El Conductor de Uber

Capítulo 1- Expectativas

República de Vienavia - Escuela Preparatoria Moiam.

"Por último, debemos aprender que todas las circunstancias que atravesamos nos ayudan para bien, no dejemos de soñar y no olvidemos que la vida da oportunidades."

Y así concluí mi discurso de grado llena de sensaciones indescriptibles y sentimientos que no había experimentado en mis 17 años de vida, minutos más tarde recibí mi título y un reconocimiento a la mejor de la clase, ver lágrimas en los ojos de mis padres fue la mayor sensación de orgullo que sentí al estar en aquel auditorio, sus abrazos cálidos me trasmitían paz y confianza al mismo tiempo que sus palabras me llenaban de ánimo y seguridad para continuar cada día hacia mis metas.

- Estoy tan orgulloso de ti hija, me siento tan agradecido con Dios por tenerte, desde el primer día que estuviste en mis brazos supe que estarías llena de victoria y logros, eres una de las razones que tengo para sonreír todas las mañanas – así fueron las palabras de mi padre.

- Así es Beatrice –añadió mi madre- eres una chica con talentos y mucha bondad, eres excelente hija y responsable en todo lo que haces, pero sobre todo eres mi mayor orgullo linda, llegaras muy lejos.

Sentí tanta felicidad por graduarme y tanta nostalgia al pensar en mis amigos de preparatoria, en ya no volver a verlos todos los días como es costumbre, salir en grupo para la piscina con tanta frecuencia, ahora todo sería más distante , más lejano , más complicado , cada uno con sus preocupaciones de universitarios al igual que yo.

Y lo peor de todo es que no me gradué con la persona que amaba, Jean, mi novio, repitió el último año de preparatoria por segunda vez, aunque todos decían que él no tenía remedio yo creía y creo en él, pues llegue a pensar que estando a mi lado cambiaria y se graduaría por fin. Ya vi que me equivoque pero aun lo amo y no sé cómo hacer para ayudarlo. Dudo de su amor por mí algunas veces, luego se me pasa esa sensación de no sentirme amada. En los últimos tres días no he recibido ninguna llamada de él o un mensaje, ni siquiera en mi graduación.

- ¿Beatrice qué piensas? ven un rato con nosotras –dijeron mis mejores amigas- te esperamos afuera.

Dejando de despreocuparme decidí olvidar todo aquello que me impedía disfrutar mi graduación.

Al salir del auditorio veo a mis amigas tomándose fotos con sus celulares y a todo mi grupo de clases haciendo lo mismo. Olvidando todo, me uní a ellos y empecé a vivir ese día.

Las fotos salieron geniales, pero aún no llegaba el fotógrafo que contratamos para la foto grupal. Decidimos esperar antes de llamarlo, aunque ya era un poco tarde, mientras tanto hablaba con mis amigas.

- Y pensar que estos años pasaron súper rápido -dije- tanta prisa que tenía por graduarme y ahora no quiero irme ni despedirme.

- Estos años se fueron sin avisar, yo tampoco quiero despedirme, no quiero pensar que no vendré más en la semana a entregar tareas atrasadas –dijo Gia tratando de hacer divertida la conversación.

- Dejen la cursilería, esto es una graduación, no un funeral, estamos aquí para celebrar unos cuantos años de preparatoria terminados y los años que faltan hasta ser profesionales –Dijo Gillian.

Ok, abro un gran paréntesis en este punto para decirles que mis mejores amigas son gemelas y por mucho que se parezcan físicamente sus personalidades son muy diferentes, lo abran notado por sus expresiones.

Gia es muy práctica y todo lo dice con intensión de hacer reír, mientras que Gillian tiene una personalidad muy compleja, es muy expresiva y directa.