•.¸♡ ɢᵒˡᵈᵉⁿ ᴇˣᵖᵉʳⁱᵉⁿᶜᵉ - ᶜᵉᵃʲᵒˢᵉ ♡¸.•

III.

   El rubio abrió sus ojos de par en par topándose con cierto castaño de labios gruesos, se cruzó de brazos y volteó la mirada sintiéndose avergonzado, los ojos contrarios lo observaron de pies a cabeza, aquel castaño se limitó a tragar saliva e instantáneamente se dió media vuelta con intensión de marcharse.

-¿Me traerías una camiseta de repuesto?- Joseph quedó estático y simplemente asintió, por alguna razón ver su torso desnudo lo incomodaba un poco -gracias.

    Caminó en dirección a la habitación que compartía con el rubio, claro que recordaba la ubicación de ésta, después de todo fue lo primero que le enseñaron. Y en ése momento se maldijo por no haber preguntado la ubicación del baño.

   Una vez cogió la camiseta de su compañero caminó en dirección al mismo, la suave tela embelesaba su tacto, la acercó a sus orificios nasales para terminar inhalando un dulce aroma hipnotizador. Llamó a la puerta un par de veces esperando respuesta alguna del contrario.

-¿Jojo?- Caesar asomó su cabeza por el otro lado de la puerta, el mencionado le extendió la camiseta, ésta fue tomada por el otro quien se apartó de la entrada facilitándole el ingreso al otro.

   Una vez acabó de vestirse dirigió su mirada al castaño quien lo observaba con un leve tono carmesí en sus mejillas, le sonrió gentilmente recogiendo su camiseta mojada del sillón que anteriormente había ocupado.

-Puedo ser muy torpe aunque no lo creas- dijo el de ojos esmeralda señalando cierto vaso de plata tirado sobre la alfombra dando a entender que había sido el causante de todas las consecuencias.

-Ya veo...- el joven Joestar se encontraba fuera de sí, le había sido difícil articular alguna respuesta y el rubio pudo notar aquello.

-Jojo, ¿Sucede algo?- frunció el ceño mirando fíjamente a los ojos contrarios.

-No lo creo- respondió Joseph ladeando la cabeza, el otro asintió acomodándose en el sillón donde ahora se sentaba.

-¿Quieres hablar? ¿Es por eso qué has venido hasta aquí y te has comportado tan amable?- una sonrisa ladina se formó en sus labios, tomó un tenedor de los tantos que se encontraban sobre la mesa de centro y dió pequeños toques a los bocadillos.

-¡Ah! Es cierto, quería preguntarte algo- dijo con el semblante serio, suspiró pesadamente recibiendo un ademán de mano de parte del otro para que continuase -el baño...¿En qué dirección se encuentra?- la reacción de Caesar fue épica, habría que tomarle una fotografía.