Sostenía con fuerza sus libros de la siguiente asignatura, mientras caminaba a un paso moderado, siendo inconsciente de todas las miradas que eran dirigidas hacía él.
Rulos dorados cayendo en su frente, sus labios rojos y levemente abultados, mejillas con un tono carmesí por haber pasado mucho tiempo en los rayos del sol, y su fiel boina que lo acompañaba donde él fuese.
Tan ensimismado en su mundo, que jamás se percató que había robado ya varios corazones, lindo no era suficiente para describirlo.
Mientras escuchaba música en sus auriculares no se daba cuenta que ya todos sabían acerca de él y de su nuevo apodo "el chico de la boina"
Será un harem donde no sólo será BTS, meteré a varios ídolos de otros grupos.
Por cierto, mi primera historia.