🎆 Día 4 🎆

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En una cita
Freddy: 17 || Fred: 17
Relación: Pareja de mes y medio

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El clima era cálido, de hecho mas que cálido, pero la habitación y casa de Freddy se encontraba fresca. Que viva el aire acondicionado

En ese momento Fred estaba en la casa de Freddy. Su cuerpo sintió el alivio al notar lo fresca de la casa de su novio, sin embargo un estornudo fué el resultado del cambio brusco de clima

- Oh, Hola Fred!, no te escuché entrar - habló la madre de Freddy sin molestia, pues estaba un poco acostumbrada a que la pareja de su hijo se metiera de pronto a su casa - Si buscas a Freddy está en su habitación, al parecer está batallando con algo, lleva haciendo berrinche tiene rato -

- Iré con él para que se tranquilice. Gracias y que tenga un buen día Sra Fazbear, compermiso -

- Te lo he dicho, solo llamame Martha - ambos sonrieron y Fred se dirigió a las escaleras. A veces le sorprendía lo increíble y atenta que era la madre del castaño

Al parecer Martha tenía razón, pensó Fred al escuchar a Freddy resongar y resoplar con molestia. Tocó la puerta suavemente tratando de que el enojo del mas pequeño no aumentara. Freddy le abrió la puerta y esa expresión de molestia se esfumó en un segundo, lanzandose al cuerpo de su novio eufóricamente logrando así que ambos casi cayeran al suelo

- Si que estás emocionado por verme - Seguido de decir eso Fred soltó una risilla como una pequeña burla al ver las mejillas de Freddy tomar un color rosado, y se levantó junto a el

- Adelante, pas- Parpadeó algunas veces al ver que su novio no le había hecho caso y entró, se sentó en su cama llevandolo con el y lo acomodó quedando recargado en el pecho de Fred mientras este lo abrazaba. Su cara ardía y sus manos sudaban, nunca podría acostumbrarse a esta nueva faceta de Fred

Los brazos del pelinegro se aferraron mas a Freddy con la intención de no dejarlo ir en un buen rato - ¿Mejor? - La expresión de Freddy se llenó de confusión - ¿A qué te refieres? - Levantó su mirada lo mas que pudo para encarar a Fred, pero al no lograrlo, regresó a su anterior posición - Te escuché resoplar y bueno, pensé que esto tal vez, te calmaría... - A Fred le gustaba ver a Freddy positivo aunque muchas de esas veces su positividad se viniera abajo por algun contratiempo que llevaba su nombre, sin embargo, odiaba ver a Freddy enojado o de mal humor

- Estoy bien es solo... Estaba practicando un poco para el concierto. Tu sabes, no tengo tu talento natural ni el de Bonnie, tampoco el de Golden, nisiquiera el de Chica así que, me toca ensayar mas - Su mirada se agachó y se encogió en su lugar.

El mas alto aprovechó para colocar su cabeza en el espacio entre su cuello y su hombro y recargarla ahí - Eres tan genial como nosotros Freddy, perteneces al mismo lugar que nosotros aunque no quieras verlo - Freddy sonrió melancolicamente. Fred era malo con estas cosas, pero una idea surcó su mente mientras Freddy al parecer estaba llamandolo. Luego de unos cuantos microsegundos el plan estaba hecho, solo faltaba que Freddy acepta- - FRED! ME ESTAS ESCUCHANDO!?

- ¿Q-Qué? - tomando la compostura, carraspeó un poco - Por supuesto que si Freddy, ¿decías? - Debía poner su plan en marcha, no le gustaba ver a Freddy tratando de esconder lo que le agobia, quería liberarlo del estrés

- Yo ahm, aún no estoy acostumbrado a, estas cosas, así que uhm... - El pelinegro captó la situación, viendo apenas el rostro lindo y perfecto de Freddy con sus mejillas rosadas.

Desde que comenzaron a salir lo único que había logrado hacer con Freddy era tomarse de las manos y darle un par de caricias en la cabeza, y el tenerlo abrazado por la cintura y estar recargado en el era un gran paso, uno que a ninguno de los dos les incomodó, aunque sus nervios estuvieran al tope, sin embargo Fred no soltó su fino agarre, mas bien lo fortaleció, atrayendo mas a su timido novio hacia el

● 30 DÍAS || FREDEDDY ●Donde viven las historias. Descúbrelo ahora