La gente dice que las cosas suceden por algo, que no cuestione la palabra de Dios, pero desgraciadamente mi mente esta tan abierta que no dejo que me metan ideas cerradas. No digo que no creo en Dios, solo que su palabra se ha mal interpretado, la gente se ha dejado meter ideas dependiendo su religión, pero todas llegan a la misma conclusión, si no hay respuesta: “Sólo Dios sabe” “No cuestiones la voluntad de Dios” si Dios da lo que se merece a cada quien ¿por qué hay niños pequeños en África sufriendo de hambre? ¿Qué hicieron para merecer eso? O ¿por qué gente inocente muere en un accidente automovilístico por culpa de un ebrio y el ebrio sobrevive? O en mi caso ¿Por qué a los 17 años me quita a la única persona que me entendía y me quería tal y como soy? Sólo soy un chico que necesita a su madre, no he hecho nada malo para que Dios decida quitarme a mi madre…
Me miraba al espejo acomodando el traje, Sentí escalofríos miré detrás de mi al espejo y ahí estaba ella sonriendo, mi madre tan radiante pero tan muerta…
-no sé porque sonríes, nunca me vi bien de traje…- le dije.
Ella desapareció porque se escucharon 2 golpes en la puerta.
-Harry…- era Liam en la puerta.
-pasa…- dije con voz ronca.
Entraron Liam y Louis;mis mejores amigos.
-¿ya estás listo?- preguntó Louis.
Asentí y él sonrió.
-aun no lo estás…- dijo ayudándome a ponerme la corbata correctamente.
-nunca aprendí a ponérmela bien…- confesé mirando hacia abajo.
Nunca tuve a mi padre ahí para enseñarme cómo usar correctamente una corbata, así como miles de cosas más.
No me quejo, mi madre me educó perfectamente, tuve la mejor madre de todas, pero por supuesto que hay cosas que solo un padre puede enseñarte.
Mi rostro permanecía inmóvil observando el ataúd descender lentamente mientras todos estaban ahí sin saber que decirme o como mirarme, el sacerdote dijo las últimas palabras de la oración y me pidió que echara las flores, besé las flores y sentí una lágrima recorrer mi rostro, aventé las flores, empezaron a tirar tierra encima del ataúd, terminaron y pusieron la lápida mientras muchos empezaban a retirarse.
-me tengo que ir hermano… pero si necesitas algo puedes llamarme- dijo Louis abrazándome.
-me voy con él, me dará un aventón a mi casa- me dijo Liam.
-claro… se van con cuidado.
-te quiero…- Me abrazaron los 2 fuertemente.
Se fueron, sólo quedaron los hombres del panteón que les pedí que pusieran las flores favoritas de mi madre a la tumba y un hombre, sé perfectamente quien es él, pero prácticamente es un extraño…
La sentí al lado de mi.
-¿es él,cierto?- le pregunté y la vi asentir.
Él empezó a acercarse y mi madre desapareció.
-Harry…- me tomó del hombro- es hora de irnos…
-de acuerdo…- contesté sin mirarlo- te alcanzo en tu casa iré por algunas cosas…- dije dándole la espalda
Subí a mi auto y arranqué, me dirigí a mi casa o mi ex casa que ahora estaría en venta, no sé por qué no puedo quedarme yo con la casa y vivir solo, pero él se empeñó en que me vaya a vivir con él, no entiendo por qué, yo estoy enterado que él ama su vida viviendo solo como soltero.