Cap. 3 Sentimientos encontrados

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POV. Larry

Estaba volviendo a casa, llegue a mi departamento y no había nadie, la casa estaba vacía ni un alma pasaba por adentro sólo una suave brisa era lo que se escuchaba en la sala justo después de haber cerrado la puerta. Busqué con la mirada a mi madre, no la veía por ningún lado.

-¡Mamá, llegué!

Silencio, tal vez seguía trabajando y todavía no había llegado. Como sea. Me fui a mi habitación o como le digo yo: mi cueva. Puse la música a todo volumen y empecé a pintar. Mi primera idea para el cuadro trataba de una flor siendo recogida del suelo por alguien, luego me decidí por dibujar otra cosa. Otra persona.

Llevo 3 minutos pensando en como hacer el cuadro, sigo sin saber cómo pintarlo. Decido salir de mi cueva para ir a la casa del árbol que mi padre construyó en el patio de los departamentos antes de desaparecer, tal vez allí me da más inspiración. Mientras salgo un viento fuerte sopla haciendo que las ramas de varios árboles se muevan delicadamente (tal y como su caminar), miro hacia arriba, el cielo está con algunas nubes grises, pero se puede ver parte de ese cielo celeste (Tal y como sus ojos)

Mientras entraba a la casa del árbol y empezaba a pintar una tenue lluvia de verano empieza a caer, las gotas caen lentamente golpeando con el techo de chapa de la casa (me pregunto ¿como sera verlo llorar?). Seguí pintando y para cuando me di cuenta ya se estaba haciendo de noche. Volví a mi cueva, la lluvia no se había detenido y ahora era mucho más fuerte. Salí de mi habitación y un olor a comida inundaba mis fosas nasales. Se me hace agua la boca. Se nota que mamá llego a casa.

-¡Que rico olor!- Exclamo con emoción, ese olor agrio que venía desde la cocina era tan delicioso. Juro que podía saborearlo con el simple hecho de olerlo, algo me decía que ya sé de lo que se trata. Dirigí mi paso hacia la dirección del olor, es decir la cocina.

-¿Te gusta mi amor?- Dijo mi madre con ese tono dulce de siempre, sonreí en respuesta cuando la pregunta del millón se me vino a la cabeza.

-¿Que vamos a comer?-

Mi madre hizo el típico "hmmm" de estar pensando, resultó extrañamente cómico por lo que solté una suave risa ante esa acción.

-No lo sé, dime tú.- Dijo. Enseguida entendí lo que era, el frío, la lluvia.

-¡¡¡GUISO!!!- Grité con euforia alargando la "O".

Esta noche hacia frío por la pequeña lluvia, un guiso será de maravilla.

Mientras terminaba de comer me empecé a preguntar muchas cosas como ¿Cocinara? y si cocina ¿Cocinara bien? ¿cómo será besarle? ¿sus labios serán suaves? Detuve mis pensamientos un momento, ¿Qué estoy haciendo pensando eso sobre mi mejor amigo? Es un hombre y eso está mal, no debería hacer esto. Terminé de cenar y fui rápido  mi alcoba. Me tiré en la cama y solté un muy pesado suspiro. Seguro es la escuela lo que me mantiene tan pensativo, sí, seguro es eso. Me puse mi pijama e intenté dormir, pero había algo que no me dejaba ni en lo más mínimo. La imagen de Sal se me vino a la mente, no puedo creer que esté pasando esto. Recuerdos se me vinieron a la cabeza, sucesos dónde estuve tan cerca de su rostro, tanta era la cercanía que nuestras respiraciones chocaban nosotros no hacíamos nada, sólo nos mirábamos a los ojos como si fuera lo más normal del mundo. Un muy fuerte rubor se subió a mis mejillas, de un momento a otro me obsesioné con esos recuerdos y empecé a rebuscar más sobre ellos en mi memoria. Hubieron tantos y no me di cuenta ni en lo más mínimo de lo adorable que es, su voz es tierna y melodiosa que hace que mis canciones preferidas se vuelvan algo muy pequeño. Su cadera fina la cual me gustaría abrazar todo el día, a decir verdad su cuerpo es muy afeminado, podría decirse que es mujer pero es hombre. Sus ojos, aquellos que me cautivan todos los días y podría estar observando por horas tal y como una pintura. Él es una obra de arte, es perfecto. Oh dios, me gusta mi mejor amigo. No, no me gusta, seguro se debe al estrés de la escuela. Quiero decir; no puedo pensar bien. Eso. Necesito intentar dormir, a la mañana seguramente estaré mejor. Cerré mis ojos intentando conciliar el sueño pero algo no me lo permitía. El deseo de amar a alguien que no sé si corresponde a is sentimientos me aterra. Si Sal no corresponde a mis sentimientos no sé qué haré ¿Por qué pienso es en esto hora? Necesito calmarme y distanciarme lo más posible de lo que me causa estrés. Supongo que hasta acá llegó mi amistad.

[Fin del cap 4]

Doy creditos a mi abuelita querida de mi corazón , mami de mi mami, fuiste la unica queme ayudo a escribir este cap. Aunque tuve que engañarte diciendo de que era hombre y mujer pero eso no importa, el tema es que me ayudaste a terminar el capitulo GRACIAS.

¿Te Digo Un Secreto? Te Amo (Larry x Sal) [Editando]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora