Natalia es una chica con un solo sueño, conocer a sus ídolos.
Natalia siempre se sintió sola, pero gracias a las canciones de Adexe y Nau siguió adelante y superó cada momento difícil de su vida. Y llegado el momento su sueño se cumplió.
En esta h...
Narra Natalia: Me desperté temprano esta mañana. Sí, estaba algo agotada, pero que más da. Me vestí con mi ropa deportiva:
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Salí al jardín y volví a coger mi arco y me puse a tirar a diana mientras cantaba una de mis canciones favoritas: "Dame sabor". La adoro. Es mi canción preferida. De repente, escuché que alguien estaba detrás mía, pero no le hice caso, ya que estaba dándole la espalda a la casa de mis nuevos vecinos. Entonces escuché que alguien seguía la letra y cantaba conmigo. Era.... Natalia: ¿Adexe? -Dije dejando de cantar rápidamente.- ¿Cuánto tiempo llevas escuchándome cantar? -Dije poniéndome roja como un tomate.- Adexe: Vaya, si hubiera sabido que pararías de cantar cuando yo cantara contigo mi canción, no hubiera cantado. Natalia: No respondiste mi pregunta. ¿Cuánto tiempo llevas escuchándome cantar? Adexe: Desde que empezaste. Natalia: ¿¡Qué?! Adexe: Oye, oye, tranquila. Cantas muy bonito, no tienes de qué avergonzarte. Natalia: Vale, me da igual. Ahora, ¡fuera de mi jardín! Adexe: Vale, vale, pero que sepas que no te librarás de mí tan rápido. Natalia: ¿¡Cómo!? ¡Estás flipado! ¡Si de verdad crees que caeré en tu estúpida trampa, estás muy equivocado, así que MÁRCHATE! Adexe: Ya me voy, ya me voy. -Dijo marchándose a su casa.- Ese chico qué se cree, que soy una estúpida chica cualquiera con la que puede jugar. Pues NO. No caeré en sus estúpidas trampas.
Pero, tú quieres estar con él. Tú quieres que sea tu estúpido. ¡No es cierto, Laika! ¡Cállate! Sí que es cierto. Y tú lo sabes. ¡Qué no! ¡Qué sí! ¡Qué no! ¡Qué sí! ¡Qué no! Y no hay más que hablar.
Ya llegó la hora de irme a buscar a Lore. Llegué a su casa y como de costumbre me abrió su madre. M.L: Hola, Natalia. Mi hija está arriba dormida como de costumbre. Natalia: Lo suponía. ¿Puedo pasar? M.L: Claro, pasa. Tú cómo en tu casa. Ya lo sabes. Natalia: Gracias. Subí al cuarto de Lore y le dije: Natalia: ¡Lore arriba! Lore: Mmmmmm, no quiero. -Dijo adormilada y tapándose con las sábanas.- Natalia: No me hagas despertarte yo. Lore: No.... -Dijo tapándose más.- Natalia: Muy bien. No me dejas más opción. -Cogí un vaso de agua de su mesa de noche y se lo eché por encima.- Lore: ¡¡¡¡¡Aaaaaaaahhhhhh!!!!!! ¡¡¡¡¡NATALIA!!!!! ¡¡¡¡¡ESTÁS MUERTA!!!!! ¡¡¡YA PUEDES CORRER!!! Natalia: Tú lo buscaste. -Dije encerrándome en su cuarto de baño.- Lore: ¡¡¡NATALIA VÁZQUEZ TORTI SÁNCHEZ PALMERO!!! ¡¡ABRE LA PUERTA AHORA MISMO!! Natalia: Nop. No hasta que no te prepares para el instituto. Lore: Está bien. Esta te la puedo pasar. Pero con una condición.... Natalia: ¿Qué condición? -Dije abriendo la puerta.- Lore: Hoy voy a tener una cita con Nau. Pero quiere que vayamos las dos. Natalia: ¿Por qué? Algo aquí me huele a chamuscado. Lore: Vale. Pero tienes que venir. Sino me vengaré. Natalia: Ok, ok. Pero debes prometerlo. Lore: Está bien... Prometo no vengarme, por esta vez. Natalia: Vale, ahora me fío más de ti. Lore se preparó. Mientras, yo la esperaba y escuchaba música con mis auriculares. Salimos hacia el instituto. Cuando llegamos nos encontramos con una masa enorme de chicas. Estaban mirando a alguien. Natalia: ¿Quién está ahí? Chica 1: ¿No lo sabes? Son Adexe y Nau. Ahora vienen a nuestro instituto. Natalia: ¿¡Qué!? Adexe: Lo que oíste. Ahora venimos a este insti. Natalia: Oh, ¡Qué alegría! -Dije sarcástica.- Nau: Natalia, tranquila. Pasa de mi hermano. -Dijo poniendo una mano sobre mi hombro.- Natalia: Está bien. Lore: ¡Nau! Nau: ¡Lore! ¿Qué tal? Lore: Bien. Dijo que sí. Nau: ¿En serio aceptaste pasar la tarde con Adexe, Lore y yo? Natalia: ¿¡Cómo!? ¡No dijiste nada de que también iría Adexe! Ya sabía yo que algo me olía a chamuscado. Lore: Bueno, si no quieres, no tienes por qué hacerlo. Sólo que ahora sí podré vengarme. Natalia: Vale, vale. Pero no te vayas a vengar. Lore: Muy bien. Vamos a clase, ¿si? Vamos a llegar tarde. Llegamos a la clase y nos sentamos donde siempre. Por desgracia Lore no se sienta conmigo. Soy la única de mi clase que no tiene compañero, ya que sobran asientos y son de dos y los sitios nos los elige la tutora. Al poco tiempo de empezar la clase llegó el director con.......¡Oh no, mi peor pesadilla, es Adexe! No digas eso. Sabes de sobra que esperabas ansiosamente que estuviera en las mismas clases que tú. ¡No! Eso no es cierto, Laika. Sí lo es. Sí, sí, claro, claro, lo que tú digas. -Nótese el sarcasmo. Cuando volví a la realidad la profesora decía: Profe: Muy bien, clase. Pues continuemos. Adexe, puedes irte a sentar con la señorita Vázquez. Natalia, levante la mano. Obedecí a la profesora y levanté la mano. Adexe se aproximó hacia mí y se sentó a mi lado. Adexe: Hola, parece que ahora somos compañeros. Natalia: Tú solo cállate. Necesito atender para aprobar. Y que te quede clarito, mejor no me moleste, que demasiado que te tengo que aguantar como vecino, y ,por desgracia, ahora también como compañero de asiento. Adexe: Entonces, ¿por qué vienes esta tarde? Natalia: Solo lo hago para que Lore no me gaste ninguna broma ni nada por el estilo, ya que está mañana para despertarla le tiré un vaso de agua. Las clases se pasaron rápidas y aburridas, como de costumbre. Al terminar salí con Lore. Y las dos nos fuimos a mi casa. Allí realizamos las tareas. Llegaron las 4 y media y Lore se fue a su casa a ducharse. Me dijo que después de media hora vendría para maquillarme y peinarme. Me duché y me vestí así:
