era un lugar muy lejano, pero según los rumores de los militares, era un lugar seguro, con suficientes suministros, suficientes armas, municiones, suficientes personas para cubrir la guardia, habitaciones de sobra para todos aquellos que quisieran quedarse o descansar por ahí, era casi como el paraíso en esta situación.

-¿Crees que ese lugar sea realmente como lo relatan?- le pregunté a la doctora Ann.

-Si los militares nos lo describieron así, incluso podría tener castillos y princesas...- reímos.

-Espero que sea mejor de lo que todos imaginamos...- solté un gran suspiro, de verdad quería que fuera así.

Cuando llegamos a la ubicación que nos habían dado, no encontramos nada; todos de inmediato se decepcionaron, claro, era demasiado bueno para ser verdad.

Pocos minutos después de nuestra decepción, escuchamos ruidos, y segundos depués, nos encontraron los exploradores de Charlestton, el Coronel Weaver, habló con ellos, y de inmediato nos llevaron a la base.

La entrada de la base estaba realmente bien resguardada por los militares, y cuando entramos, todo fué mejor, éramos como niños en una juguetería; tenían electricidad, claro, no como en un centro comercial, pero eso bastaba; había una cantidad incalculable de sobrevivientes, y ninguno se veía preocupado; había un comedor con espacio suficiente para todos, tenían una cocina, y parece que lo de las habitaciones era cierto. Charlestton era mejor de lo que describían.

Al adentrarnos más a la base, pudimos notar como las miradas de los sobrevivientes se posaban poco a poco hacia nosotros, además de que nunca nos habían visto, les llamaba la atención nuestras armas, ellos no las portaban, y probablemente tampoco querían que nosotros portáramos las nuestras. Y así fué, tuvimos que dejar nuestras armas, por un lado tenían razón, al parecer era más seguro en Charlestton, tanto que no necesitábamos armas.

Empezaba a hacerce tarde, así que los sobrevivientes de Charlestton, fueron muy amables al llevarnos a las habitaciones; cuando estaba a punto de llegar a la mía, un grupo pequeño de niños pasó jugando a un lado mío, estaban tan distraídos con sus juegos, por lo que no se dieron cuenta de mi presencia y me empujaron, tropecé y caí.

-¿Puedo ayudarte?- un jóven, ofreció su mano para ayudarme a levantarme, yo por cortesía acepté.

-Gracias...-

-¿Tu nombre, linda?-

-Soy Meloddy...- no quise hacerle mucha plática, así que no pregunté su nombre.

-Pues, yo soy Brad, por cierto tienes un bonito nombre...-

-Gracias, y... me dió gusto conocerte, pero ya tengo que ir a dormir, realmente estoy cansada.-

-Está bien, descansa, linda- el jóven se fué, y yo hice lo mismo, me dirigí directo a mi habitación.

Al entrar a mi habitación, me sorprendí, ¡había una cama!, extrañaba las camas, tan suaves y cómodas. Me senté en una de las orillas de la cama, y abrí la mochila que traía con mis pertenencias, y recordé mi collar... el collar con las fotos de mis hermanos; estuve buscándolo por varios minutos, pero cuando me tranquilicé, recordé que la mochila también se había caído cuando yo caí... Lo perdí...

Me tranquilicé, y decidí buscarlo con más calma por la mañana, si alguien lo encuentra, deberá buscar al dueño.

Historia adaptada de ''Falling Skies''Donde viven las historias. Descúbrelo ahora